Cristina Kirchner pidió dejar de lado el programa del FMI

Se refirió a Alberto Fernández y la administración de la que forma parte "Todos saben las diferencias que he tenido y que tengo. Este Gobierno es infinitamente mejor de lo que hubiera sido otro de Mauricio Macri. No tengo dudas"

La vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner sostuvo que el programa del FMI debe ser "dejado de lado" para elaborar un programa propio de crecimiento porque si no "va a ser imposible pagarlo" y pidió al organismo internacional que deje "de querer dirigir la política" porque "tenemos que incorporar valor y tecnología para que haya trabajo de calidad".

La expresidenta fue la única oradora en el acto que el Frente de Todos (FdT) realizó en Plaza de Mayo por el 20 aniversario de la asunción del expresidente Néstor Kirchner. Afirmó que Néstor Kirchner "sigue viviendo en el corazón del pueblo y en cada argentino y argentina al que le dio dignidad".

"Si no logramos que el programa que el FMI impone a todos sus deudores sea dejado de lado y nos permita elaborar un programa propio de crecimiento, industrialización e innovación tecnológica, va a ser imposible pagarlo, por más que digan lo que digan", afirmó la Vicepresidenta desde la Plaza de Mayo, a 20 años de la asunción de Néstor Kirchner.

Asimismo, pidió al FMI que "dejen de querer dirigir la política y clausurar la industrialización del país y convertirnos únicamente en proveedores de materia prima" y apuntó: "Creen que lo van a a pagar únicamente con commodities".

"Somos 46 millones, no alcanza con la materia prima, tenemos que incorporar valor y tecnología para que haya trabajo de calidad y buenos salarios, lo que el país necesita. Se puede hacer porque nosotros lo hicimos durante 12 años y medio. Gracias a los 'kukas' también recuperamos Vaca Muerta", afirmó y añadió: "No es pecado pagar buenos salarios, al contrario".

Sostuvo además que el país "no puede seguir atado a una economía primarizada y los precios internacionales aunque llueva o salga el sol", por lo que propuso dar un "salto cualitativo, articular lo público y lo privado".

"Esta es la discusión que necesitamos los argentinos y no las boludeces que escuchamos todos los días por la televisión", planteó la exmandataria.

En esa línea, Fernández de Kirchner señaló que cuando terminó su gobierno en 2015 "dejábamos un país mucho mejor que el que habíamos recibido" y cuando "volvimos en 2019" Argentina estaba "nuevamente endeudada en dólares".

"El 9 de diciembre de 2015, el nivel de endeudamiento no solamente era ínfimamente ridículo. Las familias tampoco estaban endeudadas, las empresas tampoco. El salario de los trabajadores era el más alto de América Latina, porque la jubilación era la mejor de la región, porque habíamos lanzado satélites y estábamos incorporando tecnología, habíamos peleado contra los fondos buitres. Esa era la Argentina que dejamos y ¿qué fue lo que recibimos cuando volvimos en 2019? Nuevamente endeudada en dólares", detalló.

La exmandataria señaló que el préstamo que el FMI otorgó durante el Gobierno de Mauricio Macri (2015-2019) "fue político" y "política tiene que ser la solución", y citó a Néstor Kirchner cuando "decía que los muertos no pagan la deuda".

En ese sentido, marcó que las "instituciones" de la República Argentina "no están para cuidar los intereses de las corporaciones" sino "los intereses de todos los argentinos" y pidió que se investigue "la deuda" y a "sus responsables".

"Hace unos días conocimos un informe de un organismo constitucional y hay algunos que se hacen los otarios y después se la pasan hablando de democracia, de republicanismo y de Constitución. Investiguemos la deuda y a sus responsables", exhortó la Vicepresidenta al recordar el informe de la Auditoría General de la Nación (AGN) conocido días atrás.

Se refirió a Alberto Fernández y la administración de la que forma parte "Todos saben las diferencias que he tenido y que tengo. Este Gobierno es infinitamente mejor de lo que hubiera sido otro de Mauricio Macri. No tengo dudas".

