La mayoría K avanzó en el Senado con el aumento para los jubilados
En una inédita reunión que incumplió los requisitos reglamentarios habituales. La oposición emitió tres controvertidos dictámenes para otorgar una mejora general del 7,2% a los jubilados y un bono de 70 mil pesos a los que perciben la mínima.
La mayoría kirchnerista de la Comisión de Presupuesto y Hacienda del Senado emitió, en una inédita reunión que incumplió los requisitos reglamentarios habituales, tres controvertidos dictámenes a favor de proyectos con sanción de Diputados que contemplan un aumento del 7,2% para todos los jubilados, un bono de 70 mil pesos para los que perciben el haber mínimo, la reapertura de la moratoria que permite jubilarse sin los aportes exigido por el sistema previsional y la declaración de la emergencia en materia de discapacidad.
Los siete legisladores peronistas fueron apoyados por dos radicales, Martín Lousteau y Pablo Blanco, y la senadora del PRO de filiación larretista, Guadalupe Tagliaferri. Los tres legisladores adoptaron desde hace tiempo un fuerte sesgo antigubernamental y no renovarán sus bancas en las elecciones de octubre. Sin su presencia el peronismo no habría podido deliberar ni emitir dictámenes.
La reunión no tiene antecedentes en la historia de la Cámara Alta porque la convocatoria no fue hecha por el presidente de la comisión, el libertario Ezequiel Atauche, sino por el vicepresidente, el “albertista” Fernando Salino, ni fue comunicada como sucede habitualmente a la Dirección de Comisiones, el cuerpo de taquígrafos y el canal de televisión del Senado, por lo que no existe registro oficial de lo ocurrido.
Los senadores peronistas se quejaron de la falta de televisación del encuentro y de ser “censurados”, mientras que el presidente provisional de la Cámara, el libertario Bartolomé Abdala, consideró inválido los dictámenes por “vicios” de procedimiento.
Por su parte, el presidente del interbloque justicialista, José Mayans, anticipó la voluntad de su sector de llevar los tres dictámenes al recinto el jueves próximo para lo que cuenta con el quórum prácticamente asegurado, así como de la mayoría para convertir las tres iniciativas en ley. Si el oficialismo plantea reparos formales a los dictámenes, la senadora K Anabel Fernández Sagasti anticipó que pedirá que el cuerpo vote la interpretación del reglamento para dirimir la controversia.
La insólita “autoconvocatoria” de la oposición fue la respuesta a la demora por parte de Atauche en fijar una fecha para comenzar el estudio de los proyectos que tienen un alto costo fiscal y ninguna fuente de financiamiento real. Como el Gobierno ya anunció que los vetará, el objetivo opositor es hacerle pagar el costo político en plena campaña electoral.
La intención de apresurar el debate de los tres proyectos que frenaba el oficialismo ya se había manifestado un día antes cuando en la Comisión de Trabajo y Previsión el kirchnerismo forzó su tratamiento en contra de la voluntad de su presidenta, Carmen Álvarez Rivero. Ayer completó el trámite en forma apresurada porque en julio habrá dos semanas de receso por las vacaciones de invierno y en agosto hay negociaciones de la Casa de Gobierno con senadores “dialoguistas” para que la Cámara no funcione.
El kirchnerismo, en cambio, pretende también aprobar antes de fin de mes otros proyectos de duro impacto fiscal como la coparticipación del impuesto a los combustibles reclamada por los gobernadores y presentada ayer en la Cámara.