La Feria del Libro cierra la edición 2023 con menos visitantes y más ventas

Después de números récord en 2022 en la que superaron el millón de asistentes, la Feria Internacional del Libro de Buenos Aires se acerca al cierre de esta edición con expectativas de empatar las ventas en relación al año pasado y con un balance coincidente entre quienes estuvieron en los stands estas semanas: las Jornadas Profesionales previas a la apertura al público general fueron un éxito y si bien este año hubo menos visitantes, se registró un mayor volumen de ventas.

Con la ansiedad por recibir a los visitantes que recién llegan a la Rural en el último fin de semana del evento que comenzó el 27 de abril, editores y libreros tienen miradas diferentes sobre el desarrollo de estos días pero hay datos que se repiten en las charlas como que en las jornadas previas a la apertura general, las ventas a profesionales estuvieron copadas por representantes del mundo editorial de Chile, Perú, Brasil y Uruguay.

Las compras de estos editores y libreros latinoamericanos generaron expectativas para el arranque de la Feria al público en general pero sabiendo que la comparación con lo sucedido en 2022 es complicada porque se trató de una asistencia récord que muchos atribuyen a la expectativa por volver a transitar por los pasillo del tradicional evento que debido a la pandemia se había suspendido por dos años.

La Feria siempre se toma su tiempo para arrancar, ya que empieza a fines de abril pero recién el segundo fin de semana, ya en los primeros días de mayo, suele ser el más fuerte en presencia y ventas. Sin embargo, esta vez, el sábado 29, cuando se hizo la Noche de la Feria -con entrada libre desde las 20- y el domingo 30 de abril ya mostraron buena presencia de público y una tendencia: menos gente paseando pero más comprando.

En el stand de la distribuidora Waldhuter coinciden en asegurar que los sábados son los mejores días de ventas, su balance es parejo respecto al año pasado e identifican el lunes 8 de mayo como el de mayor concurrencia. Y claro que la posibilidad de poder pagar en cuotas los ayudó, algo que muy cerca plantea Juan, desde el stand de Plan T, una distribuidora de comics y mangas que no duda en asegurar que este año las ventas subieron, en parte impulsadas por las Jornadas Profesionales.

El 30% de descuento comprando con tarjetas del Banco Nación y las cuotas sin interés con éste y el Provincia son una variable que citan con frecuencia en los pasillos de los pabellones de la Feria. Por ejemplo, en Riverside, las ventas crecieron el segundo fin de semana y eso se tradujo en títulos directamente agotados como los libros de cuentos de Mariana Enriquez y la última novela de Hernán Díaz, "Fortuna", por la que el argentino radicado en Estados Unidos ganó recientemente el Pulitzer.

Otro que agotó es Iván Hochman, el actor que interpretó a Fito Páez en la serie "El amor después del amor", que fue la Feria a presentar en el stand colectivo Todo libro es político su novela "Por qué te vas", editado hace hace tres años por Milena Caserola. El público se llevó todos los ejemplares. En ese stand, el primer fin de semana fue el mejor en ventas y este viernes 12 de mayo fue una jornada en términos de visitas y compras. Los títulos que más venden son "El viaje inútil", de Camila Sosa Villada, y los libros de la filósofa y psicoanalista francesa Anne Dufourmantelle.

Andrés Beláustegui, responsable de Cía. Naviera Ilimitada, cuenta desde el stand que ese sello comparte con Concreto, El gato y la caja, Entropía, Odelia y También el caracol, que el escenario viene bastante parejo en relación al año anterior y destaca, al igual que muchos de sus colegas, las compras de las Jornadas Profesionales de este 2023. También el editor asevera que si bien hay menos cantidad de visitantes, los fines de semana están siendo muy buenos para las ventas, siempre en comparación con el 2022.

El título más vendido en ese espacio es el de Marcos Aramburu "Las ceremonias", una edición de El gato y la caja, que retoma experiencias de distintas personas con diferentes sustancias.

Muy cerca, también en el pabellón amarillo, en Big Sur, las ventas también mejoraron en relación al año pasado, pero son cautos en la comparación, ya que se empeñan en explicar que el año pasado fue una edición récord para los mismos parámetros de la Feria. Esa ecuación de un 2023 con menos gente pero más ejemplares vendidos se repite.

