Mariano Taccagni, la alegría del éxito y una obra que quedó trunca
El actor, dramaturgo y director volvió a 'Mamma mía', el musical con las canciones de ABBA, trece años después de haber trabajado en él. Destaca la emocionalidad de los intérpretes argentinos y cuenta qué pasó con su comedia ‘Somos Only Fans’.
No son muchos los que saben que, lejos de la sala de ensayo y de las luces del escenario, Mariano Taccagni es un abnegado profesor de Lengua y Literatura que ejerce la profesión docente hace más de tres décadas. “No lo postergo por nada porque cuando la vocación está viva después de tanto tiempo es un milagro”, admite en el inicio de un diálogo cálido y sincero con La Prensa.
A Taccagni, hijo orgulloso de un histórico apuntador de la televisión y el teatro argentinos, se lo conoce más por su faceta de actor, director y dramaturgo de sólidos recursos y destacado recorrido escénico, donde se lució en el último tiempo como el sufrido Jonathan Harker del ‘Drácula’ de Cibrián-Mahler, entre muchos otros trabajos.
Hoy integra el elenco de ‘Mamma mía’, el entusiasta musical basado en las canciones de ABBA que sale a escena en el Auditorio de Belgrano, mientras prepara el regreso de ’Somos Only Fans’, obra que escribió y dirigió hasta hace unos días y que le trajo aparejada una enorme desilusión que la que todavía intenta reponerse.
VOLVER, VOLVER
En 2012, Mariano Taccagni interpretó un personaje pequeño en la puesta de ‘Mamma mía’ estrenada en el Teatro Opera, y fue además reemplazante de dos de los tres padres de Sophie, la joven protagonista. "Hace un par de años, cuando supe que la obra volvería a hacerse, hablé con Ricky Pashkus (director de la nueva versión) y le recordé que yo ya la había hecho, pero como estaba en la gira de 'Drácula' no pude asistir a la audición y no quedé en el elenco. Tiempo después me sumé a 'Kinky Boots', también dirigido por Ricky. Finalmente, el año pasado me llamaron para un reemplazo en 'Mamma mía' en el Coliseo y este año me convocaron otra vez, pero para algo aún mejor: ser alternante de los roles protagónicos masculinos", cuenta el intérprete. Esto significa que realiza al menos una función semanal en cualquiera de los personajes centrales, además de ser el cover de todos ellos. "Algo bastante esquizofrénico", bromea.
Junto con Marisol Otero, Jorge Carna Crivelli, Flavia Pereda, Guadalupe Devoto, Bruno Coccia y parte de ensamble, el ingreso de Taccagni le insufló un aire fresco y renovado a la puesta que estrenó Florencia Peña en Villa Carlos Paz en enero de 2024. "Es una obra que ha andado muy bien y prolongar ahora la temporada es una maravilla -celebra el actor-. 'Mamma mía' es una fiesta. Los productores de Broadway que vinieron cuando la hicimos en 2012 la llamaban ‘el antidepresivo de los musicales’. Es como un cumpleaños, siempre. Y la sala actual nos ayuda: el Auditorio de Belgrano tiene un jardín hermoso en el ingreso, hay un food truck con cosas ricas; todo el teatro transmite algo del clima de la isla en la que después transcurre la acción".
Taccagni, Alejandro Paker, ‘Carna’ Crivelli y Pablo Silva, los ‘padres’ de Sophie en el nuevo reparto de ‘Mamma mía’.
Para Taccagni, 'Mamma mía' representa también un feliz reencuentro con Marisol Otero y Alejandro Paker, colegas con los que trabajó en 'Grease' en 2001, “¡hace veinticuatro años!” Con ella coincidió luego en la primera versión argentina de 'Mamma mía'. "Hace unos días cantaba con Marisol en la obra y pensaba lo conmovedor que es volver a interpretar un rol que hice hace tanto tiempo y asumir ahora el mismo desafío pero con otras herramientas. Había notas que antes me acobardaba cantar, recuerdo; hoy sé cómo hacerlo y sé cómo pararme en el escenario de otra manera. Son muchos años de carrera que van dejando enseñanzas".
-¿Qué diferencias encontró entre aquella versión que dirigió Robert McQueen, el mismo que montó la obra en Broadway, y esta que firma Pashkus?
