Los Sixers se llevan un valioso triunfo de Boston y toman la delantera en la serie ante los Celtics

Con la victoria 115 a 103, los de Philadelphia quedaron a un paso de las finales el Este Embiid con 33 puntos y Maxey con 30 se destacaron en el equipo ganador. Por Boston fue Tatum el máximo anotados con 36 unidades.

Joel Embiid volvió a relucir su placa de MVP y lideró a los Phoadelphia 76ers a una valiosa victoria sobre los Celtics 115 a 103 en Boston. Ahora, los Sixers están a un triunfo de las finales del ESTE

El pívot camerunés fue la gran figura de su equipo con 33 puntos, seguido por el base Tyrese Maxey, quinen sumó 30.

En los Celtics, el máximo anotador fue Jayson Tatum, que hizo un doble-doble de 36 puntos y 10 rebotes a pesar de un pésimo primer cuarto en el que sólo anotó dos puntos.

Jaylen Brown fue quizás el jugador de los Celtics más entonado toda la noche, con 24 puntos y seis rebotes. Por contra, el pívot Al Holford destacó por no conseguir ningún punto tras lanzar siete triples fallidos. Un deslucido Holford sólo consiguió cinco rebotes en todo el partido.

Con la ayuda de unos acertados Harden, Harris y especialmente Maxey (tres triples de cuatro intentos en el primer cuarto), los Sixers empezaron a despegarse en el marcador en los primeros minutos del partido.

En frente, los Celtics estaban teniendo una noche para olvidar, sin organización en defensa ni acierto en ataque. Tatum falló todo lo que tiró en el primer cuarto, tres triples y dos de dos. Al menos anotó dos tiros libres cuando faltaban 2.30 minutos para el final del primer cuarto, sus primeros puntos del partido.

Holford estaba incluso peor. A la mala defensa sobre Embiid añadió cero puntos en el primer cuarto (cero de dos intentos de triple y cero de dos de dos). Smart estaba más acertado y terminó los 12 primeros minutos con seis puntos.

Sólo Jaylen Brown estaba en el partido. Cuando le tocaba defender a Embiid, el alero ponía en dificultades al pívot. Y en ataque, Brown anotó nueve puntos con un buen porcentaje de tiros.

El primer cuarto terminó con un 26-33 a favor de los visitantes, siete puntos de diferencia que eran poco para el mal juego desplegado por los Celtics.

En el segundo cuarto, los Celtics siguieron cometiendo los mismos errores. Una defensa floja que daba espacio a Embiid y Harris combinada con un ataque farragoso, permitió a los Sixers aumentar su ventaja a 15 puntos (27-42) en los dos primeros minutos del segundo cuarto, tras un parcial de 0-10 para los visitantes.

Brown seguía siendo el único de Boston que realmente parecía querer la victoria.

Los locales respondieron con un parcial de 10-0 a base de ocho tiros libres consecutivos que les colocaron a cinco puntos de los Sixers, 37-42.

Pero fue un espejismo. Sin los puntos de Tatum y Holford, entre los dos habían fallado los nueve triples que habían lanzado, los Sixers colocaron un parcial de 0-7 y se volvieron a distanciar en el marcador, 41-51.

El primer triple de Tatum llegó a falta de 1.26 minutos para el descanso. Cuando los jugadores se fueron al vestuario, el marcador era 49-58.

Tras el descanso, nada mejoró para los locales. Halford, Derrick White y Marcus Smart no conseguieron meter una sola canasta en el tercer cuarto. Tatum despertó de su letargo y anotó dos triples de cuatro intentos y un total de 16 puntos en el periodo.

Pero ya era inútil. Los Sixers no necesitaron hacer un gran esfuerzo para seguir aumentando su ventaja en el marcador que llegó a ser de 19 puntos, aunque al final del tercer periodo se quedó en 16, 72-88. Para entonces, el TD Garden de Boston ya había estallado en abucheos a su equipo.

El último cuarto no tuvo historia aunque fue el único en el que los Celtics anotaron más puntos que los Sixers (31 por 27), lo que dejó el marcador final en 103-115.