Es patrimonio, es fuego vivo y sagrado

Por Jorge Martín Flores *

La Argentina celebra este lunes el Día de la Tradición en honor al natalicio de José Hernández, autor célebre del Martín Fierro, obra cumbre de nuestra identidad patria y arquetípica de nuestro ser nacional, representado en el gaucho, en el hijo de este suelo, en el hombre vertical arraigado a la fe, a la tierra heredada y al espíritu de libertad responsable en la verdad.

 

¿QUÉ ES TRADICIÓN?

Tradición es herencia, es legado, es el pasado viviente en el presente, es continuidad, es proyecto arraojado hacia adelante, es futuro esperanzado y arraigado como raíz de árbol.

Es patrimonio, es fuego vivo y sagrado transmitido es un tesoro recibido que como tal ha de ser custodiado, trabajado y amado, para ser nuevamente donado, gratuitamente y honradamente, dignificado, bellamente custodiado.

Y es un estilo continuamente realizado, es un sueño con sacrificio alcanzado, que con frutos genuinos y auténticos, resplandece en virtudes, intelectuales, morales y sobrenaturales; en identidad señera, en vocación de ser héroes, en llamado para ser santos.

Tradición es Patria. Tradición es amor. Tradición es don. Tradición es formar parte de la obra de la Redención.

Pues, ya enseñaba en 1911 Eugenio Dórs cuyo aforismo está grabado en la fachada norte del Casón Madrileño, llamado del Buen Retiro: “Solo hay originalidad verdadera cuando se está dentro de una tradición. Todo lo que no es tradición es plagio.”

 

¿QUÉ HAY DE BUENO EN NUESTRA PATRIA?

Voy a limitarme a titular y glosar este auténtico modelo de vida argentino trazado por José Hernandez en su Canto 32 del Martín Fierro (Parte II: La vuelta del Martín Fierro). Patrimonio más actual que nunca, vigencia dada por la veracidad de sus afirmaciones y el imperioso estado de confusión, desorientación, comodidad, enajenación, internacionalización y  desontologización en el que nos hallamos inmersos:

* PRUDENCIA: “Un padre que da consejos. Más que padre es un amigo. Ansi, como tales digo que vivan con precaución: Naides sabe en qué rincón se oculta el que es su enemigo. Bien lo pasa hasta entre pampas el que respeta a la gente; el hombre ha de ser prudente para librarse de enojos; cauteloso entre los flojos, moderado entre valientes.”

* DILIGENCIA: “Aprovecha la ocasión el hombre que es diligente; y téngalo bien presente si al compararla no yerro la ocasión es como el fierro, se ha de machacar caliente”.

* SABIDURÍA: “Yo nunca tuve otra escuela que una vida desgraciada; no estrafien si en la jugada alguna vez me equivoco. Pues debe saber muy poco aquel que no aprendió nada. Hay hombres que de su cencia tienen la cabeza llena; hay sabios de todas menas, mas digo, sin ser muy ducho: Es mejor que aprender mucho el aprender cosas buenas”.

* HUMILDAD: “Las faltas no tienen límites como tienen los terrenos, se encuentran en los más buenos, y es justo que les prevenga: Aquel que defetos tenga disimule los agenos”.

* ABANDONO EN LA DIVINA PROVIDENCIA. MESURA: “Su esperanza no la cifren nunca en corazón alguno; en el mayor infortunio pongan su confianza en Dios; los hombres, sólo en uno,con gran precaución, en dos”.

* AMISTAD, LEALTAD Y HONOR: “Al que es amigo, jamás lo dejen en la estacada; pero no le pidan nada ni lo aguarden todo de él: Siempre el amigo más fiel es una conduta honrada”.

* LABORIOSIDAD: “Debe trabajar el hombre para ganarse su pan; pues la miseria, en su afán de perseguir de mil modos, llama en la puerta de todos y entra en la del haragán. Ni el miedo ni la codicia es bueno que a uno lo asalten, ansí, no se sobresalten por los bienes que perezcan, al rico nunca le ofrezcan y al pobre jamás le falten”.

* DIGNIDAD: “Muchas cosas pierde el hombre que a veces las vuelve a hallar; pero les debo enseñar, y es bueno que lo recuerden: Si la vergüenza se pierde jamás se vuelve a encontrar”.

* UNIDAD FRATERNA: “Los hermanos sean unidos, porque ésa es la ley primera; tengan unión verdadera en cualquier tiempo que sea, porque si entre ellos pelean los devoran los de ajuera”.

* TEMPLANZA Y FORTALEZA: “El hombre no mate al hombre ni pelée por fantasía; tiene en la desgracia mía un espejo en que mirarse: Saber el hombre guardarse es la gran sabiduría”.

* JUSTICIA: “Es siempre, en toda ocasión, el trago el pior enemigo; con cariño se los digo, recuérdenló con cuidado: Aquel que ofiende embriagado merece doble castigo”.

* VERACIDAD: “Estas cosas y otras muchas medité en mis soledades; sepan que no hay falsedades ni error en estos consejos: Es de la boca de un viejo de ande salen las verdades”.

Por ello, no necesitamos copiar nada, sino ratificar con obras lo que hemos heredado. Frente a la rebelión de la nada, lo que nos queda es volver al ser.

 

SER ARGENTINO

Por ello, queremos concluir estas líneas para los argentinos que resisten, con los versos de Don Juan Luis Gallardo, poeta católico y argentino, de feliz memoria:

“Ser argentino, señores, es algo que acontece,

es algo que se aprende y después no se olvida,

es un temple del ánimo y una emoción que crece,

es una decisión, vigilante o dormida.

 

Es advertir de pronto nuestra alma conmovida

al oír un galope que en la tarde estremece

o al aspirar una aroma de tierra humedecida

o al ver una bandera que en el aire se mece.

 

Ser argentino, amigos, consiste, me parece,

en sentirse partícipe de una guerra perdida

y, pese a la derrota, mantenerse en sus trece.

 

Es conservar girones de gloria compartida

y es saber que algún día, si el motivo se ofrece

severos jugarnos, sobriamente, la vida”.

* Profesor de Historia.