Entrevista con la embajadora de Costa Rica, Ginnette Campos Rojas

Centroamérica, en busca de una unión como Europa

En el marco de los 201 años de independencia, cinco países de la región se mostraron juntos en diversos actos en Buenos Aires para festejar su día patrio. “Tenemos el sistema de integración más perfeccionado de América latina”, asegura la diplomática, quien recibió de la Argentina una escultura de Cerati por el aniversario.

Hace dos semanas, el embajador guatemalteco Rony Abiú Chalí López señalaba a este diario la importancia de celebrar más de dos siglos de independencia, un hecho trascendental no sólo para su país sino también para el resto de sus vecinos con los que comparte el día patrio: El Salvador, Honduras, Nicaragua y Costa Rica.  ­

En su tierra, en 1821 se fue forjando la emancipación del imperio español, que dominaba toda esta región e inclusive la zona de Chiapas, que hoy pertenece a México. Sin embargo, la noticia de la liberación no llegó a todas las provincias por igual, ya que pese a su cercanía hubo una que fue la última en enterarse.  ­

“Cuando llega la nota de la independencia el 15 de septiembre a la Capitanía General de Guatemala, nosotros todavía no lo sabíamos porque no existía la comunicación que tenemos ahora. En ese entonces pertenecíamos todos a una misma región, pero a su vez, separados. Cuando fueron llegando las notas a cada provincia, las otras seguían discutiendo si se quedaban en la Capitanía o en el gobierno de Iturbide, de México. Por eso nosotros en Costa Rica fuimos los últimos en enterarnos. Cuando nos llegó el Acta de Independencia fue en el mes de octubre, el día 29. Por eso es que muchos costarricenses aseguran que no deberíamos festejar la independencia el 15 de septiembre. A pesar de algunos intentos por cambiarla con proyectos de ley, esa fue la fecha definitiva”, explica la embajadora de Costa Rica en la Argentina, Ginnette Campos Rojas, quien invitó a este diario a la celebración por los 201 años de su país realizada en la Casa Patria Grande, en el centro porteño.­

­DESFILE DE FAROLES­

­En Costa Rica una de las tradiciones para festejar el día nacional es recrear lo sucedido en 1821, cuando la gente salió a las calles con sus lámparas para presionar por la firma de la independencia. ­

“Todos los 14 de septiembre se realiza el desfile de faroles. A las seis de la tarde se toca el Himno Nacional y se enciende la antorcha que viene de Guatemala. Eso se hace en la ciudad de Cartago, que fue la primera en enterarse y también la primera capital que tuvo Costa Rica, inclusive antes que San José, porque ahí fue donde llegó el acta y donde los españoles se asentaron por primera vez”, señala la representante tica en Buenos Aires. ­

- Son un pueblo que mantiene las costumbres, justo en una época donde cuesta mucho respetarlas. ­

- Sí, sobre todo en estas fechas patrias. Pero no sólo eso, además cantamos todos los himnos, no sólo el de ahora sino también el de 1956. En los colegios se celebra igual y tenemos que ir a las 6 de la tarde a cantarlo. Se supone que donde vos estés ese día y a esa hora, te tenés que levantar y cantar el himno. Una vez que pasa sigues tu camino. Eso, más el desfile y la decoración de las casas es una tradición lindísima. ­

- Como regalo por el bicentenario, el gobierno argentino les donó una estatua de Gustavo Cerati.

- Sí, es cierto. El presidente anterior (NdR: Carlos Alvarado) era muy admirador de Cerati y en su momento se lo había manifestado a su par argentino. Al principio pensamos que iba a ser una escultura pequeñita (risas), pero es hermosa y muy grande. Fue ubicada en una zona de San José pero seguramente sea trasladada a la Plaza de la Soledad, justo atrás del restaurante La esquina de Buenos Aires. También hay allí una de John Lennon, pero ese paseo, que es muy famoso, identifica mucho a los argentinos. ­

- ¿Cómo celebraron estos 201 años junto a los otros pueblos centroamericanos? ­

-Acá en Argentina todas las representaciones de Centroamérica lo celebramos juntos. El año pasado también lo hicimos, pero por la pandemia se hizo una actividad más cultural. En lo que respecta al Caribe no: todas las naciones celebran su día por separado, en parte porque cada uno también tiene sus tradiciones. Lo único que siempre hacemos juntos es el tema de la antorcha, que sale de Guatemala, pasa por cada uno de los países y termina en Costa Rica.   ­

