Se apodera la casta política de casi un cuarto del PBI

Hay que retrotraer los organigramas del Estado Nacional al año 1984.

El costo del Estado y de los amigos de la casta política es una cuenta que ha subido año a año y ahora los argentinos no la podemos pagar. Esta banda, hoy representada por Macri y sus secuaces, pero anteriormente por otros con las mismas intenciones y prácticas, nos quita nuestro dinero de diferentes maneras. * Impuestos.

* Impuesto inflacionario.

* El negocio de amigos. Peajes y empresas de servicios (generadoras eléctricas, transportadoras de gas y electricidad, redes de distribución, telefonía). El propio Presidente de la Nación se autorizó a sí mismo subas de peajes.

Entre impuestos, inflación, tarifas y expensas, no damos más. Eso se traduce en comercios que cierran, gente que no paga las expensas, caída en las ventas, suspensión de personal, quiebras, caída general de actividad, ruptura de cadena de pagos, etc. 

Es una enorme transferencia de dinero desde empresas y familias a los bolsillos de los políticos y proveedores del Estado (desde el que le vende baldosas a Larreta al que le vende Misoprostol a Rubinstein), las empresas de servicios y los que reciben subsidios directos (petroleras, fundaciones, etc.).

Desde el año 1930 hasta el año 2003, los gobiernos nacional, provinciales y municipales nos costaban entre un 22% y un 25% de nuestra riqueza. Con ese dinero se hizo la Argentina del siglo XX: Chocón, Salto Grande, Yaciretá, puentes varios, túnel subfluvial, Instituto Balseiro, Comisión Nacional de Energía Atómica, fabrica militar de aviones, INTA, INTI, YPF, Aerolíneas Argentinas, Conicet, universidades, rutas, puertos, hospitales, escuelas, decenas de aviones y barcos de guerra, submarinos. 

Supongamos que antes cobraban 25% de PBI en impuestos y malversaban el 10% de lo recaudado, un 2,5% del PBI (una fortuna). Entonces aplicaban el 22,5% del PBI en darnos servicios de Justicia, Educación, Salud, Defensa, Transporte (FFCC y Vialidad), Policía, control de fronteras, represas, puentes, rutas. 

Ahora nada de eso nos es dado. La conclusión posible es que aplican menos del 22,5% en servicios a la población.

¿Quiere decir que se apropian del 46% - 22,5% = 23,5% del PBI? Pareciera. Como dato accesorio: el estado británico sale 19,7% del PBI. Y no es que no roban.

TRANSFERENCIA INFAME

Los impuestos subieron de 25% a 46% del PBI. La transferencia de riqueza desde las personas y empresas a los políticos es un un 21% del PBI más que hace 20 años atrás.
La Argentina para crecer tiene que reinvertir 20% de su PBI. Este dinero (1 de cada 5 que ganamos) debe utilizarse para:

* Mantener las inversiones existentes (mantenimiento de puentes ferroviarios, repavimentaciones, arreglo de instalación de gas en las escuelas, reposición de cables, mantenimiento de maquinarias y rodados, arreglo de alambradas).

* Realizar nuevas inversiones (fábricas o nuevas líneas de montaje en existentes, nuevas matrices, instalar un tambo en un campo de invernada, poner un criadero de chanchos, construir un frigorífico o elevador de granos, comprar barcazas o buques de pesca). 

La suma de ambos conceptos debe ser del 20% del PBI para que crezcamos. Si ni siquiera mantenemos la capacidad instalada, la producción baja. Ejemplo: no se reparó un puente ferroviario en Salta, descarrilaron vagones (pérdida) y hasta que no se repare, la vía está inutilizable: menor capacidad de producción.

Así que tenemos un 21% del PBI más que se le saca a los privados que va a parar a las manos de los políticos. Dinero que no se invierte. Porque los políticos sacan su dinero del país: "El mecanismo" (1) y "El dinero de la corrupción nunca vuelve" (2). Ahí está la explicación de la falta de crecimiento la última década. 

