“En dos años pueden sobrar los dólares”

El ajuste que aplicará el próximo gobierno será doloroso, asegura el economista Salvador Di Stéfano. Y advierte: el agro, la minería y los hidrocarburos catapultarían a la Argentina en 2025.

La versión pragmática que Javier Milei estrenó durante la última semana terminó por convencer a más de un experto que no veía con buenos ojos la prédica de la Escuela Austríaca, dolarización y destrucción del Banco Central incluidos.

Ahora que el próximo presidente parece haberse encausado en el sendero de un liberalismo más clásico, asoma el optimismo. El economista Salvador Di Stéfano recalca que el ajuste será severo y “doloroso”, pero hacia 2025 la performance exportadora podría generar un escenario insólitamente beneficioso para esta Argentina al borde del colapso.

-¿Observa un giro hacia el pragmatismo en Javier Milei en los últimos días?

-Estoy viendo un giro muy pragmático del presidente. Dejó atrás la estudiantina de Emilio Ocampo. No era muy serio el plan que tenía para el Banco Central. Para mí fue una alegría que desistiera de ese programa económico. Mi impresión es que ahora está con gente más seria tratando de buscar un camino que sea más racional y más liberal. Hoy lo que tengo entendido y me parece lo mejor es que el presidente trate por todos los medios de encontrar una cantidad de dinero que le permita recuperar el comercio de la Argentina con el mundo.

-Usted afirma que tomar deuda será clave en el programa. ¿Quién le prestaría a la Argentina?

-Nosotros tenemos u$s 36.000 millones de deuda en importación de bienes. De ese total u$s 18.000 millones son acreedores relacionados, es decir casas matrices. Y u$s 18.000 son de casas argentinas contra el resto del mundo. Acá lo central es levantar todas las SIRAS (Sistema de Importación de la República Argentina). Esto lo voy a decir con el mayor de los respetos: supongamos que van a hablar con los técnicos del FMI y le piden u$s 18.000 millones. Históricamente Argentina pedía plata para financiar el gasto público. Hoy estaría pidiendo para pagarle a empresas del exterior, compañías que están en países que mayoritariamente hacen los aportes al FMI. Estarían yendo a pedir plata para pagarle a los miembros del Fondo a los que no se les puede pagar porque el anterior gobierno no les pagó. Es un poquito distinto.

DOLARES

-Usted respalda la idea de que debería lanzarse también un blanqueo de capitales para captar fondos.

-Lo veo necesario. Básicamente porque nosotros necesitamos imperiosamente que lleguen dólares. Hay cuatro caminos: primero, restablecer el canal comercial de la Argentina con el mundo. Eso significa limpiar las SIRA que están en el medio impidiendo que la gente pueda importar. El día que hagan eso, los importadores van a tener certeza de que van a tener mercadería. Cuando eso ocurra, cae la prima de riesgo, caerán los precios de los productos importados porque ya importar no será un problema.

-¿Cuáles son las otras vías?

-Segundo, a los importadores le van a dar pesos. ¿Qué es lo que debería hacer el Banco Central? Romper esos pesos, esterilizarlos, sacarlos de circulación. Sería una gran señal para el mercado que el Banco Central esterilice esos pesos. Al asumir, el Gobierno va a poner un cambio distinto del actual porque no podemos seguir en $350. Si ponen un tipo de cambio a $650 y pagan u$s 18.000 millones en importaciones, se esterilizarían más del 60% de las Leliqs. Es un juego a dos bandas, como en el billar. Pago por un lado la SIRA y por el otro esterilizo pesos. Milei es como el tero, canta en un lado y pone el huevo en el otro. Nos está haciendo mirar las Leliqs pero debe estar arreglando los problemas de comercio exterior. Es lógico con su ideología. El tercer punto es que paralelamente a este acto tiene que lograr equilibrio fiscal. Para lograrlo, eso va a dólar. Tendrán que aumentar la luz y el gas. Estarían generando un ajuste. La única forma de mitigar un ajuste es generando una inversión. ¿Y quién va a invertir en la Argentina? El que pueda llegar a tener un premio. Y para tener un premio hay que hacer un blanqueo con beneficios fiscales.

