No es la única manera

Sr. Director:

No es cierto que la única manera que tiene el actual Gobierno Nacional para solucionar la situación económica de nuestro país sea a través de un bestial ajuste a la clase media, como se está realizando.

Es cierto que este Gobierno fue votado por el 56% de la gente. Es cierto que apenas lleva dos meses de gestión.

Es cierto que recibió una terrible herencia social y económica como nunca antes se había visto en la Argentina, con el 50% de la población sumergida en la pobreza y en la indigencia.

Es cierto que hay que equilibrar las cuentas fiscales, el déficit comercial, solucionar el tema de la inflación, cumplir con nuestros compromisos de deuda externos, no emitir más dinero, achicar el Estado Nacional, Provincial y Municipal todo lo que sea posible, y ser confiables en el mundo para atraer reales inversiones de calidad para poder sanear nuestra situación económica y poder crecer.

Es cierto que la gente ya no quiere saber nada con 20 años de kirchnerismo y con decenas de años previos de malos manejos económicos de gobiernos peronistas, radicales, conservadores o militares.

Es cierto que la gente aún confía en lo que pueda hacer Milei.

Lo que no es cierto es que, para lograr todo eso, haya que realizar un bestial ajuste en la clase media argentina, la clase trabajadora que, con el pago de sus impuestos y con su sacrificio es la que sostiene al país.

No podemos esperar 45 años para ser Alemania, como propone Milei, sacrificando en ese tiempo a millones de argentinos con privaciones de todo tipo, y expulsando al extranjero a miles de jóvenes, y no tan jóvenes, que buscan desesperadamente un futuro mejor.

Tenemos en este país todo tipo de recursos naturales que el mundo necesita. Tenemos también recursos humanos, técnicos y científicos, que son valorados en el mundo entero.

Es sólo cuestión de tener imaginación, voluntad, capacidad de trabajo y, sobre todo, honestidad para gobernar correctamente y utilizar lo que Dios nos ha brindado: Producción agrícola, ganadera, minerales, gas, petróleo, energía, transporte, turismo y un inmenso Mar Argentino lleno de recursos naturales que, bien utilizado, podría multiplicar los ingresos del país para hacer crecer nuestro Producto Bruto Interno de forma exponencial.

La sociedad argentina le pide al Gobierno cuestiones concretas: seguridad, producción y trabajo, estabilidad económica, educación, salud, cultura, ciencia y técnica, posibilidad de crecimiento económico y social a través de un trabajo digno, y ver en sus gobernantes una actitud austera y de respeto por su pueblo.

Y, sobre todo, que concluya definitivamente la corrupción por parte de los gobernantes, de los políticos, de los sindicalistas y de los empresarios, que por décadas se han enriquecido a costa de la gente lo que ha desembocado en la triste realidad de nuestro país.

Se puede lograr el saneamiento de nuestra economía de esta manera, con decisión, imaginación, capacidad y honestidad, para accionar en todos aquellos sectores dónde realmente se debe ajustar: la casta política, la casta sindical y la casta empresarial, y no profundizando sin sentido la presión sobre la gente trabajadora y sobre la clase media de nuestro país.

DANIEL SACO

DNI: 16.559.976