Advierten que los cardiólogos no podrán colocar más stents ni realizar angioplastías
El Colegio Argentino de Cardioangiólogos Intervencionistas advirtió que en el mediano plazo su actividad podría desaparecer, y, de ser así, no podrán colocarse stents ni efectuarse angioplastías.
Según estos profesionales, se está dando una conjunción de factores que ponen en peligro la actividad, como el aumento exponencial del costo de los equipos y los insumos médicos, y la baja sistemática de los honorarios profesionales.
“De no mediar una solución en el mediano plazo, toda la actividad va a verse paralizada, generando un impacto incalculable sobre la salud de la población a lo largo y a lo ancho de toda la Argentina”, expresaron en un comunicado.
También informaron que “las enfermedades cardiovasculares son la principal causa de muerte en la Argentina. Según el último reporte estadístico del Ministerio de Salud de la Nación, en el año 2021, se registraron en nuestro país 107.403 fallecimientos por las enfermedades del sistema circulatorio, entre las que se incluyen las hipertensivas, isquémicas del corazón, insuficiencia cardíaca, enfermedades cerebrovasculares, ateroesclerosis y demás enfermedades del corazón y del sistema circulatorio”.
SALARIOS DE MISERIA
En ese mismo comunicado, remarcaron, además, que “cualquier centro del país que tenga salas de cateterismo recibe, por las prácticas que allí se realizan, menos de la mitad que los colegas latinoamericanos y una cuarta o quinta parte de lo que se paga en los Estados Unidos”.
El doctor Juan José Fernández, cardioangiólogo intervencionista y presidente del CACI, destacó: “Está en crisis la atención de las urgencias, tanto sea por infartos coronarios u otras condiciones cardiológicas y cerebrovasculares. Los especialistas, en lugar de concentrarnos en la realización del procedimiento, tenemos que estar pendientes de conseguir los insumos mínimos necesarios para su realización y, muchas veces, trabajar en condiciones muy precarias”.
Por su parte, el doctor Alejandro Palacios, expresidente de la entidad, expresó: “toda esta situación grafica claramente que la medicina está desatendida, y no por los propios médicos, que hacemos esfuerzos sobrehumanos -muchas veces trabajando sin los recursos mínimos necesarios- sino por el propio sistema y por las autoridades que deben velar por brindar un servicio de calidad a la población”
Cabe destacar que, según los datos de la Word Heart Federación, las enfermedades cardiovasculares son responsables del mayor número de muertes en todo el mundo; por esta causa murieron más de 23 millones de personas en 2023.