¿Cómo viven las familias argentinas?

Ante el Día Internacional de las Familias, la Fundación Tejido Urbano desarrolló un informe que revela en qué condiciones viven las familias argentinas en nuestro país.

A partir de datos relevados de la Encuesta Permanente de Hogares (EPH), que incluye 31 aglomerados urbanos del país, la Fundación consideró ejes estratégicos que determinan la calidad de vida en la que se encuentran los argentinos. Los parámetros reflejan la situación actual de unos 9.893.000 hogares urbanos, que se sintetiza de la siguiente manera:

· 641.000 hogares (2.395.000 personas) residen en viviendas con materiales insuficientes.

· 217.000 hogares (1.202.000 personas) tienen hacinamiento crítico.

· 1.241.000 hogares (4.343.000 personas) carecen de condiciones de saneamiento adecuados (baño).

· 225.000 hogares (752.000 personas) acceden a agua potable fuera de la vivienda.

· 886.000 hogares (3.036.000 personas) acceden a agua potable de pozo.

· 980.000 hogares (3.349.000 personas) no acceden al servicio de agua corriente de red.

· 2.641.000 hogares (8.817.000 personas) no cuentan con desagüe cloacal de red.

· 3.121.000 hogares (10.627.000 personas) no acceden al gas de red.

· 4.383.000 hogares (14.622.000 personas) carecen de acceso alguno de estos 3 servicios.

· 408.000 hogares (1.401.000 personas) viven cerca de basurales.

· 647.000 hogares (2.253.000 personas) viven en zonas inundables.

· 965.000 hogares (2.816.000 personas) tienen régimen de ocupantes de la vivienda.

En profundidad, los datos abordados por Tejido Urbano establecen 9 ejes que permiten profundizar la situación de las familias argentinas:

- Hacinamiento crítico. Se considera en el caso de hogares donde viven más de tres personas por cuarto. Si bien en el 84,9% de los hogares del país viven menos de 2 personas por cuarto, el 12,9% de viviendas tienen entre 2 y 3 personas por cuarto. Sin embargo, un dato relevante es que ha ido descendiendo progresivamente el hacinamiento, pasando del 2,7% en 2016 a 2,5% en 2019, 2,3% en 2021 llegando al 2,2% en el último registro del segundo semestre de 2022 (el 4,1% de los habitantes).

- Saneamiento. Otra referencia importante sobre las condiciones de vida de las familias argentinas está vinculada a la tenencia de baño y su ubicación (dentro o fuera del terreno), la exclusividad o no del uso, el tipo de desagüe e instalación. En este sentido, se definen como inadecuados aquellos hogares que tienen al menos una de estas características: a) no poseen baño, b) poseen el baño fuera del terreno, c) comparten el baño con otros hogares, d) el desagüe del baño no está conectado a la red pública (cloaca) ni tampoco a cámara séptica, o e) el baño no tiene descarga de

agua. El último relevó determinó que si bien ha descendido de 2016 (13,6%) a esta parte, se han incrementado los hogares con saneamiento inadecuado en los últimos años, pasando de 11,5% en 2021 al 12,5% en la última medición registrada de 2022.

- Baños con descarga de agua. Actualmente, el 94,2% de los hogares cuenta con este beneficio, mientras que 5,8% (7,5% de las personas) carece de este equipamiento sanitario mínimo para garantizar las condiciones saludables. De manera similar al indicador anterior, con variaciones mínimas, 93,7% en 2016 , 93,9% en 2019, y 94,8% en 2021.

- Disponibilidad de agua en la vivienda y su fuente. El último registro marcó que un 97,7% de los hogares cuenta con agua dentro de la vivienda. De este porcentaje, el 88,5% corresponde a agua corriente proveniente de red pública, mientras que el 8,9% de los hogares cuenta agua por perforaciones (pozos). El 2,3% tiene acceso al agua pero por fuera de la vivienda.

- Calidad de los materiales de la vivienda. Según el tipo de producto con el que se elaboró la estructura que cobija a las familias, se establece la suficiencia o insuficiencia de su calidad. Los datos aseguran que 6,5% de los hogares (8,2% de las personas) reside en viviendas con materiales de calidad insuficiente. De éstos, el 12% son de calidad parcialmente insuficiente y el 81,6% de calidad suficiente. La proporción de hogares con calidad considerada suficiente pasó de 80,6% en 2016, a 80,1% en 2019 y 82,2% en 2021.

- Acceso a los servicios públicos en los hogares. Son las condiciones de suministro de agua corriente, gas y desagües cloacales. Los hogares con acceso a agua pública corriente representan el 90,1%, mientras que 9,9% no accede a ello. Desde 2016 esta proporción se mantiene prácticamente sin cambios sustanciales.

En profundidad, la proporción de hogares con red cloacal es de 73,3% mientras que 26,7% queda excluido. En este indicador presenta una mejora -con sus altibajos- con una proporción de hogares con desagüe a red pública de 70,1% en 2016, de 70,9% en 2019 y 74,2% en 2022.

Los datos sobre el acceso a la red pública de gas presentan un retroceso, mientras que alcanzan al 68,5% de los hogares, en 2016 accedían a la red el 71,4%, el 70,4% en 2019, y el 70,3% en 2021.

- Condiciones de hábitat. Este punto contempla el entorno en el que se asienta el hogar. El último registro detectó que 4,1% de los hogares habita cerca de un basural, y 6,5% lo hace en zona inundable. Respecto a las estadísticas de años anteriores se observa una disminución más notoria que en otros indicadores. Los hogares cerca de basurales bajaron, 7,1% en 2016, 6,6% en 2019 a 4,5% en 2021. Y en el caso de las zonas inundables pasaron de 11,2% en 2016, a 10,9% en 2019, y 6,7% en 2021.

- Régimen de tenencia de la vivienda del hogar. Esta variable distingue entre propietario de la vivienda y/o del terreno, inquilino, ocupante, etc. En el último dato se registró que el 60,9% de los hogares son propietarios de la vivienda y del terreno, un 6,7% sólo de la vivienda, el 20,7% son inquilinos, 9,8% son ocupantes, y el 2% en otras situaciones. Hay tendencia decreciente en la proporción de hogares propietarios, en

favor de las otras categorías, en especial de inquilinos y ocupantes. La proporción de hogares propietarios pasó del 67,3% en 2016, a 63,3% en 2019, y 63,4% en 2021; con un fuerte aumento de los inquilinos del 17,7% en 2016 al 19,6% en 2021. La modalidad de ocupante pasó de 8,6% en 2016 a 8,9% en ese mismo período