Durante marzo se brindan clases gratuitas para saber cómo manejarse en situaciones de inseguridad

Krav Maga: la autodefensa ideal para mujeres

Se trata de un sistema israelí que pone énfasis en la prevención. Físicamente puede ayudar a mejorar la flexibilidad, la fuerza y la resistencia, pero también sirve para controlar el estrés y mejorar la autoestima.

A las cinco de la tarde, en un gimnasio ubicado en la Avenida Córdoba, a escasos metros de la Avenida Callao, un grupo de 24 individuos espera con entusiasmo el inicio de una clase demostrativa de Krav Maga, el sistema oficial de combate y defensa personal adoptado por las Fuerzas de Defensa y Seguridad de Israel.

A pesar de su imponente nombre, quienes se han congregado están ansiosos por adquirir habilidades que les permitan enfrentar la cruda realidad, en la que los incidentes delictivos, la violencia de género y el acoso afectan a personas de todas las edades y géneros. Desde niños de seis años hasta individuos cercanos a los sesenta, los participantes tienen la oportunidad de sumergirse durante una hora en una disciplina que ya cuenta con una amplia base de seguidores en todo el mundo.

"Durante los últimos doce años, hemos organizado un evento gratuito en marzo principalmente destinado a que las mujeres conozcan las formas de defenderse ante posibles ataques. Siempre se suman personas del otro género y de diversas edades que desean descubrir también qué implica el Krav Maga", explicó Lucien Terroir, instructor brasileño radicado en Argentina que dirige la sede porteña de la Federación Sudamericana de esta disciplina. La entidad cuenta con un perfil de Instagram (kravmaga.ar) donde publica las novedades, horarios y fechas de sus actividades.

Lucien Terroir dirige la sede de Krav Maga en Buenos Aires.
 

Así, durante este Mes de la Mujer, la entidad dará clases gratuitas en la Avenida Córdoba 1785, los lunes, martes, miércoles, jueves y sábados; en Avenida Monroe 2645, lunes, miércoles y viernes; y en Avenida Rivadavia 6145, lunes y miércoles.

En tanto en provincia de Buenos Aires se impartirán clases en Lanús en el Club 9 de Julio, en la calle Jujuy 1769, los días lunes y miércoles; y en el Club la Estrella del Sud, en la calle Gob. Felipe Llavallol 535, los días lunes y miércoles.

Cabe destacar que el Krav Maga es un sistema de autodefensa integral que va más allá de las técnicas de combate físico. Su enfoque práctico, adaptabilidad y énfasis en la prevención lo han convertido en una elección popular para aquellos que buscan no solo habilidades de autodefensa efectivas, sino también un enfoque holístico para la seguridad personal en el mundo actual.

PRIMEROS PASOS

Tras un calentamiento inicial, los participantes empiezan a asimilar los movimientos que Lucien presenta en esta primera clase, liderando la sesión junto a una voluntaria. En aproximadamente 60 minutos, los recién llegados incorporarán ocho movimientos esenciales que les resultarán útiles en diversas situaciones de peligro.

"En nuestras sesiones, simulamos situaciones realistas y exploramos cómo defenderse en esas circunstancias. Sin embargo, entendemos que el entorno de un gimnasio puede resultar intimidante para quienes nos visitan por primera vez. Muchas personas asocian las artes marciales con un combate riguroso, lo que puede generar cierto temor a realizar ejercicios como flexiones o abdominales, especialmente si tienen preocupaciones sobre su nivel de actividad física. Queremos aclarar que, en este caso, nuestro enfoque es gradual y no tan intensivo", explicó el entrenador que es discípulo de Kobi Lichtenstein, hijo de Imi (ver recuadro) quien fundó el Krav Maga en 1940.

Luego aclaró: “Decidimos enfocar en dar soluciones a personas que son, estadísticamente, más víctimas de la violencia y entregarles lo que podemos hacer ante esas situaciones. A veces no quieren comprometerse con años de entrenamiento, entonces saben que esto dura solo un mes y después ya salen con técnicas básicas para defenderse”.

Durante la clase se dan las herramientas eficaces para prevenir o salir de un ataque.

Cada clase aborda un tema específico, como “las técnicas a emplear si el ataque proviene desde atrás o cómo liberarse de un agresor que intenta aplicar una estrangulación a su víctima".

