En los últimos días proliferaron las encuestas con una intención de voto más favorable a Javier Milei que las aparecidas inmediatamente después del triunfo de Sergio Massa. De dieciocho mediciones, doce dieron ganador al primero y seis al segundo. De estas últimas, dos correspondieron a una consultora vinculada al kirchnerismo. Con la proyección de indecisos y la eliminación del voto en blanco y de la abstención los resultados no variaron. Circuló intensamente la versión de que los resultados favorables a Milei eran difundidos por Massa para captar el voto “miedo”. En fin.
El dólar no cree en encuestas
El dólar blue que había bajado hasta los $840 tras el triunfo de Sergio Massa recobró impulso y terminó la semana en los $960, la misma cotización que había alarmado tanto al oficialismo antes de las generales. Los especialistas atribuyeron el hecho a que ante la inminencia de la definición electoral, ahorristas e inversores habían aplicado su estrategia de siempre: huir del peso y dolarizarse. No creen ni dejan de creer en las encuestas, pero tomaron las ganancias obtenidas durante el veranito de Massa que pisó la cotización para dar idea de estabilidad ficticia. En síntesis: fin de la paz cambiaria.
¿A quién votarán los insatisfechos?
La última encuesta de la Universidad de San Andrés da como ganador del balotaje a Javier Milei. Lo ve imponiéndose por 37% a 31% sobre Sergio Massa. Detecta, además, un 13% que no sabe a quién votará, un 10% que no responde, un 4% que no irá a votar y un 5% que piensa hacerlo en blanco. De esa manera si se excluye el voto en blanco y los ausentes, el voto a Javier Milei sería del 40% y un 34% para el candidato peronista. El 64% está insatisfecho con el resultado de la primera vuelta. De ese grupo el 95% votó por Juntos por el Cambio que quedó fuera del balotaje. Ahora, ¿a quién votarán?
El voto de los perdedores
Otro dato relevante de la medición hecha por la USA es cómo se reparte el voto de los que votaron por candidatos que quedaron fuera del balotaje. Sergio Massa retiene el 91% del voto propio, el 3% del voto a Bullrich, el 2% del de Milei, el 15% de Schiaretti y 37% del de Bregman. Milei, por su parte, retiene el 89% del voto propio, el 62% del voto a Bullrich, el 18% del voto a Schiaretti y el 8% de Bregman. Conclusión: es muy fuerte el traspaso de votos de Bullrich a Milei, mientras el voto de Schiaretti está muy peleado entre ambos candidatos. Se confirma también el apoyo de la izquierda al PJ.