Claves de la hispanidad­

Miguel de Unamuno­

­En la última de nuestras columnas sobre la obra de España en América ("Sentido y vigencia", La Prensa, 17 de noviembre de 2021), nos hemos referido al sentido y vigencia de la Hispanidad a propósito del ciclo que, titulado con el mismo nombre, organizó el Centro Pieper (Mar del Plata) a lo largo de 2021. Más recientemente -ampliaremos en una próxima nota-, en lo que se refiere a nuestro tema, el doctor Carlos Daniel Lasa expuso la conferencia "El Ser de América y sus enemigos en el pensamiento de Alberto Caturelli" el pasado 20 de noviembre de 2021. Volveremos sobre el asunto.­

El primero de los autores que hemos mencionado en "Sentido y vigencia" fue Miguel de Unamuno. El filósofo nacido el 29 de septiembre de 1864 en Bilbao y fallecido el 31 de diciembre de 1936 en Salamanca, se refirió a la Hispanidad en más de una ocasión. En concreto, podemos apuntar dos artículos periodísticos. En 1910, el autor de obras como en torno al casticismo (1895), Vida de Don Quijote y Sancho (1905) y Del sentimiento trágico de la vida (1912), publicó, en el diario argentino La Nación, la nota "Sobre la argentinidad". Allí, Unamuno `recupera' -dado que ya había sido forjado- el término hispanidad. "En mi correspondencia anterior -afirma-, primera de las que dedico al libro de Ricardo Rojas La restauración nacionalista, libro henchido de sugestiones, usé de dos palabras que ignoro si han sido o no usadas ya, pero que ciertamente no corren mucho. Son las palabras `americanidad' y `argentinidad'. Ya otras veces he usado la de `españolidad' y la de `hispanidad'. Y los italianos emplean bastante la voz italianitá"

­HISPANIDAD­

 

Vale la pena detenerse en "Hispanidad", aparecido en la revista argentina Síntesis (número 6, 18 de agosto de 1927, 305-310). Allí, nuestro autor distingue entre hispanidad y españolidad: "Digo Hispanidad y no Españolidad para atenerme al viejo concepto histórico-geográfico de Hispania, que abarca toda la Península Ibérica. (...) Digo Hispanidad y no Españolidad para incluir a todos los linajes, a todas las razas espirituales, a las que han hecho el alma terrena -terrosa, sería, acaso, mejor- y a la vez celeste de Hispania, de Hesperia (...). Y quiero decir con Hispanidad una categoría histórica, por lo tanto espiritual, que ha hecho, en unidad, el alma de un territorio, con sus contrastes y contradicciones interiores. Porque no hay unidad visible si no encierra contraposiciones íntimas, luchas intestinas"

No obstante los reparos que podríamos tener respecto de, nuestro juicio, equivocada idea de que "no hay unidad visible si no encierra contraposiciones íntimas, luchas intestinas" -lo cual daría para una nota en particular-, lo cierto y principal es que, para Unamuno, como se sigue de sus mismas palabras, la Hispanidad, por una parte, se vincula a un concepto histórico-geográfico que, en este caso, es Hispania y, por otra parte, se trata de una categoría espiritual.­

En el mismo sentido de Unamuno, importa rescatar, entonces, que Hispanidad es una posición espiritual integradora y que, como hemos dicho en "Sentido y vigencia", "no tiene nada que ver con cierta ideología racista que, en todo caso, caracteriza a otras concepciones del mundo".­