Sin importar la situación o lugar en que una persona se encuentre el agresor “eligió a quién atacar porque él, por lo menos, considera que tiene alguna superioridad sobre el otro de forma física, psicológica y emocional. Él tiene ventaja porque es muy probable que sea realmente más fuerte. Ante esta situación tenemos que buscar con inteligencia cómo superar esta diferencia de fuerza, porque vamos a hacer flexiones, abdominales, musculación y el asistente va a quedar más fuerte, pero no lo vamos a atacar como sí sucedería en el mundo real”.

Ante esta instancia, será clave saber cómo reaccionar y calcular la solución más adecuada para la circunstancia que se está atravesando. “Hay mucha gente que me pregunta si hay que reaccionar o no frente a alguna agresión. Mi cálculo es súper simple. Imaginemos un caso extremo en que el agresor está armado, apuntando a mi cabeza y me pide mi billetera. Ahí voy a hacer un cálculo”, explicó Terroir.

“Si se le entrega la billetera, es probable que eso termine bien y ahí. También puede ocurrir que aun no poniendo resistencia dispare igual para ganar tiempo. No sé qué pasará, pero por la situación, voy a hacer un cálculo y después yo entreno un montón cómo defenderse de esta arma. Uno decide según lo que le parezca porque la decisión es personal, pero saber qué se tiene la capacidad de dar alguna reacción, aunque sea para conseguir unos segundos y escapar, es una gran diferencia”.

CAMBIO

De la misma forma que el Krav Maga ayuda a las personas con técnicas de autodefensa, también brinda otros beneficios para la salud mental y física.

Muchos alumnos que han elegido asistir por tiempo indefinido han sido víctimas de algún hecho delictivo y en poco tiempo irán adquiriendo “confianza que es el primer cambio que se nota en la persona que viene a entrenar. Con la clase va a sentir que es mucho más capaz con su cuerpo de lo que imaginaba”.

El que recién comienza con el Krav Maga llega pensando que “si alguien me viene a atacar, yo no tengo nada para hacer, lo voy a golpear y se va a reír”.

Pero al pasar las clases “van a aprender que si patean en ciertos lugares, lograrán un fuerte impacto de defensa sin importar si son más o menos fuertes que su atacante. El Krav Maga se enfoca en la gestión del estrés, la toma de decisiones rápida y la confianza en situaciones críticas. Estos aspectos psicológicos son esenciales para la efectividad de la defensa personal en la vida real”.

En el mundo convencional, fuera de la práctica militarizada, muchos de los movimientos permiten conseguir mayor fuerza en brazos, piernas, cadera, abdominales y mejorar también la agilidad sin importar la edad.

 

Todas las personas a cualquier edad, pueden desarrollar músculos con la práctica.

COMUNIDAD

Por otra parte, basta asistir a una clase para notar el vínculo de comunidad que surge entre los practicantes que van generando confianza al compartir sus experiencias. “Cuando llegué me faltaba fortalecimiento o autoconfianza física porque por ahí la podés tener en otros ámbitos, pero de forma limitada. Acá encontré como un ingrediente para mejorar eso y creo que genera cosas positivas. A las clase veo que asisten familias, adultos mayores y niños. Es muy familiar, no es exigente porque no es para competir”, enfatizó a La Prensa Carla Segalini, una alumna de Krav Maga desde hace poco tiempo que también participa en las clases de marzo abiertas para las mujeres que buscan aprender defensa personal.

COLORES

La enseñanza de la disciplina en el mundo civil sigue un sistema de graduación por colores de cinturones. Los cursos en el mundo de la seguridad, por otro lado, no obedecen a este tipo de graduación.

Siguiendo la división por cinturones, se puede dividir la enseñanza en 2 partes: la primera que va del sin cinturón llamado cinturón blanco al cinturón azul, donde se aprende las técnicas de defensa personal; y la segunda, que va del cinturón azul al cinturón negro, donde se aprende las técnicas de combate cuerpo a cuerpo, técnicas de combate militar y ejercicios más complejos.

“Si bien hay distintos cinturones y niveles, yo sigo en el primero y estoy bien con eso me iré al otro cuando tenga tiempo. Es una práctica muy metódica, ordenada y muy progresiva e integradora de todo tipo de personas, porque pueden tener discapacidad y limitaciones”, agregó la joven alumna.

