Culminó el breve y tumultuoso paso de Harden por los Sixers

Públicamente James Harden llamó a su jefe un mentiroso y juró nunca volver a jugar con los 76ers de Filadelfia. Y no lo hará. El jugador elegido 10 veces al Juego de Estrellas y que tiene un historial de pedir canjes se dirige a su quinto equipo, buscando su primer campeonato en su nativa California.

Harden se reúne nuevamente con Russell Westbrook (con quien jugó en Oklahoma City Thunder y Houston Rockets) y se suma a la escuadra en la que también están Kawhi Leonard y Paul George.

El grupo de veteranos esperan darle a los Clippers de Los Ángeles su primer título.

Los 76er simplemente intentan seguir adelante tras el dolor de cabeza que fue Harden y seguir buscando el tan esperado título con el MVP Joel Embiid y la estrella en ascenso Tyrese Maxey

Las claves del traspaso son: 76ers envían a Harden, P.J. Tucker y Filip Petrušev a Los Ángeles a cambio de Marcus Morris, Robert Covington, Nic Batum, K.J. Martin, una selección de primera ronda en el 2028, dos de segunda ronda, un cambio de Draft en 2029 y una primera ronda adicional de un tercer equipo.

Maxey le envió un mensaje a Harden tras enterarse de la noticia en la noche —el entrenador Nick Nurse dijo que estaba dormido— y le agradeció a su excompañero por sus contribuciones.

“Le dije que lo amo, le dije que lo apreció”, aseguró Maxey.

Harden y el presidente de los Sixers Daryl Morey, quien no ha hecho comentario, se aliaron en Houston. En ese entonces Harden fue nombrado MVP y ganó títulos anotadores, pero cuando los Rockets comenzaron su reconstrucción Harden obligó al equipo a canjearlo y llegó a Brooklyn en el 2021. Se unió a Kevin Durant y Kyrie Irving, pero el trío se vio golpeado por lesiones y otras controversias y sólo disputaron 18 encuentros juntos antes de que Harden pidiera su salida.

Se fue a Filadelfia en el límite de canjes 2022 a cambio de Simmons.

Se reunió con Morey y parecía estar cómodo como armador en una ofensiva que lideraba Embiid. Harden lideró la NBA en asistencias la temporada pasada (10,7 por juego), pero fueron sus 22 puntos en las derrotas en el juego 6 y juego 7 lo que llevaron a que el equipo quedara eliminado en la segunda ronda de los playoffs.

Harden creía que se merecía un contrato a largo plazo con los Sixers, pero tras no recibir un trato decidió cortar los lazos y llamó a Morey un mentiroso durante un evento de promoción en China.

Se unió al campamento de entrenamiento una vez que inició y continuó entrenando con los 76ers hasta que le pidieron que se quedara en casa para los primeros dos duelos de visita. La única vez que habló en un entrenamiento reconoció que la fracturada relación con Morey no podía arreglarse.

Harden debía entrenar con los 76ers el martes, en su lugar, se dirigió a California para presencial, ya con acceso al vestuario y al banco de suplentes pero sin chance de jugar, el partido entre su nueva franquicia contra sus vecinos Lakers.