Tras su salida de América se reinventó y trabaja entre Miami y Buenos Aires

Lisandro Carret, de los medios y la actuación a las franquicias

El hijo del recordado ‘Pato Carret’ conduce un ciclo radial y otro televisivo, al tiempo que asesora a inversores y lidera una productora de contenidos.


De la televisión al cine y de la radio a las relaciones públicas, Lisandro Carret no sabe de rutinas. A los 51 años reparte su vida entre Buenos Aires y Miami, ciudades que de un tiempo a esta parte son testigos de su espíritu incansable y de sus logros en el campo de la comunicación y las artes escénicas y audiovisuales.

Hijo del recordado Rafael ‘Pato’ Carret, el animador y actor superó el fin de su etapa como bastonero de la música tropical (condujo durante nueve años el ciclo ‘Pasión de sábado’ por América) y ha sabido reconvertirse. Hoy es director y representante del Centro Cultural Argentino de Miami en nuestro país, además de director artístico de Jet Lag Entertainment, productora que lidera junto al empresario Marcelo Culotta.

De todos modos, no ha abandonado del todo los medios: participa del ciclo televisivo ‘Franquicias que crecen’, que emiten Canal 9 y Telefe Internacional, al tiempo que se desempeña como consultor de franquicias en los Estados Unidos, ayudando a quienes lo convocan a hallar oportunidades de inversión. Asimismo y desde el programa radial ‘Puente cultural’, que emite Conexión Abierta los jueves a las 13, ofrece un pantallazo de la presencia argentina en La Florida y los nexos con nuestro país en distintos campos, en compañía de Melina Mar y de Roberto Macho, presidente de la Cámara Argentina de Comercio en aquel rincón de los Estados Unidos.

LOS PIES EN LA TIERRA

Carret habla de sus proyectos con el entusiasmo de un adolescente. Sueña en grande “pero con los pies en la tierra”, como se encarga de aclarar. Dos años atrás vivió un renacer después de abandonar la conducción televisiva para asumir nuevos desafíos. "Estoy saliendo de la zona de confort -admitió en aquel momento ante La Prensa-. Es el resultado de un proceso largo, no fue de un día para el otro. Ser capricorniano me lleva a tener siempre los pies sobre la tierra, más allá de que mi ascendente en Sagitario me haga un ser creativo y aventurero. También juega en esto la experiencia familiar. Mi viejo tuvo proyectos en los que le fue muy bien y en otros, muy mal. Entonces aprendí que esa posibilidad siempre hay que tenerla en cuenta. Más aún cuando ya tenés una familia y no podés embarcarte en una aventura de soltero”, contó.

Carret se alejó de la conducción de ‘Pasión de sábado’ en julio de 2023. "Pero el proceso había comenzado cinco años antes. Para entonces yo ya había hecho la experiencia de vivir en Estados Unidos. Me había ido a grabar un disco cuando terminé mi participación como conductor en 'Feliz Domingo' y me quedé tres años”. Su regreso al país se debió a complicaciones en la salud de su padre; Lisandro quiso estar a su lado. "Perdí un montón de cosas pero no me importó nada, aunque siempre me quedó la espina de qué hubiese pasado si me quedaba", reconoció.

En 2018 se asoció con otro argentino, Marcelo Culotta, un empresario de referencia para la comunidad latina de Miami, y juntos fundaron la productora de contenidos, soluciones audiovisuales y espectáculos Jet Lag Entertainment. Superado el mazazo que significó la pandemia, los negocios comenzaron a florecer para ellos, aquí y allá. "Siento que estoy cosechando la siembra de muchos años -afirmó-. Hacemos las cosas de manera muy prolija y eso lleva a que la gente quiera trabajar con nosotros".

Junto al ‘Pato’ Carret. “Me comprometí a demostrarle que puedo estar un poco mejor cada día”, asegura.

PREPARADO

Licenciado en Comunicación Audiovisual, locutor nacional, coach ontológico, animador, actor, músico y compositor, Lisandro Carret abrazó a pie juntillas el consejo paterno de que “cuando llegue una oportunidad laboral no te encuentre tirado en la cama sino preparado para poder aprovecharla”. Fue así que, entre negocio y negocio, el año pasado participó de la película ‘Después del final, de Pablo César, que participó en el Festival Internacional de Cine de Mar del Plata, entre otros certámenes. Y no se detiene.

Nacido en Buenos Aires "por cuestiones de la obra social", a los diez días de vida la familia regresó a Villa del Dique, Córdoba, su “lugar en el mundo", que es adonde sigue volviendo cada vez que el trabajo se lo permite.

-¿Cuál de las muchas actividades que realiza lo describe mejor?

-Yo soy artista. Desde chico experimenté todas las facetas del escenario desde el circo, donde cubrí todos los roles, de boletero a payaso y de mago a productor, sonidista y animador.

-¿Qué heredó de su padre?

-El amor por la familia y el respeto por el público y por los compañeros. También el profesionalismo, la costumbre de llegar temprano a los compromisos. Y disfrutar siempre el presente. Papá me dijo una vez 'a mí no me importa si llegás a ser el mejor actor del mundo, o si sos médico o albañil; a mí me importa que seas feliz'. Y cuando él ya no estuvo pude trasmutar el dolor en algo positivo y me comprometí a demostrarle que puedo estar un poco mejor cada día.