HISTORIAS DEL CONURBANO

Exodo bonaerense­

­Francisco De Narváez, luego de la reunión de empresarios con el presidente Alberto Fernández y Sergio Massa, contó que el jefe de Estado aseguró que Cristina Kirchner quiere cerrar el acuerdo con el FMI. El dato es importante porque muestra a la vicepresidente en su rol pragmático y lejos de las posturas obcecadas de quienes, bajo su supuesta ala, recorren los medios o actos políticos diciendo o insinuando lo contrario. Se asegura que Cristina Kirchner avala los movimientos de Juan Manzur y aceitó sus diálogos con el gobernador de Santa Fe, Omar Perotti. Es decir, se aleja de La Cámpora para mostrarse más cerca del peronismo "tradicional" y territorial. Eso mismo se vislumbra en la provincia de Buenos Aires donde los intendentes se preparan para la segunda etapa de "copamiento" en el gobierno de Axel Kicillof. Se viene el éxodo bonaerense.­

Dos adelantos de esta columna se han confirmado en las últimas horas. El primero de ellos es que la relación de Cristina Kirchner con Axel Kicillof se ha deteriorado desde lo político. Tras el cierre de las listas y antes de las PASO, aquí se escribió que "Cristina (Kirchner) no está segura de que Axel Kicillof pueda ser el sucesor del Alberto Fernández. Ella lo considera, pero cree que aún debe pulir sus relaciones políticas". Si no fuera porque quién lo decía es alguien de comprobada relación con la vicepresidente, podría pasar como un comentario más. Y fue expresado semanas después del cierre de las listas. Al parecer, la ausencia de candidatos propios del gobernador en las listas seccionales no obedecería a un desprendimiento de Kicillof, sino a la decisión de Cristina Kirchner. Para no confrontar con los intendentes, a los que necesitan y mucho en los territorios"

El resultado de las primarias mostró que aquella información no sólo era verídica, sino que el desgaste avanzó. De allí los cambios en el elenco bonaerense con la llegada de Martín Insaurralde a la Jefatura de Gabinete. Modificaciones que no se agotarán allí.­

De hecho, la semana pasada también se escribió en este mismo espacio: "Máximo Kirchner se ha puesto el buzo de técnico para influir en el nuevo gabinete de Axel Kicillof imponiendo los cambios con la llegada de intendentes como su aliado Martín Insaurralde o Leonardo Nardini. Aún debe rendir algunas materias para que el vestuario provincial no se le rebele como lo hizo Sergio Berni en la noche de las elecciones primarias. De no haber mediado la acción de testigos, habrían llegado a los golpes. El episodio culminó con un empujón del Ministro de Seguridad, cuyas expresiones verbales difieren según la fuente consultada. La foto de este miércoles con el jefe de gabinete Martín Insaurralde en la escuela Vucetich de la policía bonaerense busca apaciguar una tensión que se arrastra desde el año pasado cuando se produjo el levantamiento de un sector de la policía provincial. Nunca se le fue de la cabeza a Berni que detrás de esos episodios convivieron "aparatos territoriales" que ahora ganan terreno en la idea de seguir incorporando jefes comunales con experiencia al gabinete de Kicillof. El 14 de noviembre podría oficiar como una nueva bisagra"

­¿SE VA BERNI?­

El propio Sergio Berni reconoció que la discusión existió. Y además en su entorno aseguran que él mismo le puso fecha a su salida del gobierno de Axel Kicillof. ¿Quién lo reemplazaría? El nombre que más suena es el de Alejandro Granados, alcalde de Ezeiza y antecesor de Berni en tiempos de Daniel Scioli. En este esquema, Granados es aliado de Insaurralde, con quienes suele compartir tertulias junto al grupo de jefes comunales más cercanos al lomense. El team lo integran, entre otros, Mariano Cascallares, intendente de Almirante Brown (¿y próximo presidente de la Cámara de Diputados bonaerense?), Nicolás Mantegazza, intendente de San Vicente; Federico De Achával, jefe comunal de Pilar y delegado de Insaurralde en la primera sección electoral; Federico Otermín, titular de la Cámara Baja provincial y Juan Pablo De Jesús, ex intendente y jefe político del Partido de la Costa. El plan de Insaurralde se despliega en todos los ámbitos. Incluso, en la discusión de la próxima conformación de la Corte provincial, para lo cual ya ha establecido canales de diálogo pensando en el 2022.­

Estas movidas van más allá de un simple cambio de elenco gubernamental. De confirmarse, será la certificación que Axel Kicillof no tiene más injerencia en los temas medulares de la Provincia como es el manejo de la seguridad. Para entender el esquema hay que hacer un poco de historia y ubicar con exactitud a los actores de este juego. Sería el regreso de la influencia a la bonaerense del ex comisario Hugo Matzkin, quien hoy preserva en la fuerza a hombres de su confianza. Entre ellos, el subjefe Jorge "Manotas" Figini. Los unen varias características, una de ellas es la nula experiencia al frente de comisarías. Todo lo contrario a quien conduce hoy la bonaerense, el comisario general Daniel "Fino" García, considerado un "tropero" por su amplia experiencia en el territorio y siempre al frente de tropas en, sobre todo, sitios "picantes" del conurbano bonaerense. La agitación de una posible revuelta policial venidera obedecería a estas mismas internas.­

La posible llegada de Alejandro Granados, confirmada en privado por históricos colaboradores suyos, no agotaría el desembarco de intendentes en Provincia o Nación, con la llave para poder eludir la ley que inhabilita la posibilidad de un tercer mandato consecutivo. Son pocos los que reparan en un artículo clave del decreto que reglamentó aquella ley durante el tiempo de María Eugenia Vidal. El primero de ellos dice de manera textual: "Determinar que la prohibición de reelección para un tercer mandato consecutivo establecida en los artículos 3° del Decreto-Ley N° 6769/58, 148 de la Ley N° 13688 y 13 bis de la Ley N° 5109 -todos ellos en los términos de la Ley N° 14836-, abarca a quienes habiendo sido reelectos en el mismo cargo para un segundo mandato consecutivo, hayan asumido sus funciones y ejercido por más de dos (2) años, continuos o alternados".­

Un rápido repaso por los intendentes peronistas del conurbano que podrían acogerse a ese artículo dice que ya están Juan Zabaleta (Hurlingham), Gabriel Katopodis (San Martín), Martín Insaurralde (Lomas de Zamora), Leonardo Nardini (Malvinas Argentinas) y Jorge Ferraresi (Avellaneda). Pronto se sumarán Mariano Cascallares (Almirante Brown) y Gustavo Menéndez (Merlo) a quien se lo menciona con posible destino nacional. Resta saber el camino que tomarán Mario Ishii (José C. Paz), Alberto Descalzo (Ituzaingó), Julio Zamora (Tigre) y Fernando Gray (Almirante Brown). A propósito de Gray, ¿cuál será ahora su opinión del momento por el cual atraviesa Máximo Kirchner? Sería muy interesante saberlo, en función de su postura a principios de este año. Aquello que enojó al alcalde por lo métodos de La Cámpora, es lo mismo que hoy pondría en duda la propia Cristina Kirchner. A la hora del pragmatismo político, no hay lazos familiares que sean lo suficientemente más poderosos que el objetivo a conquistar.­