El imperceptible tránsito de la placidez al espanto
Mañana será muy tarde
Por Federico Vilar
Ediciones Diotima. 90 páginas
Hay un rasgo común en varias de las historias que componen este libro: se trata de la sutileza con que el lector es llevado de la placidez a la inquietud o al desasosiego. En algunas ocasiones, las más logradas, el quiebre de la trama que suele caracterizar a los cuentos se produce a través de un cambio que es casi imperceptible.
La expresión más lograda de esto es “Dos ojos inquietos”, la historia de un joven universitario que visita un campo y se interesa por contemplar la faena de un animal. El giro en este caso es tan ligero, y decanta de modo tan natural, que obliga a volver las páginas atrás para ver dónde estaba el punto de quiebre.
No todos son así y entre los once cuentos que componen Mañana será muy tarde, y que abarcan situaciones muy diversas, los resultados son dispares.
Tal vez “Patitos en línea” sea un ejemplo como el anterior, similar en ingenio y en ese tipo de transición leve. Este relato sobre una mujer que se detiene en un atasco de tránsito en la autopista y ayuda a cruzar a los patos que se interponen en la carretera es igualmente rico en descripciones sensoriales.
En los cuentos que integran este volumen Federico Vilar invita al sobresalto valiéndose para ello unas veces de la brutalidad y otras del horror. Podría decirse que los que incluyen una fuga a lo fantástico o a lo esotérico tienen un resultado más discreto que aquellos donde el acento está puesto en el terror psicológico, en el desvarío o en la evolución de los mismos personajes, como sucede en “Buenos vecinos”, sobre un recién llegado a un pueblo, o en “Verano”, cuyas protagonistas son dos niñas que veranean en la playa.
La tensión se sostiene en la creación de atmósferas verosímiles y en la expectativa por lo siniestro. Sucede en todos los casos, desde el músico que conoce a una inmigrante africana que vende pulseras en una plaza, hasta la historia de los misteriosos gatos gemelos que visitan a una joven pareja, integrada por una mujer que -sorpresivamente, o no tanto, dado el mundo en que vivimos-, reacciona airada ante la idea de deshacerse de los felinos al mismo tiempo que llega a soñar con “deshacerse” de su embarazo.
Mañana será muy tarde es el primer libro de cuentos de Federico Vilar, quien nació en Gualeguaychú en 1981 y vive en La Plata. El autor publicó en diversas revistas literarias y en antologías como Nuevas Narrativas Argentinas (Clásica y Moderna, 2010), Goce (Dunken, 20169 y Dos Orillas (Editorial Municipal de Paraná, 2022). Es productor radial y también reseña libros para su canal “El señalador”.