Falleció la actriz Diane Keaton, musa de Woody Allen y ganadora del Oscar por "Annie Hall"
LOS ÁNGELES — Diane Keaton, la estrella ganadora del Oscar por "Annie Hall", las películas de "El Padrino" y "El Padre de la Novia", cuyo estilo peculiar, vibrante y profundo la convirtió en una de las actrices más singulares de una generación, ha fallecido. Tenía 79 años.
La revista People informó que murió en California rodeada de sus seres queridos, citando a un portavoz de la familia. No se disponía de más detalles.
La inesperada noticia fue recibida con conmoción en todo el mundo. Keaton era el tipo de actriz que ayudaba a hacer que las películas fueran icónicas y atemporales, desde su frase “La-dee-da, la-dee-da” como Annie Hall, adornada con corbata, bombín, chaleco y pantalones caqui, hasta su desgarrador papel como Kay Adams, la mujer lo suficientemente desafortunada como para unirse a la familia Corleone.
Sus actuaciones estelares en la década de 1970, muchas de las cuales fueron en películas de Woody Allen, tampoco fueron un pasajero pasajero, y continuaría encantando a nuevas generaciones durante décadas gracias en parte a una colaboración duradera con la cineasta Nancy Meyers.
Interpretó a una mujer de negocios que inesperadamente hereda un bebé en “Baby Boom”, a la madre de la novia en el remake de “El Padre de la Novia”, a una mujer recién soltera en “El Club de las Primeras Esposas”, y a una dramaturga divorciada que se involucra con el ejecutivo musical encarnado por Jack Nicholson en “Something's Gotta Give”.
Keaton ganó su primer Oscar por “Annie Hall” y luego fue nominada tres veces más, por “Reds”, “La Habitación de Marvin” y “Something's Gotta Give”.
La revista People, que dio a conocer la noticia, explicó que no se revelaron de inmediato más detalles sobre las circunstancias de su fallecimiento, y que sus seres queridos han pedido privacidad en este difícil momento.
Nacida el 5 de enero de 1946, Keaton dejó una huella imborrable en la historia del cine con una carrera que abarcó más de cinco décadas. Saltó a la fama en la década de 1970, no solo por sus colaboraciones con el director Woody Allen, que la convirtieron en su musa, sino también por su memorable interpretación de Kay Adams en la trilogía de “El Padrino” de Francis Ford Coppola.
Su papel como la neurótica y encantadora Annie Hall, un personaje que reflejaba en gran medida su propia personalidad y estilo, le valió el Óscar a la Mejor Actriz y la consagró como un ícono de la moda con su distintivo look andrógino.
A lo largo de su prolífica carrera, Keaton demostró su versatilidad en comedias y dramas, destacándose en películas como “Manhattan”, “Rojos” (por la que recibió otra nominación al Oscar), “El club de las divorciadas” y “Alguien tiene que ceder”. Su talento, carisma y estilo único la convirtieron en una de las actrices más respetadas y queridas de su generación.
— Noticias Venezuela 🇻🇪 (@NxVenezuela) October 11, 2025