Fue subdirector de Radio Nacional
El adiós a Enrique Vázquez, un periodista de los de antes
Nacido en Córdoba, Vázquez tenía 70 años. En la foto, junto al autor de esta nota.
Enrique Vázquez (Córdoba, 1953), periodista y escritor de larga trayectoria, falleció el pasado 7 de marzo según informaron familiares y amigos cercanos. De carácter y personalidad fuertes, tenía una sólida formación académica y era cultor del uso correcto del lenguaje, lo que puede ser constatado en su desempeño en medios orales y escritos. Fue director de la carrera de Comunicación Social de la UBA en los primeros años.
Como periodista de investigación también tuvo su inclinación a la escritura y edición de libros de notable factura: `La última. Origen, apogeo y caída de la dictadura '(1985), `El osario de la rebeldía. Campo de Mayo de Roca a los Kirchner' (2015) y `Aduana. Corrupción y contrabando' (2018) dan cuenta de ello. En sus años juveniles su pluma destacó desde las páginas de la revista Humor Registrado, donde denunció abusos de la dictadura militar de 1976/83 y defendió con ahínco los derechos humanos y la libertad.
Apoyó sin cortapisas la transición democrática identificado con el liderazgo de Raúl Alfonsín.
Sus programas en la vieja Radio Belgrano de los albores de la democracia marcaron agenda e influyeron notoriamente en la formación y capacidad de análisis de varios miles de jóvenes y adultos que desconocían hasta entonces la cotidianeidad de un sistema democrático en un Estado de derecho. Polémico y polemista genial, frontal y confrontativo, aunque generoso y leal, era poseedor de un estilo sin parangón.
Sus firmes convicciones y su coherente conducta en un medio generalmente hostil, lo alejaron hacia los márgenes desde los cuales resistió con lo que él mismo llamó “programejo” desde la periferia del espectro. Agudo observador de la realidad, exquisito lector y fino analista del escenario internacional, sus columnas poseían una señalada lucidez que ampliaba el horizonte de sus “cuatro o cinco” seguidores y oyentes, según bromeaba, conocedor de que éramos muchos más.
Su temprana y tan inesperada como lamentada partida conmovió al mundo político y periodístico, a sus amigos (que éramos más de los que él mismo estaba dispuesto a reconocer) y a su familia, de lo que dieron cuenta las redes sociales en las últimas horas.