Un padre reclama justicia: su expareja se llevó a su hija a Rusia y España y pide que sea imputada por sustracción
Dmitry Saparov, ciudadano ruso radicado en Argentina, denunció que su expareja, Anna Zinovyeva, sacó del país a su hija sin autorización durante la pandemia y la llevó primero a Rusia y luego a España.
Un padre ruso que residió en Argentina volvió a denunciar a su expareja por impedirle el contacto con su hija, a quien se llevó sin autorización a Rusia durante la pandemia y, más tarde, a España. Dmitry Saparov reclama ahora ante la Justicia bonaerense que se reactive la causa por sustracción de menores contra Anna Zinovyeva, madre de la niña A.M.S., de nacionalidad argentina.
Según consta en el expediente, los hechos se remontan a 2020, cuando Saparov se encontraba en Bolivia por motivos laborales. Al regresar, descubrió que su pareja había abandonado el país y se había marchado con su hija. “No estaban separados. Ella le mandó un mail diciendo que estaba en Rusia”, explicó su abogado, Rodrigo Tripolone.
Desde entonces, Saparov inició una búsqueda internacional que lo llevó a contactar embajadas, consulados y escuelas hasta ubicar a la menor en Rusia. En 2021, Interpol emitió una “Notificación Amarilla” para localizar a la niña y un “Alerta Roja” contra la madre. Sin embargo, ambas alertas fueron dadas de baja en 2023, luego de que se lograra ubicar a Zinovyeva y se intentara un acuerdo de revinculación familiar en Barcelona.
Ese intento de acercamiento fracasó. En los últimos días, el abogado de Saparov presentó un nuevo escrito judicial en el que denuncia que la madre incumplió el acuerdo y bloqueó toda posibilidad de contacto. “Estos hechos configuran un bloqueo deliberado y continuo del vínculo paternofilial, vulnerando el derecho a la comunicación directa”, sostiene la presentación.
El padre relata que durante su último viaje a España, en octubre de 2025, tenía planificados encuentros con su hija. Había comunicado con anticipación las fechas y recibió respuesta de la madre, que reconocía el viaje. Sin embargo, una vez en Barcelona, Zinovyeva no permitió los encuentros, justificándose en que la niña no quería verlo. “La comunicación fue casi nula. Solo hubo una videollamada”, afirmó Saparov.
Ante esta situación, el denunciante pidió que se declare la nulidad del acuerdo conciliatorio homologado y que se reanude la acción penal contra Zinovyeva por sustracción de menores. También solicitó que se mantengan las medidas de cooperación internacional y protección, para garantizar un nuevo intento de revinculación bajo supervisión judicial.
“Los casos como Loan y Lian -y mucho antes, el de Sofía Herrera- son solo la vidriera de algo que sucede a mayor escala. El hecho de ser la madre no disminuye su responsabilidad. Actuó con dolo”, argumentó el abogado Tripolone, al remarcar que su cliente lleva cinco años intentando recuperar el contacto con su hija.
Mientras la causa avanza en la Justicia provincial, Saparov insiste en que no busca castigar a la madre, sino recuperar la relación con su hija, que no ve desde que tenía apenas unos pocos años. “Solo quiero volver a hablar con ella”, expresó en su declaración.
