DE QUE SE HABLA HOY

Brieva y Fernández y sus planes para volver a los '70

No se trata este comentario de ponerse a defender uno u otro lado de la grieta, se trata del sentido común, de la valoración sobre lo que tanto nos costó reinstaurar el sistema democrático y republicano, tras años de horror y falta de libertades. En estos momentos febriles del comienzo de la campaña electoral, asistimos no con poco asombro y menos temores a declaraciones que nos llevan a lo peor de los años '70. 

Dos voces se alzaron en este sentido en las últimas horas. Una, más visceral, menos capacitada intelectualmente, cargada todavía del odio de los que no entienden razones y no han aprendido a vivir en democracia y hacen del fanatismo militante casi un estilo de vida: Dady Brieva.

La otra, la del recién nominado candidato a Presidente por la ex mandataria Cristina Fernández, un hombre al que se lo supone moderado, inteligente, hábil negociador político que curiosamente dijo hace pocas horas ?Yo no soy Cámpora? (en alusión al ex presidente que desató el infierno en nuestros país) pero que acaba de confesar que si gana las elecciones hará lo mismo que hizo "El Tío": Alberto Fernández.

Brieva, el cómico, grabó un video de un minuto y medio con su opinión sobre la fórmula presidencial Alberto Fernández presidente y CFK vice donde declara cuales serían a su juicio los primeros movimientos del gobierno: "Parece que tendríamos un gran porcentaje para ganar en primera vuelta. Después veremos. Lo primero que hay que hacer es sacar a los presos políticos de las cárceles y después iremos viendo qué es lo que pasa". Algo parecido había vaticinado a fines de 2018 cuando declaró "¡Vamos a volver con De Vido afuera y con Milagro Sala también afuera (no dijo nada sobre los socios empresarios y funcionarios de sus defendidos). ¡Vamos que se viene!".

Y al parecer Brieva supone "que se vino". Lo mismo hizo Cámpora a pocas horas de ganar las elecciones, abrió las puertas de todas las cárceles dejando en libertad asesinos y narcotraficantes buscados en el mundo, en medio de un clima de fiesta.

Cómo hacerle entender a un tipo tan cerril, que vivimos en democracia, que hay independencia de poderes, que el que está preso es porque violó la ley y no porque es un opositor molesto. El fanatismo enceguece, pero al punto de perder la noción de República ya es un síntoma grave.

El otro ejemplo en el mismo sentido son las declaraciones de Alberto Fernández, flamante candidato a ocupar la presidencia de la Nación por Unidad Ciudadana el partido fundado por la viuda de Kirchner. En diálogo con algunos periodistas, el ex jefe de Gabinete de Néstor y Cristina, adelantó cuál será una de sus primeras misiones si llega a ganar: "Hay que ver lo que han hecho algunos magistrados. Ellos deben responder por sus fallos. Me parece que vamos a tener que revisar muchas sentencias que se han dictado en los últimos años, que carecen de todo sustento jurídico y de toda racionalidad jurídica", no contento con esta declarada injerencia en el Poder Judicial, siguió en todo amenazante para que no queden dudas: "En materia penal esto se ve claramente y me refiero al papel de los jueces Claudio Bonadio y Julián Ercolini en los juicios contra Cristina Kirchner por asociación ilícita, cohecho activo y pasivo y administración fraudulenta. Las cosas que han dicho fueron dantescas. Hubo un mecanismo absolutamente cuidado por el cual ciertos magistrados encontraron el apoyo en la Cámara Federal de la teoría Irurzun y también por la Cámara de Casación con los fallos de Gemignani, Hornos y Borinsky, que han operado casi como un sistema de mayoría automática que avalaban casi todas las decisiones que venían de la justicia federal". 

Más refinado, menos grotesco, pero el fondo de lo dicho es coincidente con lo que hizo Cámpora. Después de oír al candidato a la Rosada, casi no hay dudas qué lo nombraron para firmar el indulto por el que todos los delitos de los que se acusa de CFK, queden impunes para siempre y el dinero robado seguirá en sus arcas personales. O dejan claras las cosas o ya empezamos con las trampas. Los que robaron deben pagar sea quien sea, una ex presidente, un ministro o el empresario amigo o pariente del Poder.

V. CORDERO