Kicillof recibió a funcionarios chilenos y se comprometió a reforzar la cooperación en seguridad

El gobernador bonaerense se reunió con el ministro del Interior de Chile y el embajador de ese país en Argentina para abordar la situación de los heridos y detenidos tras los disturbios en el estadio de Independiente. Además, se confirmó que el club de Avellaneda no podrá utilizar su cancha hasta nuevo aviso.

El gobernador bonaerense Axel Kicillof recibió en La Plata a autoridades del Gobierno de Chile, en el marco de los graves incidentes ocurridos en la cancha de Independiente durante el partido de Copa Sudamericana frente a Universidad de Chile. Tras la reunión, la Provincia confirmó la clausura del estadio del club de Avellaneda, que no podrá disputar allí sus próximos encuentros.

Kicillof estuvo acompañado por su Gabinete y mantuvo un encuentro con el ministro del Interior chileno, Álvaro Elizalde, y el embajador de ese país en Argentina, José Antonio Viera Gallo. El motivo central de la reunión fue analizar el estado de situación de los ciudadanos chilenos que resultaron heridos en los disturbios y de aquellos que fueron detenidos por los incidentes registrados en el partido.

“Repasamos la situación de los ciudadanos chilenos que resultaron heridos y de quienes fueron detenidos producto de los incidentes ocurridos durante el partido”, señaló el mandatario bonaerense al término del encuentro.

El gobernador subrayó que se conformó un grupo de seguimiento para agilizar el intercambio de información en torno a la evolución en el estado de salud de las personas que permanecen internadas en hospitales de la Provincia.

En un comunicado conjunto, tanto el gobierno bonaerense como las autoridades chilenas coincidieron en repudiar los episodios de violencia que empañaron el espectáculo deportivo. “Ambos gobiernos condenamos cualquier tipo de violencia en espectáculos deportivos y nos comprometemos a establecer mecanismos de cooperación en materia de justicia y seguridad”, expresó Kicillof.

La investigación judicial sobre lo sucedido quedó en manos de la Justicia argentina, que será la encargada de determinar responsabilidades penales. Paralelamente, la Agencia de Prevención de la Violencia en el Deporte (Aprevide) informó que el estadio de Independiente permanecerá clausurado de manera preventiva, lo que obligará al club a buscar una sede alternativa para disputar sus próximos compromisos oficiales.

De esta manera, la Provincia de Buenos Aires y el Gobierno de Chile establecieron una coordinación directa para dar seguimiento al estado de los afectados y reforzar las medidas de cooperación en materia de seguridad, con el objetivo de evitar nuevos hechos de violencia en el futuro.