El rincón del historiador

La Boca en la Revolución de 1890

 

Hacia finales del siglo XIX la corrupción y el desgobierno eran características principales de la administración del Presidente Miguel Juárez Celman, pero hubo una reacción moral por parte de amplios sectores de la oposición.

Nació la Unión Cívica de la Juventud en setiembre de 1889, agrupación que contó desde sus inicios con el beneplácito de figuras respetadas como Leandro N. Alem y que en pocos meses se convirtió en Unión Cívica bajo la presidencia de éste último y que contaba entre sus dirigentes a figuras prestigiosas como Bartolomé Mitre, Bernardo de Irigoyen, Aristóbulo Del Valle, Francisco Barroetaveña, José Manuel Estrada, Vicente Fidel López, Hipólito Yrigoyen y Pedro Goyena, entre otros.

RUFINO PASTOR

Desde La Boca del Riachuelo, el Club Independiente de San Juan Evangelista que presidía el prestigioso vecino y empresario teatral Rufino Pastor se sumó a la Unión Cívica en un acto celebrado el 15 de diciembre de 1889 en el Teatro Ateneo Iris, propiedad del mismo Pastor, que estaba ubicado en la avenida Brown 1377.

En el acto hablaron Francisco Barroetaveña, Emilio Gouchon, y nada menos que el ex Presidente Mitre, figura de gran predicamento entre los boquenses.

Alem no pudo concurrir a su inauguración por motivos de salud, aunque envió una conceptuosa carta en la que manifestaba aplaudir “con toda la efusión de mi alma la digna actitud de ese noble y viril vecindario y el patriótico entusiasmo con que vienen a ocupar su puesto en las filas de los altivos e independientes”.

PROFUNDA IDENTIFICACION

Desde entonces hubo entre Alem y los boquenses, en gran medida gracias al vínculo establecido con Rufino Pastor, una relación de profunda identificación, de aquellas que se dan en forma espontánea entre un líder y su pueblo.

Dice Hebe Clementi en “De La Boca...un pueblo” que esta barriada experimentó por el fogoso tribuno una profunda adhesión. Ello explica en gran medida que al estallar la llamada Revolución del Parque en julio de 1890, varios centenares de vecinos de La Boca fueran al Parque de Artillería aquella mañana del 26 de julio a luchar por su derecho al voto bajo el mando del citado Alem. Aquella Revolución del 90, como otras antes, tuvo fuerte repercusión en la vida boquense.

REVOLUCION DEL 90

Efectivos de la entonces comisaría seccional 20 de la policía, silenciosos y cabizbajos, equipados con cartucheras, bayonetas y remington fueron subidos al tren en la estación "General Brown" del Ferrocarril a Ensenada, ubicada en Olavarría y Garibaldi para ser conducidos a engrosar las fuerzas represivas contra la revolución, al mando del Coronel Alberto Capdevila; muchos de ellos no regresaron.

José M. Brignone cuenta en su libro "Evocaciones Boquenses" que las noches del 26 y 27 de julio la Vuelta de Rocha presenció “un espectáculo único en su historia, pletórico de inquietudes y de zozobras. Todas las ventanas de las casillas de madera que formaban ya compacto núcleo, se habían convertido al parecer en cantones: aquellos viejos revólveres y pistolas que acompañando al cuchillo o la navaja formaban el equipo infaltable de todos los inmigrantes obreros de puerto que sin familia vivían de a cuatro o cinco en una pieza habitación, salieron a relucir al amparo de la ausencia o vigilancia policial y durante largo rato hasta agotar las municiones, innúmeros fogonazos y formidables estampidos, ofrecieron inolvidable espectáculo de peligrosa pirotecnia y de diversión imprudente”.

Luego de tres días de enfrentamientos, los revolucionarios se quedaron sin municiones, se negoció un armisticio y los revolucionarios pudieron volver a sus hogares. Pero el gobierno estaba muerto, como dijo el senador Dídimo Pizarro.

LEGENDARIO ESPIRITU SOLIDARIO

Pocas semanas más tarde debió renunciar el presidente Juárez Celman que fue reemplazado por Pellegrini, hasta entonces su vicepresidente. La revolución dejó un alto saldo de muertos y heridos. Los boquenses, con su legendario espíritu solidario, recurrieron la organización de festivales y eventos para recaudar fondos en beneficio de las víctimas de aquél episodio.