-Siento que Ricky fue inteligente en darle una impronta muy popular y hasta cómica a una historia que, si bien es bastante lineal, tiene cierta profundidad. Yo me reí un montón y también me emocioné al verla. Para mí es como estar haciendo otra obra siendo la misma. Acá nadie le falta el respeto al libro original, eh, pero hay algo de lo apasionado que somos los argentinos que a veces los directores de afuera licuan. Me pasó en 'Lovemusik', que hice con Elena (Roger). Esa era una historia muy pasional; sin embargo, el director (Jonathan Butterel), que es un genio, había hecho una dirección muy aséptica. Y a nosotros nos salía algo profundamente latino del cuerpo, difícil de esconder. Butterel no entendía por qué nos emocionábamos y llorábamos en escena. La mirada de los directores, sin duda, siempre está muy arraigada a su cultura, al lugar de donde vienen y la forma en que se criaron.
TRAGO AMARGO
El pasado 7 de mayo, Taccagni, en calidad de autor y director, estrenó en el Regina una comedia musical inspirada en el fanatismo que supo ver en el público que acompañó la última gira nacional de ‘Drácula’. ‘Somos Only Fans’ contó con las actuaciones de Lorena Paola, Jorge Maselli, Flor Regina, Emmanuel Degracia, Natalia Mouras, Facundo Miranda, Meri Arratibel, Joaquín Caso y un gran elenco, con música original y dirección musical de Daniel Landea, coreografías de Rodrigo Villani, diseño de iluminación y dirección adjunta de Alejandro Vázquez. Ariel Ciocco (‘Chicas de New York’, ‘Despeinada’, próximamente ‘La historia sin fin’) fue el productor general de este proyecto que fue dado de baja después de realizar apenas dos funciones.
-¿Qué fue lo que pasó?
-La obra tuvo la desdicha del desencuentro, de la no comunicación profesional. Se canceló por problemas que no tienen que ver con el área artística sino con cuestiones técnicas y de producción. Y que tampoco se relacionan con lo material, porque el productor invirtió muchísimo dinero. Pero cuando lo material no se pone al servicio del producto, cuando no resulta cómodo ni grato ver una obra, el esfuerzo es en vano.
Con el diario del lunes Taccagni juzga como “un error” no haber contado con un diseñador de sonido dentro del equipo, “un rol que muchas veces en el teatro independiente no es tenido en cuenta”. La música y las letras de las canciones no se escuchaban bien y eso dificultaba la comprensión por parte del espectador. Cómo fue que un reclamo del equipo directivo en ese sentido derivó en la cancelación total de la temporada a solo dos funciones del debut, es un misterio.
Ya antes, ‘Somos Only Fans’ había tenido que lidiar con una superposición de programación que impidió que se estrenara en el Apolo, tal como había sido anunciado inicialmente. Una vez en el Regina, todo marchaba sobre rieles. “La expectativa era quedarnos todo el año -dice el creador-. Ahora bien, señalar algunas cuestiones y pedir una solución a necesidades artísticas que teníamos es algo que un productor debe aceptar y, dentro de sus posibilidades, tratar de orientar”, analiza.
Un elenco de diecisiete actores y actrices dio vida a ‘Somos Only Fans’ en la breve temporada del Regina. (Foto gentileza Atomobit)
Productor y director se habían conocido cuando el primero invitó al artista a cantar en el ciclo ‘Broadway en concierto’. “Fue muy amoroso conmigo”, lo recuerda Taccagni. “Me dijo de trabajar juntos, yo ya tenía esta obra y todo se fue dando. La tarea del teatro -entiende- es solidaria, de escucha, de tratar de comprender lo que el otro necesita, y el producto final es el resultado del entendimiento entre todos. Acá hubo un no escuchar que fue en detrimento del espectáculo y del ánimo de todos nosotros, que nos quedamos pasmados, nos sentimos desalojados. No podrán decir que soy conflictivo ni que hubo una falta de respeto de mi parte porque, de tan respetuoso, toda la vida me pasé de boludo. Pero es algo que a mí me sirvió en mi carrera. Si hubiese sido un irreverente, un irrespetuoso, no habría trascendido ni el primer elenco”.
Con el concurso de todo el elenco, con nueva escenografía y vestuario, ‘Somos Only Fans’ se reestrenará en breve en otra sala y con una novedad: es probable que ahora tenga músicos en vivo. “Me sentí muy reconfortado porque la solidaridad del medio fue inmensa e inmediata. Asumo que es por el camino profesional que he hecho, siempre consciente de que el espacio escénico es sagrado”, se despide Taccagni, emocionado.