Darío Barassi y Agustín Aristarán protagonizan la nueva producción de Disney+, con elenco binacional

Una sitcom familiar con acento argentino

En ‘C.H.U.E.C.O.’, el conductor de ‘Ahora caigo’ encarna a un profesor viudo, padre de tres hijos, que recibe como herencia un chimpancé, al que que el actor de ‘Matilda’ le presta la voz. Su postura frente a las críticas.

La primera sitcom de Disney+ producida en Latinoamérica se llama ‘C.H.U.E.C.O.’ y debuta este viernes  en esa plataforma de streaming con una primera temporada de trece episodios y elenco binacional. Junto con nuestros compatriotas Darío Barassi y Agustín ‘Rada’ Aristarán actúan la comediante mexicana Consuelo Duval y los jóvenes talentos, también aztecas, Santiago Torres, Maryel Abrego y Pato Alvarado Loza.

La serie se rodó hace algo más de un año, a lo largo de casi cuatro meses “que hemos disfrutado un montón”, admite Barassi en un encuentro con La Prensa, del que también participa Aristarán. Si bien la acción de la tira transcurre en México, en una casa del barrio residencial El Pedregal, en el sur de la capital, todos los episodios de ‘C.H.U.E.C.O.’ fueron grabados en los estudios Non Stop de Munro.

Barassi encarna a Juan Gustozzi, un profesor de música porteño, padre de tres hijos, que queda viudo y que, cuando las cuentas impagas comenzaban a taparlo, recibe la noticia de que heredó una fortuna que viene acompañada de un chimpancé llamado Chueco, también argentino, que tiene la particularidad de hablar (su voz es la de ‘Rada’).

Juan Gustozzi (Barassi) y sus hijos, alarmados por las reacciones de Chueco, un chimpancé que tiene la capacidad de hablar.

-Es un formato poco habitual en nuestro medio. ¿Qué les atrajo?

(Aristarán) -El formato sitcom, para actores a los que nos gusta mucho la comedia, tanto consumirla como performarla, es ideal. La sitcom, sin una rítmica de comicidad no existe. Por eso, un proyecto así, para el actor que trabaja el código del humor es un sueño, es lo que quiere hacer.

(Barassi) -Además, los libros son bárbaros, tentadores. Y el personaje de Chueco, el mono, es atractivo per sé. De manera que no tuvimos muchas dudas en participar.

MULTIGENERACIONAL

-Podría pensarse que el producto está destinado al público infantil. ¿Es así realmente?

(DB) -Uno tiende a pensar que porque es Disney y porque hay un ‘puppet’ es obligatoriamente para chicos. Pero la verdad que no. La intención es que la familia hispanohablante -e incluso la que no lo sea, porque el lanzamiento es global- se sienta atraída. Tengo la esperanza de que sea un producto multigeneracional. Así como es un humor que aplica para cualquier país, también lo es para cualquier edad.

El trabajo de doblaje de Aristarán fue posterior al rodaje y se extendió a lo largo de un mes. No es la primera vez que el actor encara esa faceta dentro de su profesión dado que, “sin ser doblajista”, como aclara, le prestó su voz a la hiena Kamari en la remake de ‘El Rey León’ de 2019, también del coloso Disney. Esta vez, cuenta, “me llegaron los episodios ya terminados, con la libertad de agregar o sacar palabras en función de la gestualidad del mono y de cómo se desarrollaba cada escena. Fue un desafío actoral maravilloso”.

En este punto, Barassi revela que para darle vida al muñeco “trabajó tanta gente detrás como los que aparecíamos en cámara; es una gran apuesta de Disney en ese sentido. Ya de entrada, el set está construido a cierta altura para que las personas que guían al mono pudieran moverse. Hay una persona que se ocupa de los pies, otra de las manos, y la gestualidad del rostro y la cabeza se manejan a distancia, con una técnica llamada ‘puppetronic’”.

Barassi, padre de familia.

-¿Cómo le resultó la experiencia?

(DB) -Yo tenía, no sé si decirle temor pero sí cierta inquietud de cómo iba a ser actuar con un ‘puppet’. Pero la verdad es que Chueco estaba recontra vivo en el set, los ojos le brillaban. Además, conociendo a Agustín, yo ya lo pensaba con su color. Resultó mucho más fácil de lo que esperaba, y más enriquecedor. Porque en comedia también sucede que uno espera la reacción del otro, una devolución de tu compañero que termina de armar la situación cómica. Y eso verdaderamente pasó con Chueco. Fue una sorpresa muy grata.

-¿Y qué pensó cuando vio al muñeco hablar con la voz de Agustín?

(DB) -Ahí decayó (risas). No, no, si ya Chueco me resultaba algo mágico, cuando Agustín le puso su impronta sin duda que lo hizo crecer. Hoy lo veo y creo que cada capítulo está perfecto, redondito, en su punto justo para disfrutarlo.

LAS CRITICAS

Hace ya varios días, Barassi publicó un posteo en sus redes sociales en el que recogió el guante ante los primeros comentarios adversos sobre ‘C.H.U.E.C.O.’ al difundirse el trailer de la serie. “Que va a ser una bomba…El gordo no es gracioso…Barassi es un capo…Que el muñeco es raro…El mono está divino….Todos Mexicanos!!? Todos Mexicanos!!!! Opiniones hay miles, por suerte; realidad hay una y se conocerá el 14/7”, escribió.

Aristarán, la voz de Chueco.

-¿Qué siente cuando escucha que es un plagio de ‘Alf’?

(DB) -Son críticas que las tomo dentro del espacio donde suceden. Al ego lo tengo bien colocado y esas cosas no me preocupan. Estoy muy conforme con el producto que estamos haciendo, realmente creo que es una bomba. Por otra parte, me gustó que se generara todo esto. Uno cuando labura pretende generar un movimiento. Ese movimiento puede disparar para cualquier lado, puede despertar admiración o críticas, o puede arrancar siendo una crítica y transformarse en algo más amigable, que creo que es lo que puede pasar acá. Si bien Twitter es una red con una tendencia hacia la crítica más que a ponderar, en otras redes todos estaban fascinados con el trailer y esperando ver la temporada completa. ‘C.H.U.E.C.O.’ tiene una impronta distinta, única. Es una serie original que, obviamente, te puede recordar otras cosas pero que tiene personalidad propia. Está bueno que aún antes de debutar esté generado movimiento y soy consciente de que es así nuestro laburo. Toda apreciación de una expresión artística es subjetiva y está bueno que así lo sea. En ese sentido no me enrosco.

-Entre esos mismos comentarios algunos destacaban que la serie recupera un tipo de humor que se perdió.

(DB) -Yo creo que sí, que tiene un humor familiar pero que no necesariamente es blanco y naif. Es un tipo de humor que puede interpelar a padres y madres, a abuelos, y a los chicos, claro. Ojalá las familias se reúnan a disfrutar de este producto.