Si queremos crecer debemos bajar los impuestos del 46% al 25%

LLORIQUEO

Ante la propuesta de baja de impuestos los políticos preguntarán cómo se repone esa caída de recaudación. No se repone. Se bajan para que quede más dinero en los bolsillos de las familias y las empresas. Justamente: no hay que reponer. El Estado debe recaudar menos y gastar menos. 
Hay que rebajar el gasto. Cuando se les exige esto gritan ajuste, ajuste. Peregrinan por los canales de televisión, ponen cara de compungidos y exclaman que uno quiere echar empleados públicos -verdaderos escudos humanos de los corruptos-. Cuando los políticos tienen que ajustar, le quitan el dinero a los jubilados, dejan de mantener los edificios escolares, etc. Jamás se desprenden de ningún privilegio.

El único ajuste que propongo es a los privilegios de la casta.

LOS COFRES

Las formas de apropiación de fondos públicos son mediante:

* Sobreprecios en las compras.

* Contratación de consultorías y asesorías.

* Donaciones a fundaciones y asociaciones de bien público.

* Entrega de subsidios a privados.

* Contrataciones ficticias. 

Por lo que la propuesta es la siguiente:

* Eliminar las compras superfluas, incluidos viáticos.

* Eliminar toda contratación de asesores y consultores.

* Eliminar transferencias a empresas.

* Eliminar transferencias a fundaciones (muchas de ellas en manos de políticos, otras que propagan intereses contrarios a los de la Nación).

* Las compras imprescindibles pagarlas a precio de mercado y no al doble o triple como ahora.
Recién luego comenzar a revisar el tema de personal del Estado.

El presupuesto nacional 2019 prevé compras corrientes por $ 109.502.545.462 y remuneraciones para sus agentes $ 437.791.499.510. Transferencias a empresas privadas en rubros energía, combustibles y minería de $ 206.444.663.677. Y en transporte $ 61.837.848.000. El Estado transfiere a un puñado de empresas más de la mitad de lo que cobran trescientos cincuenta y siete mil agentes. Gran parte de esas empresas pertenecen a políticos. 

MALVERSACION
 
El empleo público como forma de malversación de fondos públicos por parte de la casta política
El empleo público se divide en tres:

* Los sectores operativos (médicos, enfermeros, militares, fuerzas de seguridad, migraciones, guardaparques, docentes, SMN, etc.).

* Personal administrativo. 

* Familiares y amantes de políticos.

El primer grupo es intocable. 

El segundo puede estar sobredimensionado. Funciona en parte como un seguro de desempleo, con ingresos entre $ 30.000 y $ 40.000 mensuales brutos. Hasta tanto el país no esté en marcha y con niveles bajos de desocupación, esas personas deben seguir. Cuando el país prospere se les debe ofrecer ingresar al sector operativo. Ejemplo: capacitar empleadas administrativas como enfermeras.

El tercer grupo es una de las maneras de estafa de la casta política.

Un político, en vez de conformarse con cobrar su sueldo ($ 250.000.-) ingresa a la nómina del Estado a varios. El grupo familiar obtiene así ingresos de más de $ 1.000.000 mensuales (u$s 25.000).

Innumerables ejemplos: Amadeo y sus parientes, Zannini y su hija en el CMN, esposas de gobernadores o intendentes que cobran sus roles de damas de beneficencia (Secretaria de Acción Social), Marcos Peña y su parentela. 

AJUSTE SANO

Propuesta de reducción de personal:

Focalizarse únicamente en el personal jerárquico sin idoneidad (art. 16 de la Constitución Nacional) con ingreso sobre los $ 100.000-. Propongo retrotraer los organigramas a diciembre 1975 o marzo de 1984 (estado de derecho). 

Eliminar puestos inventados: viceministro, coordinadores, jefe de gabinete del ministerio, jefe de gabinete de asesores. Volver a ocho ministerios, pocas secretarías, frugalidad en las áreas jerárquicas.

Eliminar o dejar en un mínimo la figura de asesor en el Poder Ejecutivo. Echar a todos los familiares y amantes de políticos. Evaluar los agujeros negros que son Aduana, AFIP y ANSES.
No se trata de echar ascensoristas. Se trata de impedir a los políticos que roben un cuarto de PBI por año.

 

1 - http://www.laprensa.com.ar/467383-El-mecanismo.note.aspx

2 - http://www.laprensa.com.ar/468013-El-dinero-de-la-corrupcion-nunca-vuelve.note.aspx