DESDE MI PUNTO DE VISTA

Argentina absurda, entre la mentira y el sinsentido

“¿¡Cavar trincheras!? ¿¡Con nuestros hombres cayendo como moscas!? No tenemos tiempo para cavar trincheras. Las tendremos que comprar prefabricadas.” Rufus T. Firefly

En la película Sopa de Ganso, el presidente Rufus T. Firefly, se convierte en primer mandatario del país Libertonia, gracias al desmanejo político de una sociedad absurda, la carencia de contrapesos opositores organizados y su ridícula pero pretenciosa verborragia. Sopa de Ganso es un juego de palabras referido a su nombre original: Duck Soup que se refiere a “una tarea fácil de hacer”. Si se supera la tristeza y la ira de estar sometido a la decadencia argentina, el hilarante guión describe muy bien a este gobierno marxista, en el sentido de Groucho Marx.

Hace muy pocos días, casi nada, Alberto Fernandez dijo: “Un chico que no va al colegio es un chico que pierde el contacto con sus compañeros. Pierde los tiempos necesarios para socializar con otros. Y pierde fundamentalmente la mirada del docente, que lo sigue y puede detectar qué chico necesita más atención. () ¿seguimos paralizados o tratamos de acomodar nuestra vida frente al virus? Está claro que elegimos la segunda opción. Es muy bienvenido que todos queramos volver a las clases presenciales y volver a favorecer la socialización de los chicos. Esto, además, va generando conducta: la conducta de levantarse temprano, de llegar a horario, de respetar un horario. Reglas de conducta que nos van formando en la vida en sociedad () Este año tenemos el desafío casi de hacer dos años en uno”, dijo el Presidente.

Pero pocos días después volvió a suspender las clases y gran parte de la actividad, contradiciendo su propio discurso. ¿Cuál de los dos Albertos Fernández miente? El año pasado Alberto erigió pedestales para los profesionales de la salud y hace escasas horas los culpó de atender afecciones que no son Covid. A la atención profesional de los médicos el Presidente la llamó “relajación”. El mandatario llegado al sillón de Rivadavia gracias al kirchnerismo que se percibe revolucionario e inclusivo prometió hacer cumplir sus decretos con las fuerzas federales en las calles, mientras insultaba con descaro a los discapacitados, a los niños y a sus madres. ¿Cuál es su pensamiento real? ¿Cómo saber cuando miente? Simple: Nos ha mentido siempre. Cada vez que habló.

“Es usted un hombre valiente, cruce la líneas, y recuerde que mientras esté ahí fuera jugándose la vida, nosotros estaremos aquí dentro pensando en lo idiota que es.”

Rufus T. Firefly

Nadie cree en los 15 días del decreto presidencial. Francamente no tiene sentido. ¿Qué podría cambiar en dos semanas sin una vacunación masiva? La crisis que desencadenó su último decreto se explica por la comprobación frontal del absurdo en el que el gobierno se desenvuelve y opera. El kirchnerismo que trató el año pasado de expropiar empresas y tierras amparado en la lucha contra el egoísmo empresarial, enmudece ante la estafa del farmacéutico Hugo Sigman, el empresario amigo que recibió por adelantado el pago por las  22,4 millones de dosis que jamás aparecieron. La promesa de la vacuna pasó de diciembre a mayo. Tampoco hicieron una gestión mínimamente decente con Pfizer. La administración de un vendedor ambulante resultaría más eficiente.

“¡Hasta un niño de cinco años sería capaz de entender esto!... 

Rápido, busque a un niño de cinco años, a mí me parece chino.”

Rufus T. Firefly

Dentro y fuera del Gobierno es enorme la desorientación. El Ministro de Educación había publicado en su cuenta de twitter que las clases presenciales no se suspenderían sólo dos horas antes del decreto del Presidente que decía lo contrario. El jefe de Gabinete Santiago Cafiero, sostuvo prepotente que distritos y empresas podían comprar vacunas, tratando de redistribuir las culpas de la carencia pero mostrando su feroz desconocimiento de los procesos legales y administrativos impuestos por su propia pluma que traban tal adquisición. La Ministra de Salud alarmaba con presuntos colapsos que eran desmentidos por los propios organismos oficiales. Todo esto se sucedía en horas, en simultáneo.

“- Odio los mensajes del frente. ¿Por qué no recibo nunca mensajes del lado? ¿De qué se trata?

–El General Smith reporta un ataque de gases. Quiere saber qué puede hacer.

–Que se tome una cucharada de bicarbonato en medio vaso de agua.”