Tanto en este stand como en Los siete logos, al consultar por el libro más buscado y vendido, aparece la reciente novela de Alejandra Kamiya, editada por Eterna Cadencia, "La paciencia del agua sobre cada piedra". Pero no es la única autora argentina con una obra consultada asiduamente: también es muy requerido lo escrito por Rosario Bléfari, el reciente "Diario de la dispersión" y el anterior "Diario del dinero" (Mansalva); Ariana Harwicz, por su reciente "El ruido de una época" (Marciana) pero también su "Matate, amor", que llegará cine de la mano de Martin Scorsese; o Inés Ullanovsky, con un título que se sigue buscando y editando: "Las fotos" (Paisanita editora).

Para Ediciones Futurock este 2023 es mejor que el anterior y cuentan entusiasmados que si bien muchos se acercan porque tienen identificada a la radio, otros se sorprenden con el catálogo y se van de la Feria con una nueva editorial en su mapa de consultas.

El poeta y editor Mariano Blatt, que aporta su apellido y energía a la editorial y también distribuidora Blatt & Ríos, cuenta en ese stand el balance de menos gente y más ventas y destaca el lunes 1 de mayo como un día de movimiento intenso. ¿Qué títulos son lo que más se buscan en ese espacio? El monumental "Diario De La Filmoteca", de Fernando Martin Peña; la reedición de los poemas de Diana Bellesi en "La pequeña voz del mundo" y un clásico que insiste: "Detente instante, eres tan bello", de Cristina Peri Rossi. Estos dos últimos editados por Caballo Negro.

Ahora, ¿qué pasó con los grupos editoriales más grandes? Para Planeta, sin contar el último fin de semana, las ventas están un 3% arriba respecto al 2022. Sus libros más vendidos son "Apia de Roma", de Viviana Rivero; "La Tercera", de Alejandro Wall y Gastón Edul; "La Gioconda y Leonardo", de Daniel López Rossetti; "Donde todo brilla", de Alice Kellen; "El nudo", de Carlos Pagni; y "Blanca, la niña que quería volar", de Benjamín Vicuña.

El libro del actor chileno sobre la muerte de su hija tuvo una presentación masiva el último sábado de la Feria y una fila desbordaba para la firma de ejemplares. Para la editorial, puede ser el segundo más leído de esta edición.

Si de presentaciones masivas y de lectores y lectoras ávidos por la firma y las fotos se trata, el panorama es bien variado: desde la española Joana Marcús, una joven de 22 años, que desarrolló su vínculo con la lectura y la escritura como tratamiento para la dislexia, y con su trilogía romántica se convirtió en éxito editorial, hasta la presencia de otro español, Javier Santaolalla, un físico que descubrió el bosón de Higgs, uno de los hitos más importantes de la historia de la física, y dejó gente sin poder ingresar a la entrevista que le hizo Diego Golombek.

Para el otro gigante de la industria, Penguin Random House, este año la situación es bastante pareja en relación al año pasado. Valeria Fernández Naya, directora de marketing y comunicación, destaca este último fin de semana las presentaciones de Irene Vallejo, Eduardo Sacheri, Daniel Balmaceda, Charlie López, Dafne Schilling y Joana Marcús. "Las ventas están en línea con el año pasado que fue un año muy bueno en convocatoria y en resultados. Esta Feria estuvo poblada por jóvenes como es habitual pero también por mucho público adulto, familias enteras paseando y disfrutando de los libros. La fiebre por llevarse el libro firmado por su autor sigue siendo un punto muy valorado por los argentinos", señala.

La preocupación por el insumo papel, monopolizado por Celulosa y Ledesma, está instalada en la Feria, un evento que convoca a visitantes de manera sostenida año a año y en el que crece la conversación sobre libros también entre libreros, editores y lectores.

Con Santiago de Chile como invitada de honor, la 47º Feria Internacional del Libro de Buenos Aires se acerca a su cierre con la certeza de que sigue siendo una cita masiva para un público variado y se prepara para una próxima edición con Lisboa como ciudad central.

Como se encargó de explicitar el escritor Martín Kohan en su discurso de apertura, la Feria ofrece distintas entradas. "Por la Avenida Sarmiento (la que siento como entrada oficial), por la calle Cerviño (la que siento, aunque elegante, como puerta de atrás o entrada de servicio), por la calle Juncal (entrada especial, discreta o secreta, la del pase y contraseña, la del sigilo), por Plaza Italia (la más urbana, la bulliciosa, la que usan los que vienen en colectivo, la que usan los que emergen del subte). Hay que agregar otra alternativa de acceso, el acceso desde abajo, desde el estacionamiento, previa sensación de apretura que no tarda en resolverse en altura y amplitud".

Esas entradas suponen también diversos itinerarios, búsquedas y desafíos que conforman diversas ferias pero confluyen en una escena en la que la industria editorial tiene la oportunidad de generar un encuentro con sus colegas y también con su comunidad lectora.