Luego agregó que: “No sé si antes iba por la calle y me cruzaba de vereda porque me daba un poquito de temor pasar a alguien en la noche. Hay que estar atentos y aunque no siento que tenga que estar a la defensiva porque me pueden atacar, sí siento que tengo una herramienta para prevenir un futuro trauma o alguna herida desde lo más chiquito a lo más grande”.

En tanto, en el gimnasio situado en la avenida Córdoba el tiempo ha pasado muy rápido y la clase va llegando a su fin. Los nuevos y veteranos aprendices se dan un último saludo hasta el próximo encuentro en un par de días para seguir conociendo más del Krav Maga. “La gente verá que siempre existe una elección y no siempre depende de cómo el agresor quiere que la situación termine”, concluyó Lucien Terroir sobre la posibilidad de que todos los asistentes, sin importar el género ni la edad, hayan encontrado cómo vencer sus miedos y empoderarse un poco más.

Ideada por Imi Lichtenfeld para evitar ataques en peleas callejeras

Una técnica que nació de la necesidad

Hablar de Krav Maga significa mencionar al sistema de defensa personal de las fuerzas armadas de Israel (en hebreo, krav significa combate y magá, contacto). Aunque no es considerado un deporte como tal, su creador Imi Lichtenfeld sí fue deportista.

En 1928 y 1929 Imi ganó el campeonato de lucha greco-romana en Eslovaquia y una década después, cuando el odio antisemita y fascista se intensificó en ese país, decidió reunir a un grupo de aproximadamente 100 jóvenes judíos a quienes enseñó a pelear con el objetivo de crear una efectiva técnica de defensa personal.

El reto no era sencillo, pues era bastante común que en aquellas peleas callejeras existiera una gran diferencia numérica entre agresores y agredidos, en donde la minoría, por supuesto, eran los judíos.

En 1940, Imi dejó su país huyendo del nazismo. Llegó a Egipto y se enlistó en el ejército inglés, donde combatió por dos años. Pero la parte más importante de su vida todavía estaba por llegar, pues en 1942 inmigró a Palestina, donde se dedicó a entrenar a los miembros de la Haganá, el ejército judío clandestino que surgió en Palestina bajo mandato británico.

Cuando en 1948 se creó el Estado de Israel, Imi Lichtenfeld fue nombrado instructor principal y se dedicó a la preparación física y al combate personal de los soldados del ejército de Israel.

Hoy, el Krav Magá es una técnica de combate enseñada en todo el mundo. Forma parte del entrenamiento en agencias de seguridad, comandos contraterroristas, ejércitos y aeropuertos.

 

 

En el 2023 la Corte Suprema recibió un total de 13.460 denuncias

El flagelo de la violencia domestica

El año pasado, la OVD recibió a un total de 13.460 mujeres en su sede de Lavalle 1250. Un promedio de 37 por día.

Entre ellas, 8.210 concurrieron a denunciar alguna situación de violencia en su modalidad doméstica y 5.250 a realizar alguna consulta. Además, hubo 381 mujeres que asistieron en más de una oportunidad durante el año, para realizar una denuncia.

Los equipos interdisciplinarios de la OVD evaluaron el riesgo de 10.430 niñas y mujeres afectadas por situaciones de violencia. Tres de cada 10 de ellas se encontraban en situaciones de riesgo altísimo o alto. Entre las menores y mujeres afectadas, 52% tenía un vínculo de pareja con las personas denunciadas, 29% filial (denunciaron a su padre o madre o a su hija o hijo), 10% tenía otros vínculos, 5% denunció a otro familiar hasta 4° grado de parentesco y 4% fraternal (hermanos/as). Asimismo, el 34% de las afectadas cohabitaban con las personas denunciadas. Los equipos médicos de la OVD constataron lesiones en 1.524 mujeres. 71% tenía antecedentes de lesiones producto de situaciones de violencia anteriores.

Las niñas y mujeres afectadas fueron víctimas de violencia psicológica (97%), simbólica (61%), física (47%), económica patrimonial (32%) y sexual (10%).

Por otra parte, desde el 23 de octubre último, día en que se promulgó la Ley 27.736 “Ley Olimpia”, la OVD registró 77 situaciones de violencia contra las mujeres en su modalidad digital.

Entre las mujeres afectadas, al menos 496 tenían algún tipo de discapacidad, 355 manifestaron pertenecer a pueblos originarios, y 171 estaban cursando un embarazo al momento de su presentación.

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

La defensa anti bullying permite a los chicos poder superar un momento traumático.