El cierre de las listas en la provincia de Buenos Aires detonó los dos triángulos de hierro que se configuraron en la polarizada política argentina. El de La Libertad Avanza y el de Fuerza Patria. Aunque ahora se busque disimular detrás de la campaña que se inicia, ya nada será como antes. Las internas quedaron expuestas a cielo abierto con leves diferencias entre el ordenamiento libertario, y la atomización del peronismo. En un campamento, se supo con claridad quién manejó la lapicera. En el otro, el problema fueron las múltiples lapiceras que obligó a bajar la palanca de la energía para proyectar el cierre hasta este lunes a la tarde.
Las listas de La Libertad Avanza fueron armadas con la lógica que impuso Karina Milei. Primero borró del nombre del Frente al Pro y luego le dio poco protagonismo en los encabezados seccionales. Es verdad que, en la cuenta de la política, no siempre encabezar es lo más importante, sino contar con fuerza propia en la próxima conformación legislativa. Sobre ese punto se paran los dos puntales amarillos que tuvieron lugar en la mesa de definiciones: Diego Santilli y Cristian Ritondo. Y hasta Jorge Macri, refractario a la Secretaria General de la Presidencia puede anotarse un leve triunfo: la lista en Vicente López y un lugar a salir en la lista de diputados de la tercera sección electoral, para María Sotolano. Las cabezas puras del PRO serán en la segunda sección electoral y en la quinta donde encabeza el intendente de General Pueyrredón Guillermo Montenegro. Sueñan con arrasar en dicha geografía.
En el resto de las secciones, el Frente Libertario lleva cabezas propias aunque con pasado en el PRO. Pero haberse acercado a tiempo a Sebastián Pareja, Karina Milei o los Menem, tiene su premio. El hecho de haber sido el primer intendente en pasarse a las filas de Javier Milei lo elevó a Diego Valenzuela para quedar en una posición muy expectante para su futuro político. Ser el primer candidato a senador provincial en la estratégica primera sección electoral le augura, siempre según los números de hoy, altas chances de capitalizar un triunfo para posicionarse en la carrera al 2027. Aunque la elección buscará centrarse en “Libertad o Kirchnerismo” o “Pasado o progreso”, lemas que ya fueron dejados en claro por el propio Javier Milei horas después de la presentación de las candidaturas.
EL COMISARIO
En esa lógica, no sorprende que los nombres que lleva el Frente Libertad Avanza no sean de enorme popularidad. En la tercera sección electoral, único reducto donde el gobierno nacional no se muestra seguro de poder ganar, el candidato es el ex comisario de la bonaerense Maximiliano Bondarenko, quien luego de su paso por la fuerza se sumó a la política para ser parte del armado de Facundo Manes en Florencio Varela, luego de Juntos por el Cambio y más tarde recaló en La Libertad Avanza de la mano de Sebastián Pareja pero con ligazón a la senadora Florencia Arietto, célebre por sus distintos saltos de partido a partido con un discurso anticasta que no coincide con, por ejemplo, haber estado nombrada en la nómina de un legislador provincial cuando le rendía simpatía al Frente Renovador de Sergio Massa. Minucias, como el concepto que tienen de Bondarenko los altos jerarcas de la policía bonaerense quienes no lo recuerdan muy bien.
La omnipresencia de Karina Milei a la hora de cerrar las listas contrastó con la ausencia de Santiago Caputo. En este tema el triángulo de hierro no funcionó. Hubo un sólo vértice. La agrupación Las fuerzas del cielo que hizo su presentación formal en un acto muy cuestionado en San Miguel se quedó con poco y nada.
En todos los casos, la evaluación sobre un éxito o un fracaso está dada en la expectativa previa que se crea sobre el particular. En virtud de la expansión del joven Caputo en el organigrama del poder en Argentina, eran muy pocos los que podían pensar que no pesaría en el armado electoral. Aquí algo se quebró. Y la autopsia se está viendo a cielo abierto. Una demostración que la política no es sólo operar bien las redes sociales. Se necesita algo más.
CRISIS PERONISTA
“Y el premio los huevos de platino es para Sergio Massa”. Sugestivo posteo de Malena Galmarini luego del cierre trabajoso del Frente Fuerza Patria. Un mensaje que encierra lo que sienten en el Frente Renovador por estas horas: haber sido el equilibro necesario para que todo no volara por el aire. Estuvo a punto de suceder cuando el sábado por la noche, Axel Kicillof sabedor que no respetarían los acuerdos previos mandó a armar listas en todos los distritos. Finalmente, una charla con Cristina Kirchner, corte de luz mediante, encarriló las cosas y los acuerdos llegaron tras la prórroga hasta las 14 horas del lunes.
El panorama no es alentador para el gobernador. Si bien logró quedarse con los primeros lugares en la listas de la primera y tercera sección electoral, La Cámpora y el Frente Renovador de Massa podrían obtener más representación a partir de diciembre que pongan en tensión permanente los dos años que le restan para gobernar.