Convocó a la "tarea militante" de que "cada uno cuente este entramado de desinformación en cuanto a los verdaderos responsables de la situación que vive Argentina en materia de endeudamiento, falta de dólares y corridas que tantas veces han asolado a Argentina", para que "esta vez la gente pueda decidir con claridad pero sobre todo con información".

"Basta de pedirle al otro que haga cosas que nosotros no estamos dispuestos a hacer; hay que romperse lo que hay que romperse", exclamó la exmandataria.

La vicepresidenta afirmó: "Dije que iba a haber crecimiento, pero si no cuidábamos los precios de la economía el crecimiento se lo iban a llevar cuatro vivos", sostuvo, y afirmó que "ahora el crecimiento se lo están llevando cuatro vivos".

La vicepresidenta Cristina Kirchner encabezó el masivo acto ante una multitud en Plaza de Mayo. Escoltada por el diputado Máximo Kirchner y los ministros Eduardo "Wado" de Pedro (Interior) y Sergio Massa (Economía), expresó: "Quiero contarles que cuando él llegó el Estado era chiquitito, pero la deuda externa que le habían dejado era grande". 

“Cuando se cayó esa falsa dolarización de los noventa, esta Plaza estalló”, recordó la exmandataria, quien en la misma línea recordó que "cuando llegó Néstor jubilarse no era un derecho".

Cristina afirmó que "es necesario que llevemos" este mensaje "a todos los rincones de la patria. Ese país que recibió aquel presidente patagónico de apenas 22% de votos, que sigue viviendo en el corazón del pueblo, ese país que recibió venía de una gran crisis en 2001. En estos tiempos en los cuales se habla en contra del Estado, es necesario un Estado que no moleste, que deje que los argentinos vivan en paz".

Señaló que antes del 2001 "todo estaba en manos de los privados" y afirmó que "habían contraído deuda externa para sostener la falsa dolarización de los 90", pero indicó que "fuimos los kukas los que pagamos los depósitos a plazo fijo".

"Si todo estaba en manos de los privados, ¿por qué la Argentina debía tanta plata? Porque habían contraído deuda externa para sostener la falsa dolarización durante los 90. Esta plaza es testigo de nuestras alegrías pero también de feos recuerdos de los argentinos. Fue poblada de represión a Madres y Abuelas el día que se caía la convertibilidad y se apropiaban de los depósitos a plazo fijo de los argentinos en el famoso corralito. Pero fuimos los kukas los que pagamos los depósitos a plazo fijo", argumentó.

"Cuando hoy escuchamos a discípulos de ese ministro (en referencia a Domingo Cavallo), quiero decirles que Kirchner, que era un simple abogado como yo, fuimos los que pagamos los depósitos a plazo fijo con el Boden 12. Fuimos los kukas los que pagamos", resaltó la exmandataria. 

"No es pecado pagar buenos salarios, al contrario" y recordó que "en mi segundo gobierno fue cuando la gente ganó más plata".

La vicepresidenta Cristina Fernández sostuvo que el país "no puede seguir atado a una economía primarizada y los precios internacionales aunque llueva o salga el sol", por lo que propuso dar un "salto cualitativo, articular lo publico y lo privado".

"Esta es la discusión que necesitamos los argentinos y no las boludeces que escuchamos todos los días por la televisión", planteó la exmandataria en Plaza de Mayo.

""En 2015 dejábamos un país mucho mejor que el que habíamos recibido". El 9 de diciembre de 2015, el nivel de endeudamiento no solamente era ínfimamente ridículo. Las familias tampoco estaban endeudadas, las empresas tampoco. El salario de los trabajadores era el más alto de América Latina, porque la jubilación era la mejor de la región, porque habíamos lanzado satélites y estábamos incorporando tecnología, habíamos peleado contra los fondos buitres, sostuvo la Vicepresidenta desde la Plaza de Mayo a 20 años de la asunción de Néstor Kirchner.

El presidente Alberto Fernández no asistió al acto, pese a haber estado más temprano en el Tedeum de la Catedral Metropolitana. 

Sí estuvieron entre otros, el gobernador bonaerense, Axel Kicillof, el ministro de Desarrollo de la Comunidad, Andrés "El Cuervo" Larroque, y funcionarios del Gabinete Nacional como Victoria Tolosa Paz, Gabriel Katopodis, entre otros.