LAS SIMILITUDES ENTRE LOS PLANES DE MARTINEZ DE HOZ, MENEM, MACRI Y MILEI
¿Cómo evitar los errores del pasado?
POR FERNANDO SALON
El objetivo de esta nota es mostrar las similitudes de los planes económicos ensayados por José Alfredo Martínez de Hoz, Carlos Menem, Mauricio Macri y Javier Milei, para buscar causas idénticas que hicieron fracasar a los tres primeros planes y mostrar el riesgo de que suceda ahora nuevamente.
No es objetivo tratar temas de política partidaria, ni factores externos, ni corrupción, ni nada más. Es solo economía.
MARTINEZ DE HOZ - (Presidencia Videla) 1976 - 1981
Ortodoxia económica. Neoliberalismo. Libertad económica. Intención de inserción en el mundo. Heredó una inflación del 700%. Reconoció a la industria argentina como ineficiente. Endeudó al país significativamente. Eliminó el control de precios.
Un sólo valor para el dólar fue establecido, con un tipo de cambio bajo. Liberó exportaciones e importaciones. La inflación cayó significativamente. El mercado interno se redujo y se produjeron múltiples quiebras.
Eliminó subsidios en servicios públicos. El déficit de comercio exterior subió muchísimo debido a las importaciones baratas. Encaró una modernización del Estado. Comenzó la especulación financiera en Argentina y no se detuvo más.
Se acuño la expresión “bicicleta financiera”. Estableció “la tablita” (crawling peg) por primera vez en Argentina, con devaluaciones pequeñas. Se introdujo la expresión “plata dulce” para describir el peso sobrevaluado. Se introdujo el concepto “deme dos” por los millones de viajes de compras al exterior. El número de viajeros al exterior tuvo allí su pico máximo para la época, erosionando las reservas en u$s.4.000 millones de aquellos tiempos.
Comenzó el uso generalizado de cajas de seguridad para esconder dólares fuera de las obligaciones fiscales. Hubo inflación reprimida por diferencia entre base monetaria y la tablita devaluatoria.
El general Jorge Rafael Videla, presidente de facto entre 1976 y 1981, y, a la izquierda, su ministro de Economía, José Alfredo Martínez de Hoz.
CARLOS MENEM (1989-1999)
Política económica liberal. Implementó la liberalización del mercado económico. Implementó la “Convertibilidad”. Privatizó las empresas del Estado, generando disponibilidad de dólares. Gran número de empleados públicos fue despedido.
Fiscalmente fue conservador. Redujo los gastos del Estado y los subsidios estatales. Implementó el Plan Bonex para reemplazar los depósitos bancarios. Hubo una importante reducción de aranceles a la importación. Altos costos internos en dólares provocaron desempleo y quiebras. Bajó el precio del dólar y provocó exceso de turismo al exterior.
El bajo precio del dólar fomentó las importaciones de cualquier cosa, inclusive bienes finales. Además, se drenaron las reservas del BCRA, con destino a cajas de seguridad. Empezaron las dificultades para exportar. Empezó el uso de subsidios sociales para mitigar la pobreza. Hubo, también, inflación reprimida por diferencia entre la base monetaria y el dólar convertibilidad.
MAURICIO MACRI (2015-2019)
Recibió un país con alto déficit primario y financiero. Sus reformas fueron graduales y por consenso. Ensayó una política de austeridad de reducir subsidios a servicios públicos. Liberó el cepo anteriormente implantado, causando una devaluación del 40%. Ello generó inflación, que acumuló 300% a fines de 2019. La economía Argentina fue calificada como hiperinflacionaria y especulativa por evaluadores internacionales. Subió la pobreza y el desempleo, debido a la evasión de dólares. Recibió el préstamo del FMI más grande del mundo de aproximadamente u$s.40.000 millones, el cual fue consumido en 4 años a través del fomento de turismo al exterior, a razón de u$s 10.000 millones por año.
Se eliminaron retenciones, con lo cual hubo más dólares para fugar. En 2019 fue necesario volver a implementar el cepo al dólar, dadas las corridas y fugas de divisas por varias vías, principalmente por importaciones, turismo, y cajas de seguridad.
Hubo inflación reprimida por diferencia entre la base monetaria y el precio del dólar, que obligó a volver al cepo.
JAVIER MILEI
Principios económicos liberales. Reducción de gastos del Estado. Reducción de la inflación sustentada por dólar barato a través del uso de tablita cambiaria. Inflación reprimida por la diferencia entre crecimiento de la base monetaria y precio del dólar.
Los viajes al exterior consumen enormes cantidades de divisas. Importaciones baratas, agravadas por la autorización de las compras por courier. No renovó el Impuesto País, lo que hará incrementar la salida de dólares.
Está en consideración la eliminación del cepo, lo cual acarreara corridas al dólar como ocurrió en la época Macri. Los costos y sueldos nacionales carísimos en términos de dólares complicarán las exportaciones y fomentarán las importaciones.
u$s 60.000 Millones se irían durante la gestión Milei por viajes al exterior.
