Umbrales del tiempo

Duilio Marzio

En 1976 le dejé uno de mis libros de cuentos en un sobre a Duilio Marzio en la boletería de alguna sala donde estaba actuando. Junto al libro estaban mis datos personales. Evidentemente le gustó lo que leyó porque en breve se comunicó conmigo y me invitó a ver esa obra: ‘Equus’. Esa pieza, escrita por Peter Shaffer, contaba la historia de un psiquiatra (Marzio) que intenta tratar a un joven adolescente (Miguel Ángel Solá), el que padece una fascinación sexual y patológica con los caballos. En otros roles actuaban Susana Lanteri, Nora Kaleka y cuatro actores que aparecían caracterizados como caballos bajo cuya máscara estaba, por ejemplo, un novel Carlos Calvo.

Luego la relación de amistad de Duilio Marzio con el que suscribe, un aspirante a escritor de 23 años, siguió con otras experiencias teatrales y varias meriendas en su casa del pasaje Videla Castillo, en Caballito, donde se filmaron algunas escenas de ‘La Raulito’. Me presentó a Miguel Ángel Solá, al director Fernando Ayala, a Amelia Bence, a Hugo Arana, y a muchos artistas más en esa época de mi vida que guardo con especial emoción.

A este gran actor argentino le dedico los siguientes párrafos.

 

SU CARRERA

Duilio Marzio (Duilio Bruno Perruccio La Stella) nació en Buenos Aires en 1923, ciudad en la que falleció en 2013. Se destacó en cine, teatro y televisión. Mientras cursaba la carrera de Derecho y trabajaba en un estudio jurídico se inscribió en un curso que dictaba Antonio Cunill Cabanellas donde también estudiaba Pepe Soriano. Muchos años después viajaría a Estados Unidos a perfeccionarse en el Actor´s Studio, que estaba bajo la dirección de Lee Strasberg. Durante el período 1964 a 1968 fue presidente de la Asociación Argentina de Actores.

Marzio actuó en ‘Fin de mes’, ‘La Tigra’, ‘Días de odio’, ‘Sinfonía de juventud’, ‘El amor nunca muere’, ‘Ayer fue primavera’, ‘Marta Ferrari’, ‘El jefe’, ‘La caída’, ‘En la ardiente oscuridad’, ‘El candidato’, ‘Un guapo del 900’, ‘Operación G’, ‘Paula cautiva’, ‘Primero yo’, ‘Extraña ternura’, ‘La Raulito’, ‘Pobre mariposa’,’ Guerreros y cautivas’, ‘La peste’, ‘Las manos’, ‘Silencios’  y ‘La cacería’, entre tantas más. Fue tapa de la revista Radiolandia

y otras dedicadas al espectáculo, y trabajó para los más importantes directores de cine del país.

 

EN TELEVISION

En la pantalla chica participó de distintos ciclos como ‘Show Rambler’, ‘Alta comedia’, ‘Las chicas’,’ A orillas del gran silencio’, ‘Malevo’, ‘Navidad en el año 2000’, ‘Los cien días de Ana’, ‘Una voz en el teléfono’, ‘Corazones de fuego’, ‘Situación límite’, entre otros.

En teatro se destacó en ‘La gata sobre el tejado de zinc’, ‘Mi bella dama’, ‘La cacería del sol’, ‘Becket’, ‘Alfa-Beta’, ‘Luz de gas’, ‘La escalera’, ‘Plaza Suite’, ‘Mi adorado embustero’, ‘Trampa para un hombre solo’, ‘Equus’, ‘Trampa mortal’, ‘El proceso de Mary Duggan’, ‘Un domingo en Nueva York’, ‘Indiscreta’, ‘Al fin y al cabo es mi vida’, ‘Borges y Perón’. Su última obra fue ‘El último encuentro’, junto a Hilda Bernard y Fernando Heredia.

Por su actuación teatral obtuvo los premios ACE, María Guerrero, y Florencio Sanchez, siempre como Actor dramático.

Poco tiempo antes de su fallecimiento lo encontré en la Asociación Argentina de Actores. Duilio esperaba que lo llamaran de una caja para cobrar su participación en una obra de teatro y yo aguardaba lo mismo pero por un curso de guion que había dictado en esa institución. Me llamó la atención que estábamos rodeados de jóvenes actores que esperaban su cobro también y ninguno lo reconoció. Lo saludé. Había vendido su hermosa casa y ahora vivía en un departamento sobre la avenida Santa Fe. Fue la última vez que lo vi.

Duilio Marzio murió el 25 de julio de 2013 a la edad de 89 años a causa de un paro cardiorrespiratorio. En el mes de junio el actor había sido sometido a un bypass coronario con resultados satisfactorios. Sus restos descansan en el Panteón de la Asociación Argentina de Actores del Cementerio de la Chacarita. En lo que a mí respecta nunca lo olvidaré y espero que los lectores de esta columna lo recuerden con la misma admiración.