Actualidad
“Proyectos a futuro”
Por Walter Santoro (*)
Gardel entendía claramente que su futuro se encontraba en el cine, industria en donde no solo podía generar grandes ingresos, sino que también era una actividad que disfrutaba. Una vez terminada la gira, Gardel tenía pensado regresar a Nueva York para arreglar sus compromisos cinematográficos, que consistían en la producción de otras dos películas más con la Paramount.
Después viajaría a Toulouse a buscar a su querida “viejita” y volver a la ciudad de Buenos Aires para realizar una serie de audiciones radiales, que en ese momento Defino estaba negociando, y que bajo el auspicio publicitario de “Cafiaspirina” Gardel cobraría un altísimo caché, inédito en la radiofonía argentina. Gardel estaba decidido a terminar de moldear una fortuna que le permitiera vivir con tranquilidad y disminuir de alguna manera el frenético ritmo de sus obligaciones profesionales.
Después de tantos años de cantar casi sin pausas, llevaba en sus espaldas el cansancio de infinidad de giras, ensayos, conciertos, audiciones radiales y filmaciones. Lo testimonian sus cartas a Defino.
En una de ellas, escrita en medio de la gira por Latinoamérica, le comentaba: “Es muy posible que no haga ninguna actuación teatral en Buenos Aires y en Montevideo y que me limite solamente a cantar por radio. El trabajo teatral es demasiado fatigante y yo quisiera hacer un largo paréntesis en las tareas teatrales y dedicarme a radio y cine. Mi porvenir económico está en el cine y lo compruebo cada vez más al ir visitando estos países donde mis películas han batido todos los récords. Con un par de buenas películas por año, sobre todo si la mayor parte de lo que producen viene para mí, puedo ganar una fortuna, con escaso trabajo y con comodidades. Creo que es mejor que me vean lo menos posible en Buenos Aires y que esperen mis películas para darse el gusto. Cada día se me hace más pesada la faena de cantar una o dos veces diarias, de vestirme y de desvestirme y de ensayar repetidamente”.
(*) Presidente de la Fundación Internacional Carlos Gardel.
Gardel entendía claramente que su futuro se encontraba en el cine, industria en donde no solo podía generar grandes ingresos, sino que también era una actividad que disfrutaba. Una vez terminada la gira, Gardel tenía pensado regresar a Nueva York para arreglar sus compromisos cinematográficos, que consistían en la producción de otras dos películas más con la Paramount.
Después viajaría a Toulouse a buscar a su querida “viejita” y volver a la ciudad de Buenos Aires para realizar una serie de audiciones radiales, que en ese momento Defino estaba negociando, y que bajo el auspicio publicitario de “Cafiaspirina” Gardel cobraría un altísimo caché, inédito en la radiofonía argentina. Gardel estaba decidido a terminar de moldear una fortuna que le permitiera vivir con tranquilidad y disminuir de alguna manera el frenético ritmo de sus obligaciones profesionales.
Después de tantos años de cantar casi sin pausas, llevaba en sus espaldas el cansancio de infinidad de giras, ensayos, conciertos, audiciones radiales y filmaciones. Lo testimonian sus cartas a Defino.
En una de ellas, escrita en medio de la gira por Latinoamérica, le comentaba: “Es muy posible que no haga ninguna actuación teatral en Buenos Aires y en Montevideo y que me limite solamente a cantar por radio. El trabajo teatral es demasiado fatigante y yo quisiera hacer un largo paréntesis en las tareas teatrales y dedicarme a radio y cine. Mi porvenir económico está en el cine y lo compruebo cada vez más al ir visitando estos países donde mis películas han batido todos los récords. Con un par de buenas películas por año, sobre todo si la mayor parte de lo que producen viene para mí, puedo ganar una fortuna, con escaso trabajo y con comodidades. Creo que es mejor que me vean lo menos posible en Buenos Aires y que esperen mis películas para darse el gusto. Cada día se me hace más pesada la faena de cantar una o dos veces diarias, de vestirme y de desvestirme y de ensayar repetidamente”.
(*) Presidente de la Fundación Internacional Carlos Gardel.