"Es la oportunidad de volver al ascenso social"

La vigésima edición del Premio ADE al Dirigente de Empresa, cuyo acto de cierre tuvo lugar el martes pasado en el Rectorado de la UCES, permitió conocer la opinión de un puñado de destacados empresarios sobre el actual escenario político-económico.

Hubo, como pocas veces en los ámbitos de debate en los últimos años, coincidencia absoluta en que el país se enfrenta a una "enorme oportunidad" de restablecer la movilidad social, con la mirada puesta en volver "a la liga de las diez potencias mundiales que integraba en 1944". Una educación de calidad y la toma de decisiones en la empresa con responsabilidad y respeto por las relaciones de trabajo serán fundamentales para la concreción de las metas que se han fijado los sectores público y privado, remarcaron algunos de los galardonados.

Elizabeth O"Donnell, presidenta de ADE, dio la bienvenida al acto con un discurso en el que remarcó que "no es fácil el camino ni el contexto en el que se desenvuelve la alta conducción empresaria. Todavía existe en una parte de nuestra sociedad un gran prejuicio respecto de las empresas y los empresarios -dijo-. Muestra mínima de ello es la reciente toma de colegios secundarios en la Ciudad, como expresión contraria a la implementación de prácticas educativas en el ámbito del trabajo", interpretó.

Según O"Donnell, "son justamente las empresas las que aportan a la sociedad la creación de empleo genuino y contribuyen con los tributos a sostener al Estado para que cumpla con los fines que le son propio".

NUEVO PASO

Premiado en la categoría Comercio, Guillermo Dietrich, titular del Grupo Dietrich, ofreció una primera mirada esperanzadora. "Les digo a los jóvenes que no se asusten, que la Argentina es uno de los mejores países del mundo, aunque haya cambios a veces. Piensen que desde que nací se sacaron 13 ceros a la moneda, y acá estamos. La Argentina está hoy en un nuevo paso y va a volver a la posición que tenía en 1944, cuando dentro de la liga de los primeros diez países del mundo estaba sexta", aventuró.

Pedro Manuel Vigneau, de la Asociación Argentina de Productores en Siembra Directa, recibió el galardón en la categoría Agroindustria. "Sabemos del enorme potencial que tiene el país, aun con un 30% de argentinos en situación complicada. Tenemos ante nosotros una oportunidad increíble de recuperar el sueño del ascenso social", remarcó.

Para Enrique Cristofani, presidente de Santander Río, premiado en la categoría Servicios, "el país de hoy invita a soñar con dejar atrás décadas de decadencia. Hay fundamentos para creer, que tienen que ver con el involucramiento de una parte importante de la sociedad en la cosa pública. Como país nunca hemos trabajado en equipo, pero eso está empezando a cambiar", aseguró.

El resto de los empresarios reconocidos fueron la presidenta de la Asociación Iberoamericana de Mujeres Empresarias, Julita Maristany (Premio Especial); Gerardo Werthein, del Comité Olímpico Argentino (Entretenimiento); Enrique Alemañy, responsable de Ford Grupo Sur (Industria); y el presidente de la Cruz Roja, Diego Tipping (Empresa y Comunidad).