Eliminación de algunos impuestos sin especificar cómo serán cubiertos esos ingresos en el presupuesto nacional. No se han corregido los mecanismos de prevención de fuga de dólares a través de herramientas financieras y bursátiles que burlan el cepo al billete. Inflación interna en dólares, dañando a la industria argentina. Deuda con jubilados significativa, que podría pagarse simplemente reinventando el impuesto PAIS.
La gestión de la dupla Javier Milei-Luis Caputo incluye, entre otras acciones, reducción de gastos del Estado y de la inflación sustentada por dólar barato a través del uso de tablita cambiaria.
EL LECTOR COMPARA
Los jóvenes se sorprenderán con las coincidencias. Los viejos y con buena memoria, no. Los tres planes mencionados tenían dólar barato, importaciones baratas, devaluaciones controladas, altos costos nacionales y muchísimos dólares gastados afuera, fomentando la fuga de reservas internacionales y por lo tanto generando inflación, o inflación reprimida por un tiempo.
Mientras usted lee esto, millones de argentinos están gastando las escasas divisas internacionales del Tesoro Nacional viajando por otros países. Y al volver, traerán millones de valijas repletas de compras que además de consumir los dólares del BCRA, habrán generado trabajo para extranjeros, no para argentinos ni sus industrias ni sus comercios (u$s.7.000 millones anuales multiplicando numero de viajeros por límite de compras).
Otros tantos estarán comprando dólares a precio de ganga, sabiendo que más temprano que tarde tendrán otro precio, justamente por el circulo vicioso de gastar lo que no se tiene, gastar a cuenta de crédito.
“Los 3 planes tenían dólar barato, importaciones baratas y devaluaciones controladas”.
Me duele decir esto: importemos barato, viajemos al exterior, compremos por Courier, repongamos los dólares que hemos sacado de las cajas de seguridad. Ahora es el momento. Total la industria nacional puede esperar, la creación de empleo también, los jubilados también y el “vivir con lo nuestro” también.
Los países tienen ciclos largos para mejorar los problemas estructurales. China, aunque no sea el ejemplo perfecto dado el régimen comunista original (hoy es el país con más millonarios del mundo, y de comunista en términos económicos sólo tiene el nombre), demoro 40 años, y los países que salieron de guerras han demorado por los menos 20 años (Europa, Sudeste Asiático).
Argentina, con más de 6 décadas de problemas económicos, no ha salido en solo un año. Ha comenzado, pero falta mucho para la consolidación. El mismo presidente Milei -economista- siempre habló de largo plazo. Ha dicho, por ejemplo, que en 35 años Argentina será una potencia.
Debe entenderse que habló de un plazo largo bajo mejoras continuas, sustentables, con entendimiento y ayuda de la gente, con presupuesto equilibrado y con incrementar reservas.
Esta nota tiene un basamento liberal, pero la evidencia de los casos me ha convencido de que la economía argentina debe ser encausada dentro de ciertos límites, pues de lo contrario varios problemas endémicos harán caer cualquier plan en poco tiempo.
PARA NO REPETIR
El Gobierno Argentino debe corregir algunas cosas clave antes de que las mismas acaben con las mejoras del plan económico y las reservas del Banco Central, como sucedió en el pasado:
1) Evitar que la causa raíz de la baja de inflación sea la tablita cambiaria, pues emisión monetaria hay. La base monetaria al 02/01/2024 fue de $9.698.733 millones; y al 20/12/2024 fue de $ 28.395.764 millones, mostrando un incremento de casi 3 veces más. Comparado con la tablita cambiaria, esto es inflación reprimida temporalmente.
2) Evitar tener un dólar caro: es mejor un dólar barato pero encarecido por impuestos para los fines no productivos (dólar turismo, dólar ahorro, dólar tarjeta). Sólo con eso se podrá mantener un tipo de cambio razonable para fines productivos. Esta medida es clave.
3) Reducir viajes al exterior: están consumiendo las reservas del BCRA. Serán u$s.60.000 millones en los 4 años del gobierno Milei. Hay que encarecer el dólar turismo con un impuesto significativo capaz de reducir el volumen de viajes al exterior.
4) Reducir compra de dólares billete: destinados a las cajas de seguridad. Consumen las reservas del BCRA. Se agravará sin “cepo” ni impuesto PAIS. Es por tradición cultural argentina: comprar dólares y sacarlos de circulación. Hay que gravar la compra de dólar billete con un impuesto, para desincentivar tal habito.
5) Reducir importaciones sin aranceles: consumirán las reservas, perjudican a la industria y comercio locales. Fomenta importar cualquier cosa y desincentiva proyectos de manufactura locales. Las importaciones por correo agravarán los problemas del mercado interno, cuyas ventas caen cada día, pues la gente empezó a “compra afuera”. Hay que subir aranceles. Hay que eliminar el nuevo régimen de compras por courier.
6) Evitar hablar y pensar en dólares en un país donde la moneda nacional es el peso. Ningún país que quiera desarrollarse usa a otra moneda que no emite ni controla como parámetro. Que el Gobierno Nacional preste atención a esta realidad ayudará a la Argentina.