EL VALOR DE MERCADO DE LA EMPRESA SAN MIGUEL ES IGUAL AL DE UN TRILEX EN LA 5» AVENIDA DE NUEVA YORK

Argentina, a precio de remate

En activos de riesgo lucen nuevamente atractivos los bonos en pesos con tasa variable. En acciones, prometen los papeles de Transener, TGN, YPF, Ternium Argentina y Loma Negra. La crisis abrió una oportunidad para los inversores.

POR CHRISTIAN REOS *

El mundo sigue girando al ritmo de la pelea comercial de Estados Unidos y China. Los tweets de Trump y los comentarios del gobierno chino vía la prensa son los que definen el humor del mercado financiero global. Si bien en las últimas semanas los principales índices bursátiles tuvieron una evolución positiva, cuando uno mira los últimos meses observa una tendencia horizontal, en un zig-zag dominado por los cruces dialécticos de las dos mayores potencias, cada una con distintas necesidades.

Como comentamos en ocasiones anteriores, con un S&P cercano a los máximos, un P/E del índice en casi 18x, y un mundo que se desacelera (en parte porque las trabas comerciales van en ascenso), no vemos valor en el mercado de acciones. En términos relativos, no obstante, hay que destacar que las compañías pagan un dividendo atractivo cuando se lo compara con la (baja o nula) renta de los bonos soberanos a nivel global.

Mientras el mundo tiene poco para divertirse (está el Brexit, los tweets de Trump, los comentarios de Bolsonaro a la esposa del presidente francés Macron y no mucho más), en la Argentina nos entretenemos a lo grande, encontrándonos ante una nueva oportunidad (de las que se dan cada diez años) de adquirir activos a precios de remate. Todo esto gracias a unas elecciones primarias en las cuales no había nada para elegir, porque cada partido presentaba un solo candidato.

El sorpresivo triunfo por un elevado margen del binomio Fernandez en la primaria para presidente, candidato del partido opositor Frente Todos, puso a los inversores en modo pánico, generando una destrucción de valor pocas veces vista en la historia moderna mundial.

A esto se le sumó que el gobierno nacional decidió enviar al Congreso una propuesta para negociar los vencimientos de la deuda, y postergó el pago de las letras de corto plazo (en donde los individuos y empresas invertían su capital de trabajo), generando una estampida masiva, que está produciendo desarbitrajes de todo tipo.

Al gobierno no le quedó otra opción, al ver que el refinanciamiento de las letras de corto plazo sería nulo ante la incertidumbre que generó la política (obviamente, ningún país puede hacer frente repentinamente al 100% de sus vencimientos, en particular si el país en cuestión ya le pidió un monto record al FMI).

BONOS

Al posponer los vencimientos de los bonos cortos por seis meses, el gobierno cuenta con más poder de fuego para contener la devaluación de la moneda, pero será un tema con el que deberá lidiar la próxima administración apenas asuma (tendrá unas pocas semanas para convencer al mercado de que le vuelva a renovar los vencimientos).

Dada la reciente pérdida de valor del peso argentino (22% respecto al dólar en un abrir y cerrar de ojos), modificamos nuestro escenario para 2019 y 2020, previendo una nueva recaída en la actividad en los próximos meses y mayor inflación, por lo que estamos revisando las valuaciones de los activos financieros argentinos.

Luego de la paliza histórica en los activos locales, por primera vez en mucho pero mucho tiempo volvemos a ver atractivos a los bonos en pesos con tasa variable (no hace falta decir que es una inversión de riesgo), la mayoría de los cuales cotizan a 30%/35% de paridad, y permitirían recuperar la inversión en poco tiempo (incluso si sufren un postergamiento en los pagos).

A su vez, también por primera vez en más de un año, volvemos a ver valor en los bonos en dólares soberanos, siempre y cuando se consigan paridades menores al 50% en los títulos ley Nueva York, y menores al 45% en los ley argentina.

ACCIONES

En acciones, nuestra preferencia en servicios públicos está ahora en Transener y TGN, empresas que cotizan aproximadamente a 1 vez su Ebitda (TGS perdió atractivo relativo, ya que tuvo un mejor comportamientos que las otras). En energía, preferimos ahora a Central Puerto, ya que Pampa soportó mejor la baja de mercado.

Volvemos a ver atractivo en YPF, cotizando en mínimos de las últimas décadas. En bancos, estamos ahora indistintos entre BBVA Argentina y Macro (la capitalización de mercado del banco Supervielle equivale a 4 pent-houses en la 5» Avenida de Nueva York, pero en los próximos meses su balance sufrirá más que el de los otros bancos debido a su peor cartera crediticia).

En materiales, preferimos ahora a Ternium Argentina (la mitad de su resultado proviene de México) y Loma Negra en segundo lugar; Aluar pierde atractivo relativo, ya que mantuvo su valor de mercado en la reciente crisis. En alimentos, la productora de limones San Miguel, con tierras e instalaciones en Sudamérica (Argentina, Uruguay, Perú) y Sudáfrica, vale ahora prácticamente lo mismo que un triplex sobre la 5» Avenida en Nueva York.

* Gerente de Research de Allaria.