La residencia es una fase crucial en la formación de un médico, tras finalizar sus estudios de medicina.
Se trata de un período de formación clínica supervisada y un trabajo intensivo a tiempo completo (un promedio de 60 horas semanales), que proporciona a los médicos, también conocidos como residentes o practicantes, experiencia práctica y mayor autonomía en la prestación de servicios de salud bajo la supervisión de médicos adjuntos con experiencia.
Los expertos enfatizan la importancia de la residencia como puente entre la facultad de medicina y la práctica independiente, y son remuneradas en todo el mundo; así el salario anual promedio de un residente en EEUU, según un informe de Medscape de 2023, es de $67.400.
Los residentes son médicos altamente cualificados, están capacitados para proporcionar diagnósticos diferenciales complejos, formular planes de tratamiento, e interpretar pruebas en el contexto de la salud general del paciente. Esta formación integral, los prepara para liderar eficazmente equipos multidisciplinarios de atención médica.
La conclusión es, si usted recibe atención medica por un profesional con residencia completa, durante una hospitalización o en atención ambulatoria, usted tendrá garantizada una atención profesional, criteriosa, actualizada, empática y de excelencia.
La residencia es un criterio de calidad de formación y atención médica
HOSPITAL DE TIEMPO COMPLETO
El público ignora cómo debería funcionar un hospital. La mayor parte cree que funciona todo el día, no advierte que luego del mediodía sólo la guardia atiende las emergencias y que el funcionamiento completo, no se extiende a más de cuatro horas por día.
El Garrahan, nació como una institución modelo, como un hospital a tiempo completo, con un sistema de residencia y médicos de planta con dedicación a tiempo completo, de alta complejidad, con un perfil docente, asistencial y de investigación.
El número de consultas ambulatorias, camas de internación, cirugías y procedimientos de alta complejidad, hablan por sí solo de su importancia.
Porque atacar un modelo único, que funciona y muy bien, porque destruir equipos multidisciplinarios de primer orden, cuando reconstruirlos lleva generaciones; acaso es esto ¡costo/beneficio!
El hospital Garrahan es una institución de nivel internacional por su concepción.
La residencia y los residentes desempeñan un papel esencial dentro de este sistema, varios estudios han demostrado que la calidad de atención en los hospitales docentes, donde se forman los residentes, es mejor que en los hospitales no docentes.
Ahora en Argentina se reciben 6.000 médicos por año, solo la mitad hace la residencia, ¿cómo se forma el otro 50%?.
Año a año, somos testigos de cómo no se completan las especialidades críticas, tales como pediatría, clínica médica, terapia intensiva y emergentología.
¿POR QUE?
-Un factor generacional distinto, por el cual se privilegian instituciones flexibles, con buena remuneración, y que su actividad no absorba todo su tiempo.
-Alta carga de trabajo, con atención de un número elevado de pacientes.
-Magros sueldos y mora en los pagos, que llevan al desinterés, a migrar, o a la renuncia, sin médicos que cubran esas nuevas vacantes.
-Incertidumbre sobre las perspectivas laborales futuras.
Tenemos que alertar sobre la futura escasez de personal médico.
Esta realidad explica, la gran cantidad de extranjeros dentro del sistema de salud, en el pregrado como consecuencia de la educación gratuita y el ingreso irrestricto, y como médicos, poder realizar su formación y practicas sin rendir equivalencias, tanto en el sector público como en el privado, en forma remunerada, teniendo una formación de alta calidad, para luego regresar a sus países.
De 7.000 médicos que se postulan a residencias, aproximadamente 2.300 son de origen extranjero.
Sin embargo, el tema, parece ser un residente del Hospital Garrahan, que gana 800.000 mensuales, como el origen de todos los males.
El Ministerio de Salud de la Nación dispuso modificar el acceso a las residencias médicas para dar prioridad a los profesionales formados en universidades del país, con el objetivo es establecer un “nuevo esquema soberano” que garantice lugares preferenciales a quienes eligieron formarse íntegramente en Argentina y contribuir al sistema de salud local.
Parece una medida de neto corte populista, que no apunta el origen del problema.
Lo que está pasando es grave, y es que muchos médicos argentinos, no están eligiendo nuestras residencias, porque pueden ganar lo mismo o más haciendo otras cosas, o migrando.
Este conflicto que es anterior al actual gobierno, no se soluciona con diatribas, frases peyorativas, o declamaciones voluntariosas, es necesario implementar un plan de salud integral, en base a un diagnóstico preciso, convocando a todos los efectores de salud, universidades de medicina, ministerios, prepagas, hospitales, organizaciones no gubernamentales, sociedades médicas, para establecer un plan de trabajo a largo plazo, estableciendo prioridades y asignando los recursos necesarios.
Espero que nuestra sociedad y la política, no le dé la espalda, a dos temas tan trascendentales, educación y salud.
Si la educación es costosa, esperad a ver la ignorancia.