Una actividad clave antes del entrenamiento: la entrada en calor

La entrada en calor o calentamiento previo es una parte fundamental de cualquier rutina de entrenamiento o práctica de deportes. Es el momento que debemos dedicarle a nuestro cuerpo para que se adapte y se prepare para realizar actividades físicas que requieren otro nivel de exigencia. Hacer una pausa en la rutina laboral, dejar la inmediatez con la que vivimos últimamente y destinar el tiempo necesario para preparar nuestro organismo y nuestra mente para realizar la actividad física elegida. 
Una entrada en calor efectiva incluye ejercicios de movilidad articular, estiramientos y movimientos que están relacionados con las actividades que se realizarán durante el ejercicio principal. Esta práctica nos ayudará a aumentar gradualmente la frecuencia cardíaca, la temperatura muscular y la flexibilidad, previniendo posibles lesiones. 
Se realiza de manera progresiva, incrementando la intensidad y los movimientos, a medida que se va “calentando” el cuerpo. Algunos ejemplos son: caminar o trotar suavemente de 5 a 10 minutos, balanceo de piernas, giros de tronco y círculos con los brazos, rotaciones articulares para hombros, caderas y tobillos. 
Es muy importante no realizar movimientos bruscos durante el proceso. La selección del tipo de entrada en calor depende del deporte o actividad física que se vaya a realizar. Por esta razón, siempre recomiendo contar con un entrenador personal que planificará una rutina adaptada a tus condiciones físicas y objetivos. 
Es fundamental realizar la consulta previa con tu médico de cabecera, quien hará una evaluación integral y te otorgará el apto físico. 
Una buena entrada en calor otorga beneficios tanto para la salud como para el entrenamiento: aumenta la circulación sanguínea hacia los músculos, mejorando el rendimiento durante el ejercicio; reduce el riesgo de lesiones ya que los músculos, tendones y ligamentos se preparan adecuadamente para el esfuerzo; los músculos al calentarse mejoran la flexibilidad; aumenta la amplitud de movimientos articulares y permite que la mente se enfoque en el deporte o actividad física que vamos a desarrollar. No cabe duda de que realizar una entrada en calor adecuada y controlada, siempre será positiva para llegar en las mejores condiciones a un nivel de esfuerzo mayor.

Claudio V. Penna
Prof. Nac. de Educación Física 
@lospenna