Y políticamente sería difícil celebrar una independencia con dictaduras como la de Nicaragua. No sé si usted lo puede definir de esa manera. ­

-Es una situación compleja, pero sí hemos condenado muchísimo todo lo que está sucediendo en Nicaragua. Creo que el respeto de los derechos humanos y políticos de las personas es fundamental para una sociedad democrática. Hay un grado de preocupación muy grande porque le quitas la posibilidad de expresarse a la gente, que es algo que hace a una democracia. Esperamos que la situación mejore pero es un tema que sólo el pueblo nicaragüense puede resolverlo. ­

- ¿Y qué pasa con la cantidad de migrantes nicaragüenses que llegan a Costa Rica?­

- Tenemos muchos, efectivamente, pero hay una integración bastante fuerte en una zona fronteriza binacional, en la zona norte, donde viven tanto costarricenses como nicaragüenses. Ellos vienen a trabajar y regresan, pero no es una zona natural sino por mojones. Entonces al ser así, la parte natural que tienen es el río; del otro lado está San Carlos de Nicaragua, quien tendría la jurisdicción sobre esta parte. También nos pasa algo similar con Panamá, con quien compartimos el Parque Nacional la Amistad, que es un parque enorme entre los dos países, todo reforestado y en el que se está trabajando por la biodiversidad. No obstante en este caso no tenemos ningún problema limítrofe.­

­INTEGRACION ­

­- ¿Cómo es la relación con el resto de los países?­

-Muy buena. A mi criterio Centroamérica tiene el sistema de integración más perfecto de América latina porque tiene una institucionalidad. Si bien es cierto que algunos hablan de que es un poco burocrático, la integración en la zona empezó en los años '50 y hoy la hemos concretado. Tenemos una relación buena a través del SICA, que es el Sistema de la Integración Centroamericana, pero también hay comisiones de los ministros de Economía y de Cultura de todos los países. Manejamos muchos temas en conjunto. De hecho el tratado de libre comercio con Estados Unidos lo hicimos juntos, y lo mismo ocurrió en las negociaciones con Europa. Nos hemos unido en principio por temas económicos pero a nivel político hemos avanzado bastante. Creo que lo único que nos ha faltado es la unión en materia de tránsito de personas de un país al otro como pasa en Europa, o que tengamos la misma moneda. ­

- ¿Usted cree que pueden tener un sistema como la Unión Europea?­

-Yo creo que sí porque se ha perfeccionado mucho. Tenemos el Banco Centroamericano de Integración Regional, que además contribuye al financiamiento de proyectos de infraestructura en la región. Y obviamente hay algunos temas políticos que no se han terminado de aceitar, aunque hemos manejado muy bien las relaciones con los demás países. ­

- ¿Y en cuanto a la seguridad? El Salvador ha podido controlar a las maras, que se habían esparcido por Centroamérica.­

- Por fortuna las maras no han llegado a Costa Rica ni a Nicaragua. También tiene mucho que ver que no tenemos Ejército, tenemos Policía de Fronteras. Nicaragua sí lo tiene. Pero como no han podido infiltrarse en Nicaragua, tampoco han llegado hasta nosotros. Sí ha sido una situación muy compleja en la región, pero el presidente Bukele ha trabajado muy bien sobre el tema. ­

- De hecho, hace poco afirmó que no habían tenido homicidios en 15 días, algo histórico. ­

- Sí eso también lo he visto y me ha llamado la atención. Vamos a ver si con ese trabajo logran estabilizar la cuestión porque ha tranquilizado mucho a la población.  ­

- Por último: hablamos mucho de sus vecinos pero no tanto de los ticos. ¿Cómo los definiría?­

- El tico es una persona alegre, comedida por momentos. El costarricense es el pura vida como decimos nosotros, porque le vemos el lado amable a las cosas. Esa es una característica que tenemos. Somos pacientes, pero aunque uno piense que no, también nos enojamos (risas). Siempre pensamos que todo va a estar bien. Por ejemplo en Costa Rica no se vivió la pandemia como se vivió en la Argentina, no se cerró de la forma que lo hicieron ustedes, y la vida transcurrió casi de forma normal. Costa Rica es un país tan chiquito que en cuestión de tres horas te vas de una costa a otra, y eso pasó en plena pandemia: la gente iba a las playas para estar al aire libre. No es no pasara nada, pero lo veía desde esa perspectiva. Tenemos un positivismo interesante y eso es parte de nuestra idiosincrasia.­