Rufus T. Firefly

Otro dato sobresaliente de la actitud presidencial es que su actitud paternalista, tan pretenciosamente expuesta durante la campaña, transmutó del padre progre cantautor al padre más autoritario posible. Insensible, obseso, perturbado. Su necesidad de congraciarse con el kirchnerismo de cepa UBA/Nacional Buenos Aires lo aleja de las dolencias que padece el kirchnerismo profundo de La Matanza. Es que Kicillof no es peronista, en cambio los gobernadores e intendentes si. Como un gallito ciego recibe desaires de los segundos tratando de agradar al primero. Y a su mentora, claro.

“¿Quiere casarse conmigo? ¿Le dejó su marido mucho dinero? Responda primero a lo segundo.”

Rufus T. Firefly

Cuando Alberto hablaba sabía que debía tapar un dato liminar: la inflación de 4,8% mensual luego de seis meses seguidos con una variación de precios de similar porcentaje. La inflación anual podría terminar en 60%. Argentina tiene una inflación semanal superior a la anual de muchos países. ¿Cómo lo soluciona el Gobierno? Con más controles. Así con todo. Lo que se les escapa tratan de reprimirlo. ¿No funciona? Van por mayor represión y frustración. Para colmo los vencimientos de deuda no despiertan interés y se capta menos de la mitad de lo esperado. Si continúa esta tendencia será más presión sobre la emisión, sumado al inesperado gasto en energía por el congelamiento tarifario. La ridícula posición de Guzmán no difiere de la de Cafiero, Trotta o Vizzotti.

“-¿Se da cuenta de que nuestro ejército se enfrenta a una derrota? ¿Qué piensa hacer?

–Ya lo he hecho.

–¿Qué es lo que ha hecho?

–Me he pasado al otro bando.

–Con que al otro bando, ¿eh? ¿Entonces qué hace aquí?

–Bueno, es que aquí la comida es mejor.”

La excusa que le dio pingües resultados al comienzo de la pandemia ya está gastada y obsoleta: el crecimiento de los casos. Los récords tan bastardeados comparan positivos basados en distintas cantidades de testeos. La manipulación de los datos, que los medios adictos al pánico han repetido acríticamente, es una trampa que cosecha menos réditos un año después. Los feriados de Semana Santa y la ineficiencia burocrática hicieron su magia, en el desfasaje de la cantidad de contagios y con esa sola variable vienen justificando su accionar. El promedio de muertes tuvo su pico en octubre del año pasado para descender a un tercio de aquella cifra que es en lo que estamos ahora. Cada vez más argentinos desconfían de la televisión y confían más en la búsqueda de datos oficiales. Por eso se ponen nerviosos cuando desmiente la alarma la cantidad de muertes, la ocupación de camas o el índice de contagios por la actividad escolar. Las escuelas no representan el riesgo que dijo el Presidente, menos del 1% de la población involucrada dio positivo. No existe una propagación dentro de la escuela. Se manipuló a la sociedad con los datos.

“No permitiré injusticias ni juego sucio, pero, si se pilla a alguien practicando la corrupción sin que yo reciba una comisión, lo pondremos contra la pared… ¡Y daremos la orden de disparar!”

Rufus T. Firefly

Nos acusó el Presidente de habernos “distendido” y de habernos dado al “esparcimiento”. Como hemos visto eso no modificó los indicadores pero aunque así fuera: ¿Qué demonios tiene eso que ver eso con que se acabaron las vacunas? ¿Es por mostrar algún tipo de felicidad o vida social que la gestión dejó de traer los vuelos ampulosos que hacían llorar a las azafatas? ¿Nos quiere tristes, inmóviles y deprimidos mientras él y los suyos se sacan alegres selfies y esperan que les lluevan vacunas en forma de maná cubano? ¿Debíamos asumir un encierro eterno mientras el kirchnerismo liberaba miles de presos que en 2021 engrosaban la cifra de asesinatos en un 70% más que en el mismo período del 2020?

“- ¡Si le encuentran está perdido!

- ¡Qué tontería! ¿Cómo voy a estar perdido si me encuentran?”

Rufus T. Firefly

 

El Gobierno no tenía planeado estar con estas minucias a esta altura del año. Hay dos temas que le importan más y que se relacionan fuertemente: Justicia y Elecciones. Ni Rufus T. Firefly sería tan delirante de pensar que postergar un mes las elecciones podría cambiar este panorama. Por eso tampoco se entiende a la oposición que coquetea con mover el calendario sin ver que las postergaciones serán tan eternas como las renovaciones de la cuarentena hasta que las condiciones sean más favorables para Frente de Todos. Mientras la casta política alucina y la justicia hace la plancha, Argentina agoniza y ya no tiene margen. El sinsentido es terminal.

 

“A propósito, ya sé lo que me recuerda. Me recuerda mucho a un mono

–¿Qué?

–Sí, siento haber dicho eso. No es justo para los otros monos.”

Rufus T. Firefly