Uruguay, un escenario para el mundo
José Miguel Onaindia anticipa el Festival Internacional de Artes Escénicas, que recibirá a 22 compañías extrajeras. El argentino, con un pasado en la función pública, es ahora responsable de esta gran cita de la cultural charrúa. La presencia argentina, las principales propuestas y una mirada sobre la actual escena teatral.
En Uruguay "se ríen de los mitos, incluso de los históricos -dice Onaindia-. Hacen operaciones dramatúrgicas arriesgadas desde lo ideológico que, sin embargo, son muy aceptadas".
No es un "festival de capilla". No está dirigido sólo a entendidos. No se limita a Montevideo. Esos "no", en cierta manera, dan idea de una gran movida cultural que tendrá a Uruguay como epicentro entre el 13 y el 24 de agosto. Se trata del Festival Internacional de Artes Escénicas (Fidae), que ya va por su sexta edición y este año tendrá un presupuesto de casi un millón de dólares -500.000 del Estado uruguayo y 450.000 de espónsores privados-. Ese dinero permitirá llevar figuras de la escena teatral mundial como el autor portugués Tiago Rodrigues o el multipremiado dramaturgo y director francés Joel Pommerat (Francia es país invitado).
"Habrá teatro a gran escala y también propuestas más chicas, pero es un festival pensado para todo público", advierte José Miguel Onaindia, coordinador del Instituto Nacional de Artes Escénicas de Uruguay, quien visitó Buenos Aires para presentar oficialmente el Fidae en el país.
Onaindia es un abogado argentino con una vasta experiencia en gestión cultural. Fue presidente del Incaa (2000-2001) y del Centro Cultural Ricardo Rojas (2007-2008), incursionó en la política como candidato a diputado en 2011 y da clases de posgrado en Derecho en la UBA. Hace ocho años decidió instalarse en Uruguay y cumplir el sueño de tantos porteños: mejorar su calidad de vida lejos de la "locura" de Buenos Aires. Atiende a La Prensa en un bien porteño bar de la calle Paraguay. Afable, tranquilo, tal vez parezca uruguayo.
-¿Es tan real la fantasía de que en Montevideo se vive mejor?
-¡Sí! La calidad de vida cotidiana es mejor por ser una ciudad a escala humana. Y tiene todas las ventajas de una capital, con una actividad cultural muy intensa. Y no existen grandes obstáculos. No hay smog, contaminación auditiva. Estoy feliz allí.
TODO PARA VER
-Para el Fidae van a presentarse 22 compañías internacionales y habrá 39 espectáculos en total. Tantas propuestas pueden marear. ¿Qué hay que ver?
-Nosotros hacemos un Festival asequible para el público. Hemos diagramado posibles itinerarios para ver toda la programación. Decimos que si usted quiere ver los 39 espectáculos va a poder verlos. Tenemos obras de gran formato y producción en el auditorio del Sodre; danza con más de treinta bailarines; teatro físico canadiense o una propuesta de danza neoclásica. También hay reversiones de clásicos como "Pericles", de Shakespeare, con un elenco de España. Desde lo temático, el formato y lo estético hemos atendido a la posibilidad de la diversidad.
-¿Quiénes van de la Argentina?
-Emilio García Wehbi y Maricel Alvarez vienen con una performance. También Ciro Zorzoli con "La calma mágica", del español Alfredo Sanzol, que tiene a Claudio Tolcachir y Mariano Otero en el elenco. Estará también María Marull, con "Hidalgo". De hecho, hemos puesto el énfasis en las mujeres creadoras este año. También vendrá Thelma Biral, quien se formó en Uruguay y va a recordar a su maestra Margarita Xirgu.
LOS GRANDES
El espectáculo de mayores dimensiones del Fidae será "El hombre de la Mancha", que proviene de Bruselas y cuenta con un elenco de treinta intérpretes. También se destaca "Mrs. Dalloway", con un numeroso grupo español. En tanto, Tiago Rodrigues, uno de los más importantes dramaturgos del momento, va a ofrecer dos funciones en Montevideo y dos en el interior. Por su parte, Pommerat estará por partida doble. "Caperucita Roja", que escribió y dirige, será representada por un elenco francés. A su vez, "La reunificación de las dos Coreas", obra de su autoría que se transformó en éxito mundial, será montada por la Comedia Nacional uruguaya.
Onaindia informa que en Montevideo habrá 24 salas ofreciendo obras en el Fidae. En tanto, espera que durante las fechas del festival, gran parte de las piezas puedan circular por los 19 departamentos del país, ávidos de teatro.
-¿Cómo está la escena teatral en Uruguay?
-Hay un momento de gran efervescencia. Es una cartelera muy caliente, y también lo es la del interior. En cuanto a Montevideo, tenemos un promedio de entre cincuenta y setenta espectáculos semanales. Y se ve una gran centralidad de los teatros públicos. El auditorio del Sodre es muy importante, con gran repercusión.
LA OTRA ORILLA
-¿Cómo se percibe la enorme y variada producción de Buenos Aires desde allá?
-No se ve a Buenos Aires como algo que invada. Al contrario, existe mucho respeto por lo que hay acá. Se viaja, se ve. Son actividades escénicas complementarias. Diría que lo que sucede escénicamente en Montevideo no es semejante.
-¿Cuál sería su particularidad?
-En primer término, la institucionalidad. Esto se da desde la Comedia Nacional pero también con El Galpón y El Circular, que no son solamente teatros sino también cooperativas. Sus actores actúan y producen permanentemente. En segundo lugar, el uruguayo tiene bastantes menos prejuicios para tratar la historia y la política contemporánea. Es mucho menos mítico que el argentino. Entonces aparecen reflexiones muy descarnadas y relecturas sobre determinados hechos que en la Argentina es más difícil que se asuman. El uruguayo políticamente es más racional.
-Ellos también tienen sus mitos.
-Sí, pero poseen una mirada más desapegada. Se ríen de los mitos, incluso de los históricos: de los tupamaros, por ejemplo. Hacen operaciones dramatúrgicas arriesgadas desde lo ideológico que, sin embargo, son muy aceptadas.
-¿Qué se verá de Uruguay en el Fidae?
-Habrá diez propuestas: por ejemplo, "Cheta", de Florencia Caballero Bianchi, y "Ella sobre ella", de Marianella Morena. Mujeres, dramaturgia y mucha diversidad. Ese es el foco que tendrá el Fidae: un teatro para todos. No será un "festival de capilla", eso seguro.