Freno a la manipulación: la técnica de la piedra gris

Muchas personas no saben qué hacer o cómo actuar frente a personas aprovechadoras o manipuladoras. Sienten muchas veces que la situación los supera y no reconocen sus propias herramientas para poner un límite. Una buena estrategia frente a este tipo de personas es la técnica de la piedra gris.

Dicha técnica consiste, de alguna manera, en convertirse en una piedra gris ¿Cómo es esto? significa transformarse en la persona más aburrida, menos interesante más sosa que exista, al interactuar con un manipulador o frente a alguien tóxico. 

Como las personas manipuladoras necesitan el drama y la emoción para presentar su show, sin la energía que su contraparte le brinde no puede desatar su estrategia manipuladora y menos margen va a tener para manipular y controlar. Lo importante es no darles una reacción emocional, hagan lo que hagan. Se dan solamente respuestas cortas y al punto, sin exhibir ninguna emoción, siendo tan estimulante y dinámico como una piedra gris.

Esta técnica funciona por una ley simple de la vida, que es que “a lo que le damos nuestra atención, eso es lo que crece”. 
Si le ponemos nuestra atención a las conductas negativas de otras personas, esas conductas van a crecer, porque se alimentan de nosotros. Si nosotros le quitamos atención a algo, eso deja de crecer. 

Frente a eso mucho dicen que no pueden ser tan malos como para dejar de prestarle atención a alguien, porque muchas veces quien manipula se vale también de la culpa. Es frente a esta declaración que vale marcar la diferencia: se le quita la atención a la conducta no a la persona. Nos convertimos en una piedra gris frente a las conductas manipuladoras de ese sujeto, no frente al sujeto en sí. Esto es importante reconocerlo frente vínculos en los que aún cerrando ciclos, muchas veces se continúa en contacto, como ser hijos, madre, padre u otros.
Una capacidad que conviene desarrollar para usar esta técnica es la de no antagonizar con el narcisista, ya que al hacerlo le estamos dando a ellos el poder. Este tipo de personalidades se alimentan de la confrontación y como este es su territorio, nunca vamos a poder ganarles allí.  Cuando nos enojamos y reaccionamos con rabia, les estamos mostrando que tienen poder e influencia sobre nosotros. La metáfora de la piedra gris nos muestra la imagen de una superficie fría, firme y sólida, así es como conviene que mantengamos nuestro carácter. No olvidemos: quien domina nuestras emociones, nos domina. 
Lo más adecuado es dejar la reacción a un lado, mantenernos fríos y duros ante sus conductas para que pierdan el interés en nosotros. Frente a esto, posiblemente busquen otra víctima de la que valerse para lograr sus objetivos.
Para poner en práctica la técnica de la piedra gris es importante tener en cuenta estas conductas frente a quien te está queriendo manipular: 

*Las respuestas van a ser cortas, dentro de lo posible monosilábicas, ahá, sí, no, tal vez. El esfuerzo va a ser porque las interacciones con el otro sean muy breves. 
*Evitar la expresión de emociones, en especial enojo, miedo, pena o incomodidad. 
*Evitar comenzar la interacción, porque el manipulador muchas veces hace cosas para que sea uno quien comienza el diálogo, y como se dice coloquialmente es necesario “morderse la lengua” antes de hablar en estos casos. 
*Si alguien manipula es importante no pedirle favores o cosas por mínima que sean, porque va a ser una herramienta que use para manipular más adelante, y que comience a hacer “juegos de poder”.

La personalidad narcisista o manipuladora puede tener conductas imprevisibles, pueden ser muy demandantes. Son perfiles en ocasiones muy patológicos ante los cuales resulta difícil tener a mano herramientas para estar protegidos de sus manipulaciones. Esta técnica puede ayudar mucho a salir de la situación sin confrontarlos. 
Es importante, de todas maneras, reconocer que esta técnica no es para usar toda la vida. Es una herramienta que nos puede servir en una transición como un método paliativo para enfrentar el problema: la mejor estrategia frente a narcisistas y manipuladores es salir de ahí, de ese espacio en común. Nunca se puede sostener un vínculo sano, por doloroso que nos parezca, con una persona narcisista y manipuladora. 


Dr. Flavio Calvo (MN 66.869)
Doctor en psicología, docente, tallerista y autor