Desde otra óptica, en la gobernación dicen que ya es un triunfo en sí mismo haber estar sentados en la mesa de definiciones cuando antes se enteraban de los cierres por los diarios.
Las cabezas de lista serán Gabriel Katopodis en la primera y Veronica Magario en la tercera. Se presume que ninguno asumirá su banca, pero ellos serán las cabezas que se hagan cargo del triunfo o de la derrota. Por ende, capitalizará o pagará Axel Kicillof.
Como adelantamos, era obvio que ningún intendente iba a encabezar la nómina en la primera sección ya que las posibilidades de perder son altas. Lo saben muy bien Federico Achaval o Leonardo Nardini que fueron mencionados, con escaso sustento en la realidad. Sí vale la pena repasar el resto de los listados, donde hay intendentes en funciones. En la nómina de la primera sección, está en segundo lugar Malena Galmarini y luego Mario Ishii. En la tercera, aparecen Mayra Mendoza y Mariano Cascallares, quienes aseguran que no serán testimoniales. La razón de incluir alcaldes en la lista es lógica. De lo contrario cómo iban a pretender que movilizaran sus estructuras sin ningún tipo de incentivo. En otras palabras, alguien tiene que poner las efectividades conducentes. Demasiado premio para Martín Sabatella que logra incluir a su esposa Mónica Macha en la lista de la primera cuando ni siquiera puede garantizar el distrito de Morón. En la secciones del interior bonaerense predominan dirigentes de La Cámpora, salvo en la segunda donde encabeza el intendente de Exaltación de la Cruz, Diego Nanni, ligado a Kicillof.
PERLITAS
El acceso a las listas completas que recién ahora se va revelando permite encontrar algunas perlas. En la lista de la sexta sección electoral aparece la massista Sofia Vanelli quien como senadora fue la voz que se opuso a la ley de la reelección de legisladores. Ahora resulta que ella, que termina su segundo mandato en diciembre, buscará quedarse en la legislatura cuatro años más como diputada. Si algo de moral queda en la política, esa actitud es cuestionable. En una situación similar se encuentra el senador Luis Vivona, cuyos dos mandatos terminan en diciembre y es candidato a diputado por la tercera sección electoral. A favor de Vivona es que nunca se rasgó las vestiduras oponiéndose a la eternización en los cargos, sino todo lo contrario: fue el autor de la ley para habilitar las reelecciones que tuvo media sanción en la Cámara Alta.
Las heridas que dejó el cierre en el triángulo Kicillof, Massa y Máximo Kirchner serán de difícil sutura. Esto ya está roto, es lo que más se escucha por estas horas. Sobre ese particular, un experimentado dirigente peronista que pasó por varias presentaciones de listas sostuvo: “Esto no es una interna. Es una decapitación mutua en tiempo real. Fue la evidencia explícita de que el dispositivo kirchnerista ya no existe. Cristina no impone, Máximo no ordena, Kicillof no alinea y Massa no articula. Y lo más grave: nadie tiene miedo de quedar afuera, porque ya no hay un adentro. Es una guerra en medio del océano entre náufragos, donde el barco ya se hundió. Kicillof quiere ser heredero, pero no tiene ni partido ni credibilidad fuera de su círculo. Si no arrasa en septiembre, queda encapsulado y agonizando. Máximo ya no lidera ni La Cámpora. Lo suyo es la administración del colapso familiar. El peronismo no tiene un problema de unidad. Tiene un problema de propósito. ¿Para qué quiere volver? ¿Qué representa? ¿Quién manda? ¿Quién obedece?”.
TERCERAS VIAS
En un panorama que asomo monopolizado por dos fuerzas políticas, la novedosa experiencia de ir a una elección donde muy pocos saben que se vota, recrea expectativas en la construcción de otros frentes, como el caso de Somos Buenos Aires. La cerrazón de Karina Milei para admitir a todo el PRO, llevó a que se recree Juntos por el Cambio en otras latitudes. Aún con fuertes controversias y quejas, radicales, peronistas, coalición cívica lograron amalgamar un oferta electoral que puede ser muy apetecible en la cuarta sección ya que lograron sumar más de un intendente. En la segunda sección electoral, se apalancan en el despliegue de la familia Passaglia que gobierna San Nicolás. Y en el conurbano, la apuesta es a Julio Zamora, intendente de Tigre para encabezar la primera y en la tercera el radical Pablo Domenichini.
No son lo únicos, pero sí los que creen estar en condiciones de quebrar la grieta. Se verá. En cualquiera de los casos, el desafío es aún más grande. Se trata de hacer atractiva una elección donde se eligen cargos que el 80 por ciento de los bonaerenses no tiene en claro en qué les cambia la vida.