LOS COLOSOS DE LA HISTORIA

Los múltiples rostro de un genio

Por Pablo De Vita*

Fue uno de los más grandes inventores del siglo XX. Pero su muerte se produjo en soledad y con la única compañía de unas pocas posesiones materiales en una habitación de hotel. Aunque sus ideas alumbraron la modernidad de un siglo que aún hoy le debe muchos adelantos cotidianos, en su tiempo el nombre de Nikola Tesla se vio opacado por el de Thomas Alva Edison, quién lo empleó para mejorar sus generadores de corriente contínua, cita la leyenda, por una cifra millonaria que luego rehusó pagar. Se sabe con certeza que su compañía no aceptó subir el salario de Tesla de 18 a 25 dólares a la semana, lo cual significó su renuncia.

Su posterior acercamiento a Westinghouse y el pago de la patente por el desarrollo de la corriente alterna mejoró su economía y significó su independencia. Tesla desarrolló una impactante cantidad de mecanismos, invenciones y teorías dentro de las que concibió el primer radiotransmisor luego del descubrimiento de Hertz y en paralelo a los desarrollos de Marconi y Popov, y otros como el “Huevo de Colón” o la “Bobina de Tesla”, nombres con los cuales se conocían sus invenciones mientras su popularidad, cimentada también por su exótico origen, iba en aumento. Instalado en los Estados Unidos su carácter asocial no le impedía dar conferencias de prensa para estar en el centro de la escena. Asimismo su atildada manera de vestir y sus cuidados modales no se correspondían con la figura del “científico loco” y contribuían a una fama que, de manera disimulada, a Tesla le gustaba fomentar. 

Sus trabajos en tecnología inalámbrica y telefonía serian la base para que la actriz Hedy Lamarr desarrollara el “salto de frecuencia”, en origen pensado por la actriz austriaca para combatir los submarinos nazis y hoy usado para la tecnología wireless como el wi-fi y el bluetooth. Con ese perfil de película, y con mucha fantasía, Christopher Nolan lo llevó al cine en El gran truco, donde el no menos icónico David Bowie otorgó semblante al genio de Tesla, al que se añade ahora Ethan Hawke para Tesla, presentada en la última edición del Festival de Sundance y que nutre así una extensa galería de producciones que navegan entre el biopic y la total irrealidad en derredor de su persona. 

Cuando se aproxima un nuevo aniversario de su fallecimiento, acaecido un 7 de enero, la figura de Nikola Tesla (1856-1943), nacido hijo de padres serbios en hoy territorio croata, es presentada en la muestra virtual en conmemoración a los 70 años de las relaciones diplomáticas entre Serbia y Paraguay por el Museo de ITAIPU que exhibe Nikola Tesla: energía para el futuro, gracias a las gestiones de la Embajada de Serbia en Buenos Aires y en acuerdo con el Museo Nikola Tesla de Belgrado en el sitio www.itaipu.gov.py Así, la figura de Nikola Tesla, siempre entre la realidad y la fantasía, se ajusta a la importancia de sus inventos. Un legado clave para el desarrollo de diferentes variables contemporáneas como los impensados alcances tecnológicos en materia de comunicación. 

* El autor fue condecorado con la medalla Jan Masaryk del Ministerio de Relaciones Exteriores de la República Checa y con el Premio al Mejor Periodista Cultural de la Embajada de Italia. Investigador del Instituto de Artes del Espectáculo de la UBA y del Museo del Cine, es Académico de Número de la Academia Argentina de Artes y Ciencias de la Comunicación.