La española Ana Belén Beas, nueva directora artística del Regina, explica su proyecto

"Es doloroso ver un teatro cerrado"

La clásica sala de la avenida Santa Fe luce totalmente renovada. Los socios que apostaron a rescatarla esperan la ayuda del Gobierno. La actriz tiende un puente con su país llevando obras argentinas.

La actriz, productora y flamante directora artística del teatro Regina, Ana Belén Beas, remarcó la necesidad de algún tipo de ayuda gubernamental para encarar la titánica tarea que se puso al hombro junto a su socio, Miguel Angel Chulia, de devolver al complejo de la avenida Santa Fe a sus épocas de gloria.

Semanas atrás se realizó la gran reinauguración de la fachada, el foyer y la boletería de la sala, en cuyo edificio funciona también la Casa del Teatro, un albergue para artistas retirados con necesidades económicas y de vivienda.
Fue la española -que supo compartir escenario con Moria Casán en el musical "Luz Cenicienta"- quien le ofreció a Mirtha Legrand que la sala llevara su nombre, algo que la diva aceptó de inmediato, y por supuesto que estuvo presente y de punta en blanco durante la gran reinauguración. Pero pese a la repercusión mediática del evento, la ayuda del Gobierno aún no llega: "El ministro de Cultura de la Ciudad, Enrique Avogadro, nos llamó para ver en qué podían colaborar y para informarnos acerca de subsidios, becas y mayorazgos. Pero son medidas que recién se anuncian en febrero, para el año que viene. En un trabajo que es tan del día, que hay que hacerlo ya y pagarlo ya, no queda otra que hacerlo solos", confió Beas a La Prensa.

Como si no tuviera suficiente con las remodelaciones y la nueva programación del Regina, Ana Belén fue elegida por Juan José Campanella para interpretar el personaje de hija de Luis Brandoni en "Parque Lezama", obra que con su producción se mudará el mes próximo a España para hacer temporada en el teatro Fígaro.

-¿Cómo es apostar a la cultura en estos tiempos de crisis?
-Es muy difícil, sobre todo cuando estás solo. No hemos recibido ningún tipo de ayuda. Luego de que nombráramos la sala con el nombre de Mirtha Legrand, el ministro de Cultura nos llamó para ver en qué podían colaborar y para informarme acerca de subsidios, becas y mayorazgos. Pero son medidas que recién se anuncian en febrero, para el año que viene. En un trabajo que es tan del día, que hay que hacerlo ya y pagarlo ya, no queda otra que hacerlo solos. Uno lo hace porque es un amante de la cultura y porque es un sacrificio que por lo menos no queda en vano. Porque sabemos que como negocio nunca lo vamos a recuperar, pero como artistas, por lo menos levantamos un teatro, lo pusimos en pie nuevamente. Aguantaremos hasta donde podamos. Esa es la realidad. Por lo menos lo dejamos brillante, impecable, y pusimos nuestro granito de arena para la cultura, para que el teatro no estuviese cerrado. Lo pusimos a la altura de cualquier sala de categoría.

-Es una acción muy arriesgada, más en un país que no le es propio.
-La economía no está en su mejor momento. Hay cosas que quizás las haces por el dinero, por un negocio, y hay cosas que las haces por algo más. En nuestro caso, fue por un aporte a la cultura y por revivir un teatro, que para un artista es doloroso que esté cerrado. Ahora, siempre hay un límite. Uno tampoco lo hace inconscientemente, lo haces hasta donde puedes. Espero que estemos mucho tiempo más y espero recibir algún tipo de ayuda, sobre todo porque nosotros no mantenemos solamente el teatro sino que el alquiler que pagamos va para la Casa del Teatro. Ahí también hay un deber solidario porque no podemos abandonar o atrasarnos en un pago porque de eso dependen muchos artistas que están ahí alojados y que necesitan mucha ayuda. Por esa misma razón creo que tendría que haber algún tipo de ayuda para esta iniciativa, porque estamos haciendo esto de forma independiente y personal, y estamos colaborando con dos fines terriblemente importantes. Uno es mantener el teatro abierto y el otro, ayudar a la Casa del Teatro, que es una institución sin fines de lucro que está manteniendo a 23 artistas con pensión completa.

INTERCAMBIO CULTURAL
-¿Llevará obras argentinas a España?
-Así es. En este momento estamos llevando "Parque Lezama" a Madrid, al teatro Fígaro, con Luis Brandoni y Eduardo Blanco, y la dirección de Campanella. A nosotros nos interesa mucho poder hacer un intercambio cultural y llevar siempre algo que tenga texto argentino, o algún actor o director para seguir fomentando este intercambio que hoy en día es muy común, no sólo en el teatro sino también en cine y en televisión. Allá la obra se va a llamar igual, "Parque Lezama", los actores principales son los mismos y se hizo un casting en Madrid de actores argentinos, porque la verdad es que nos interesa ayudar a los artistas de acá que estén en España. Estamos súper felices. 

-¿Cómo es que se sumó al elenco?
-Hace algunas semanas Campanella me dijo que quería verme haciendo la prueba para el papel de hija de Brandoni, y luego me comunicó que quiere que sea yo la que lo interprete, así que ahora estoy viajando y aunque pensé que iba a estar en Madrid sólo unas semanas me tengo que quedar seis meses. Estoy reacomodando mi vida para poder hacerlo.

ADMIRACION
-¿Cómo ve la cartelera porteña?
-Mi visión es que Buenos Aires tiene una diversidad impresionante y una oferta brutal. Creo que es una de las capitales del mundo que más oferta cultural tiene y eso es buenísimo, es maravilloso. A mí me encanta ver de todo. Cuando estoy libre recorre desde la calle Corrientes hasta el teatro más off, más independiente, porque me encanta. Soy una gran admiradora de los actores y actrices argentinos, y me parece que tienen un nivel maravilloso y una creatividad increíble, a pesar de que no está fácil hacer teatro porque está muy complicado a nivel negocio. Me quito el sombrero ante todos porque realmente es de admirar lo que hacen. A los españoles nos gustan mucho los actores argentinos, nos gusta mucho la forma de actuar y de hablar.

-¿Cuál es su mayor aspiración con respecto al Regina?
-Mi mayor sueño es seguir haciéndolo brillar. Queremos remodelar los camerinos y que vuelva a ser tan glamoroso y con tanta luz como tenía antes. Han pasado tantos grandes por ahí que es un sitio fascinante. Me gustaría que funcionara con el brillo que se merece. Quiero mirar atrás y ver todo lo que se ha mejorado.