La vicepresidenta dijo que la va a juzgar la Historia por la causa Vialidad, no el tribunal ante el que se ventila el caso, del que piensa que ya la condenó. Pero ese tribunal no es el único por el que debería preocuparse. Según una encuesta del Observatorio de Psicología Social Aplicada de la Facultad de Psicología de la UBA, el 80% de los consultados la consideran “culpable” de los delitos de corrupción por los que fue acusada. Lo más llamativo es el porcentaje de quienes la consideran culpable entre sus propios votantes: el 26%. Entre los K la cree inocente el 43%. No quiso opinar el 31%.
Cómo lo ven a Massa
Es negativa, asimismo, la manera en la que los encuestados ven al flamante ministro de Economía, Sergio Massa. Las palabras que aparecen espontáneamente para caracterizarlo son panqueque, oportunista, chanta, traidor y corrupto. Al 61% le genera nada de confianza su llegada al Palacio de Hacienda y el 49% considera que es nada probable que estabilice la economía. Uno de los datos más llamativos del sondeo es que entre los votantes del Frente de Todos el 40% considera poco probable que estabilice la economía y el 16% nada probable. Más de la mitad del kirchnerismo le tiene poca fe.
El poder real de Massa
Otro dato de interés es que un amplia mayoría de los consultados (72%) opina que para tomar cualquier medida económica Sergio Massa debe esperar la aprobación de Cristina Kirchner, mientras que sólo el 18% opina que goza de independencia para tomar las decisiones necesarias. Entre los votantes del Frente de Todos el 46% cree en la autonomía de Massa, mientras que el 37% lo considera subordinado a la voluntad de la vicepresidenta. Entre los votantes opositores, en tanto, una muy amplia mayoría (84%) opina que para actuar el ministro debe conseguir la autorización de Cristina Kirchner.
En qué anda Manes
Facundo Manes no firmó el pedido de juicio político a Alberto Fernández después de que el presidente hiciera una amenazante comparación entre Luciani y Nisman. El neurólogo la dejó pasar, alegando que el juicio político era una medida de extrema gravedad. La noticia cayó mal entre los radicales que salieron a criticarlo en reserva. Explicaron que está en pleno acercamiento al gobernador peronista Juan Schiaretti y promueve una coalición opositora de la que no forme parte Mauricio Macri. Los radicales le desconfían. Lo llevaron para competir con Macri, pero él tiene otro plan.