 TIEMPO

-En esta política lanzada a lograr el superávit fiscal, ¿en cuánto tiempo debería haber una señal positiva para la gente?

-Eso nadie lo sabe. Milei se curó en salud y dijo ‘a mí me está siguiendo la hiper y para salir necesito 12 o 18 meses’. Yo no voy a discutir eso porque Milei tiene razón cuando lo dice. Pero esto es Argentina. Si uno se pone a pensar que Argentina no coloca deuda desde el primer trimestre del 2018; que Argentina no tiene miras de arreglar el problema de la importación; no tenemos equilibrio fiscal desde el año 2009. Y si hacemos un blanqueo innovador con beneficios fiscales vamos a estar haciendo algo que no hicimos nunca en la vida. Y si encima le ponemos la impronta de un presidente que asume con un 60% de respaldo, a lo mejor ese tiempo es menor.

-Pero el respaldo es volátil.

-Yo no soy mileista, no soy de La Libertad Avanza y no me gustaba la propuesta de Milei antes de que asumiera porque esto de dolarizar a mí no me cerraba. Ahora, lo que planteo es que a la economía la tenemos que mirar desde otro lugar. Desde 2009 que no tenemos equilibrio fiscal. Van 14 años. No es lo mismo tener déficit fiscal el año pasado y en este se corrige. Cuando se empezó a tener déficit fiscal hace 14 años y nadie lo corrigió, ni Cristina, ni Macri, ni Alberto Fenrández, ni Massa, y viene un Flaco y lo corrige, el valor expectativa es altísimo. Si este muchacho consigue u$s 15.000 millones del FMI, que es lo que se está conversando; y llega a conseguir u$s 15.000 millones de afuera, la verdad es que yo me tengo que sacar el sombrero.

-¿El mismo genera afuera una expectativa de cambio?

-Fue allá y les dijo a los del Fondo que les iba a pagar. ¿Y si al Flaco le dan la plata? ¿Y si cambia?

-¿Qué opina sobre la eliminación de la Secretaría de Comercio?

-Eso lo va a tener que mantener igual. También se peleó con Lula y después tuvo que invitarlo para fiesta de asunción.

-Pese a todo lo pregonado, ¿se sentará a negociar precios con los empresarios, aunque la oferta y la demanda para Milei sean sagradas?

-Siempre hay conversaciones entre el Gobierno y los empresarios. Algún acuerdo va a firmar.

-Algunos economistas afirman que, producto del Plan Platita de Massa, el 2024 ya está jugado. ¿Coincide con eso?

-Creo que en el 2024 lo mejor que nos puede pasar es salir empatados para luego crecer 5% en 2025. El PBI es precio por cantidad. El año que viene tendremos una gran cosecha, pero si hay una gran cosecha puede haber una muy buena expectativa.

-¿Qué expectativas tienen los productores agropecuarios?

-El productor votó mayoritariamente a Milei y está tremendamente ilusionado. Lo que hay que tener en cuenta es lo siguiente: este año se va a sembrar con una ventana no ideal de lluvias. Pero en el 2024-2025 se va a sembrar con una muy buena ventana de lluvias. Podemos ir a una producción récord. Si se sigue el Indice de Minería del Indec, tenemos récord de producción de gas, petróleo, litio y cobre. En Argentina se puede dar la paradoja de que en dos años pueden estar sobrando dólares. Lo que yo le digo a la gente es: en el mundo el dólar se está devaluando. Las exportaciones argentinas pueden aumentar muchísimo. Si Argentina abre el canal importador, creo que por un buen tiempo las importaciones serán más bajas que lo habituales porque hay mucho stock guardado. No descarto que el dólar billete no tenga una buena performance en los próximos años. Hay que repensar las inversiones saliéndose de dólares y pasándose a activos. Puede ser un bono, una acción, una propiedad, un terreno, un galpón, maquinaria, en más depósitos. Cuidado que el dólar puede caer en la desgracia de no ser resguardo de valor.

 

“En el 2024-2025 se va a sembrar con una muy buena ventana de lluvias. Podemos ir a una producción récord del campo”, recalca Salvador Di Stéfano.