'Dahmer': una mirada al abismo

Si hay algo que Ryan Murphy no es, es un improvisado. El productor norteamericano es el cerebro detrás de series que marcaron a la televisión moderna como 'Glee´, 'American Horror Story´, 'Pose', 'Scream Queens´ y 'American Crime Story´, sólo por nombrar algunas de sus creaciones.­

Específicamente para Netflix, Murphy creó 'The Politician´, 'Ratched´, 'Hollywood´ y 'Halston´. De manera que este apabullante currículum precede a 'Dahmer-Monstruo: La historia de Jeffrey Dahmer', la nueva miniserie que realizó para la plataforma de streaming.­

El productor y guionista creó un sello: cuando algo es de él se sabe, es un 'Murphy auténtico' y eso es algo difícil de lograr. Su manera de ver las cosas, de retratar a los personajes y a los hechos de los que fueron protagonistas es única. Sobre todo cuando los mismos fueron de público conocimiento, y la comidilla de los medios sensacionalistas tal como sucedió en 'American Crime Story: People vs. O.J Simpson' y 'American Crime Story: Versace'.­

No se ven esas series porque se quiere revisitar lo que pasó sino que se busca ver cómo Ryan Murphy cuenta esas historias, sabiendo que de por sí tendrán un valor agregado.­

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ESTREMECEDOR­

Así como logró un retrato apasionante del asesino de Gianni Versace, Andrew Cunanan, en 'American Crime Story: Versace´, en 'Dahmer´ vuelve a la carga con la historia de uno de los asesinos en serie más famosos de los Estados Unidos, más conocido como 'el caníbal de Milwaukee´. Y qué mejor para interpretarlo que Evan Peters, uno de sus actores fetiche, que ha participado en la totalidad de la saga antológica `AHS'.­

El phisique du rol de Peters va perfecto para encarnar a este monstruo cuya ferocidad va in crescendo a través de los años, construyendo una criatura cuya apariencia privilegiada -de rubia cabellera y cuerpo esbelto- no se correspondía con el infierno en su interior. Peters logra una actuación magistral, al igual que Richard Jenkins en la piel de su padre.­

Volviendo al paralelismo con 'Versace´, 'Dahmer´ también va hacia atrás con el correr de los capítulos, de manera que luego del primero -en el que pasa de todo- es difícil saber por dónde seguirá la historia y eso se resuelve yendo al pasado, ahondando en la génesis de su perversidad. ­

Pero es también ahí donde se apela a la empatía del espectador porque, claro, de lo contrario es imposible ver la -extremadamente larga, hay que decirlo- serie completa. Cada episodio fue dirigido por un director diferente, otro aspecto de la serie que sin dudas fue un acierto.­

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UN PARIA­

Una vida que no va a ningún lado y una condición sexual que no se anima a confesar a los suyos, dan como resultado este paria social cada vez más alienado y hundido en una especie de ciénaga cotidiana de la que emergen todo tipo de perversiones.

La ficción también apunta y dispara contra el papel cumplido por la policía de los Estados Unidos, institución a la que deja plasmada como racista y homofóbica.­

La atmósfera opresiva y fétida es ciertamente palpable en 'Dahmer', una propuesta que sorprende gratamente, pese a ser una más entre el aluvión de producciones basadas en hechos reales que inundan los cines y las plataformas. Tal vez Murphy debería centrarse más en esta senda que en perpetuar la saga de 'American Horror Story', cuyas últimas temporadas fueron olvidables.­

­Calificación: Muy bueno­