LO QUE DEJO EL 2022

Gran impulso de la música lírica

Con la vuelta a la presencialidad tras la pandemia de covid 19, llegaron al país destacados artistas que elevaron la programación del Colón y otros auditorios.

Para quienes venimos analizando el movimiento musical, y nos proponemos hacer un balance del año en materia de conciertos y recitales, encontramos un evidente contraste con el año precedente, cuando aún hablábamos de rigurosos protocolos sanitarios por la pandemia, de instrumentos musicales protegidas con pantallas, en fin, de búsquedas que, en el mundo, eran de frecuente acción e innovación. ­

Avizorando entonces este proceso en la temporada, se fue pasando hacia una mayor liberación de músicos y público, volviendo a recrear épocas de la prepandemia. Y la programación creció entonces, tomó mayor vuelo y se fueron alcanzando logros y concreciones, obedeciendo a una búsqueda compatible de virtuosos solistas y conjuntos. ­

­IMPORTANTES FIGURAS­

Por eso el ciclo de recitales líricos por grandes intérpretes ofrecido en el Colón, se reforzó y logró este año un contundente éxito, culminando con la magistral presencia de la gran Anna Netrebko con su marido Yusif Eyvazov, en un recital de alto nivel, dedicado al repertorio ruso, además de un perfil variopinto, muy seductor para el público.­

Se dio una concurrencia de figuras relevantes del firmamento lírico, como la deslumbrante Sondra Radvanovsky, que conocíamos del Met neoyorquino, que y armó su recital con muestras de su talento sus filados impactantes y; también, la exquisita soprano lírico-ligera de la Florida, Nadine Sierra, ascendida rápidamente a la fama, con su emisión natural y sorprendente, o la gran especialista en barroco, la mezzo checa Magdalena Kozena, la consagrada uruguaya María José Siri, nuestra compatriota Verónica Cangemi, y la mezzo canaria Nancy Fabiola Herrera por citar algunas animadoras.­

Con nombres también emblemáticos, como el del afamado tenor Roberto Alagna, prodigándose en un larguísimo recital, o el admirado tenor mexicano Javier Camarena y otros cantantes más en esa nutrida selección, como el mismísimo Placido Domingo, ya como barítono y quizá en su despedida, o el caso del descollante tenor polaco Piotr Beczala que dio un espléndido recital de apertura al Mozarteum y su colega germano-canadiense Michael Shade o el contratenor polaco Jakub Orlinski. En suma, un ciclo del Colón de muy elevado nivel. ­

Otro capítulo, el de los conciertos orquestales e instrumentales, también logró resonancia con el retorno de la gran pianista Martha Argerich tras varios años de ausencia, a los ochenta y un años, con varias jornadas en su festival de este año y la presencia desde la apertura del eminente director y su ex esposo Charles Dutoit (86) que en su sesión de apertura con la OFBA dieron amplio relieve tanto al concierto para piano y orquesta en Sol mayor de Maurice Ravel como a la Sinfonía Fantástica de Héctor Belrlioz. Otro momento estelar del año musical. ­

Ahora bien, los acostumbrados conciertos de la Filarmónica, que fueron diecinueve, con diversidad de repertorio, cerraron con la despedida de Enrique Arturo Diemecke tras diecisiete años consecutivos en la titularidad del organismo. Cabe recordar que, entre las diversas batutas a su frente, en la jornada número 17, estuvo el británico Jan Latham-Koenig, que en la nueva temporada asume la dirección musical del teatro.­

También habrá que aludir a las sesiones del breve ciclo Colón Contemporáneo como todos los años. Y en cuanto a la Orquesta Estable, dedicada a su métier especifico, la ópera, también supo de cinco jornadas, entre las cuales pudimos apreciar a la refinada mezzosoprano estadounidense Isabel Leonard, de madre argentina, que quien esto escribe había escuchado en el Met recientemente. Cantó obras de Berlioz y Ravel. en ponderable estilo. ­

­PARA DESTACAR­

Ahora bien, el rubro de los conciertos también fue centro de atención en el Auditorio Nacional del CCK, donde la Sinfónica Nacional, con su trayectoria de décadas se nutrió de varias batutas de prestigio, y, lo cual va como emblema, orientó jornadas de compositores argentinos, como un homenaje a Alberto Williams, con varias de sus obras, recreando testimonios de nuestro patrimonio cultural ­

La OSN realizó más de treinta conciertos, la mayoría en su sala habitual y algunos en el gran Buenos Aires, con destacadas batutas invitadas, con el Coro Polifónico y el de Niños también, y comenzó la trasmisión en streaming de sus conciertos en el auditorio Una labor ponderable y efectiva. ­

Ahora bien, en el campo de las entidades privadas, nuevamente el Mozarteum, Argentino, con sus setenta años que festejó en esta ocasión, volvió a su clásico ciclo del Colón con siete encuentros, a partir del relevante recital de Piotr Beczala antes citado, para seguir con el Faure Quartett, con la sorprendente Philarmonique Royal de Liège dirigida por Gergely Madaras, la Jerusalem Symphony Orchestra con Yeruhan Scharovsky en el podio y la Deutsche Kammerphilarmonie Bremen, además de recitales del pianista Nelson Goerner y del chelista Peter Wispleway (en las seis `suites para violonchelo', de Bach).­

Como orquesta de país vecino cabe resaltar la labor de la Sinfónica de Porto Alegre, Brasil, dirigida por Evando Matté en un plausible crecimiento, y completando este panorama sinfónico habrá que ponderar lo realizado por la Juvenil Nacional José de San Martin que dirige Mario Benzecry que forma un semillero de instrumentistas, y de otras agrupaciones como la de la Cámara del Congreso de la Nación, con Sebastiano de Filippi, la Académica del ISA y recitales en el Dorado como complemente de la acción didáctica. Un panorama musical, profuso y generoso, que el 2022 ha revitalizado. ­