El Tesoro de EE.UU. volvió a comprar pesos y dijo que el salvataje total alcanzaría los US$40.000 millones
El Tesoro de Estados Unidos volvió a intervenir directamente el miércoles en el mercado cambiario argentino, logró contener la caída del peso y anticipó que la ayuda financiera al país sudamericano podría duplicar el monto anunciado inicialmente.
En rueda de prensa en Washington, el secretario del Tesoro, Scott Bessent, informó que el rescate para Argentina podría ahora alcanzar los 40.000 millones de dólares.
“Estamos trabajando en una línea de crédito de 20.000 millones de dólares que complementaría nuestra línea de swap, con bancos privados y fondos soberanos que, creo, estarían más centrados en el mercado de deuda”, explicó el funcionario.
Hace dos semanas, el propio Bessent había anunciado una línea de swap —un acuerdo financiero para el intercambio de divisas entre bancos centrales—- de 20.000 millones de dólares para el país sudamericano.
El funcionario precisó, además, que esa ayuda adicional sería una “una solución del sector privado”, en función de que “muchos bancos están interesados en ella y muchos fondos soberanos han expresado su interés”.
El apoyo estadounidense desplegado el miércoles, un día después de la reunión que el presidente Donald Trump mantuvo con su homólogo ultraderechista argentino, Javier Milei, en la Casa Blanca fue más allá de los anuncios formales.
En sus declaraciones a la prensa, Bessent confirmó, además, que el Tesoro de Estados Unidos había comprado pesos en el mercado abierto de divisas argentino por segunda vez en menos de una semana.
Esa intervención logró -de manera rápida y efectiva- detener la caída del orden del 2% que la moneda local había registrado en el inicio de la jornada, como reacción al apoyo condicionado brindado por Trump a Milei, atado al resultado de las elecciones de medio término del 26 del corriente mes.
En la apertura del mercado de cambio, el peso se depreciaba y el dólar —moneda en la que se refugian los argentinos para ahorrar— cotizaba a 1.415 pesos frente a los 1.385 en los que había finalizado el día anterior.
En el cierre de la jornada cambiaria, la moneda argentina registró una devaluación del 1,4% respecto a la víspera, y el dólar cerró a 1.405 pesos.
En tanto, en Wall Street las acciones de las principales empresas argentinas mostraban una tendencia al alza tras el desplome de hasta un 8,1% registrado el martes como reacción inicial a que la ayuda financiera de Estados Unidos quedaría atada al resultado de las elecciones de medio término del 26 de octubre en Argentina.
Trump amenazó el martes con retirar la asistencia a Argentina si la política interna del país sudamericano no arroja el resultado preferido por Estados Unidos en esos comicios.
Los inusuales comentarios de Trump se produjeron durante la reunión que el mandatario estadounidense mantuvo con su homónimo argentino. Los presidentes norteamericanos no suelen intervenir a favor o en contra de los candidatos de las elecciones democráticas de otros países.
“Si Milei pierde, no seremos tan generosos con Argentina”, lanzó Trump en la reunión en la Casa Blanca, donde también destacó que el propósito de la asistencia comprometida a Argentina por 20.000 millones de dólares tiene como fin ayudar a “nuestros vecinos”.
“Argentina es uno de los países más hermosos que he visto y queremos que tenga éxito. Es muy simple”, sintetizó el líder estadounidense.
Sin embargo, con las declaraciones de Bessent del miércoles y la intervención del Tesoro, Washington buscó enviar una nítida señal de apoyo para calmar a los mercados en Argentina, sacudidos por una alta volatilidad producto de la incertidumbre del escenario político local y la falta de liquidez, que jaquean al plan económico del gobierno.
En diez días los argentinos votarán para definir la composición del Congreso -hoy con predominio opositor- con el que deberá convivir Milei los próximos dos años de su gestión.
Los inversores temen que el peronismo de centroizquierda gane los comicios y que el oficialismo no logre imponer un número suficiente de legisladores para avanzar con reformas estructurales pendientes.
En Argentina, las críticas del arco opositor a la intervención de Estados Unidos se hicieron oír rápidamente.
La expresidenta y referente del peronismo Cristina Fernández —en prisión domiciliaria tras ser condenada por corrupción— dijo a través de la red social X: “Trump a Milei en Estados Unidos: ‘Nuestros acuerdos están sujetos a quien gane las elecciones’. ¡Argentinos... ya saben lo que hay que hacer!".
Por su parte, el presidente de la Unión Cívica Radical, Martín Lousteau, consideró que “Trump no quiere ayudar a un país” sino que “sólo busca salvar a Milei” y que “nada bueno puede salir de todo esto”.
En tanto, el presidente de la también fuerza opositora Coalición Cívica, Maximiliano Ferraro, consideró en X que “las declaraciones de Trump son una extorsión abierta a la Nación Argentina”.