La UTA no aceptó la última oferta de los empresarios y este martes habrá paro nacional de colectivos
El sindicato de la UTA no aceptó hoy la última oferta salarial que le acercaron los empresarios del sector y ratificó el paro de colectivos para este martes en todo el país.
"Lo último que ofrecimos fue para mayo un sueldo remunerativo de 1.240.000 pesos y 50.000 no remunerativo; para junio un remunerativo de 1.270.000 y 50.000 no remunerativo y para julio un remunerativo de 1.310.000. Se cayó la negociación. La UTA no aceptó ninguna de las opciones que ofrecimos", sostuvo a la prensa uno de los empresarios que participó de la reunión.
El gremio, por su parte, reclama un básico de 1.700.000 pesos, por lo cual el ofrecimiento quedó lejos del pedido y las tratativas terminaron fracasando.
Las reuniones virtuales entre representantes del sindicato que conduce Roberto Fernández; de las cámaras empresarias de colectivos (FATAP, AAETA, CEAP, CETUBA, CTPBA y CEUTUPBA) y del Gobierno se realizaron a contrarreloj durante la tarde, con alguna esperanza de levantar la medida de fuerza, pero voceros de las distintas partes avisaron desde temprano que iba a ser complejo que se llegara a un entendimiento.
Así, las líneas que no brindarán servicios serán la 1, 2, 4, 10, 12, 15, 17, 19, 22, 29, 32, 33, 34, 37, 39, 41, 42, 45, 46, 47, 49, 53, 55, 59, 60, 61, 62, 63, 64, 65, 67, 68, 70, 71, 75, 78, 86, 87, 88, 90, 92, 93, 95, 96, 97, 102, 103, 105, 109, 110, 111, 113, 114, 118, 119, 123, 124, 126, 127, 128, 129, 133, 136, 140, 143, 145, 148, 151, 152, 153, 154, 158, 159, 160, 163, 166, 169, 172, 174, 176, 178, 179, 180, 181, 182, 184, 185, 193, 194 y 195.
Por su parte, el Grupo DOTA (Doscientos Ocho Transporte Automotor) informó que no se adherirá al paro de la UTA, por lo que las líneas que integran esta empresa prestarán servicio con normalidad.
El Gobierno buscó desmontar el paro, pero con la conciliación obligatoria ya cumplida, que incluso imposibilitó que la UTA se sumara al paro general de la CGT del 10 de abril, el margen de maniobra era menor.
La actualización salarial que pide la UTA es superior al 40 por ciento, lo que es rechazado por la Casa Rosada, que bajo ningún punto de vista quiere avalar incrementos que superen el porcentaje inflacionario.
Tras el fracaso de la reunión, la Secretaría de Trabajo se corrió de la negociación porque "no hay voluntad de acuerdo", según indicaron fuentes de la cartera que dirige Julio Cordero a la Agencia Noticias Argentinas.
A partir de ahora la paritaria de la UTA seguirá monitoreada por la Secretaría de Transporte, que se encuentra en medio de una transición debido al reciente anuncio de la salida de Franco Mogetta y la llegada en su lugar de Luis Pierrini, quien aún no asumió al frente de esa cartera.
Por su parte, la UTA llevó adelante la negociación en medio del descontento de algunos sectores internos y, en ese marco, un grupo de choferes de la línea 148 se movilizó por la tarde a la sede del gremio del barrio de Balvanera para manifestarse en contra de la postura de la conducción gremial en las negociaciones salariales.
Estos trabajadores arrojaron huevos contra la fachada del edificio sindical y criticaron la falta de adhesión de la UTA al paro convocado por la CGT el mes pasado.