Esperando la cosecha dorada

TrigAr 2019 mostrará al mundo el potencial del país

Una iniciativa federal, producto de la articulación público-privada, una gran apuesta de toda la cadena de trigo argentino y un desafío por la innovación y la sustentabilidad. Con esos tres ejes fue presentado el Primer Congreso Internacional de Trigo, que se realizará en el Complejo Ferial de la ciudad de Córdoba, del 5 al 7 de junio de este año.

El acto se realizó en la Casa de Córdoba en Buenos Aires, porque en esta primera oportunidad el ministerio de Agricultura y Ganadería de esa provincia encabezará la organización, con la colaboración de la Bolsa de Cereales de Córdoba y empresas e instituciones comprometidas con el desarrollo de este cereal en nuestro país.

El cónclave TrigAR 2019, tal como se lo ha denominado, constituye el 1º Congreso Internacional de Trigo orientado hacia el exterior, que tiene como principal objetivo mostrar el potencial del país para proveer trigo en cantidad y calidad al mundo.

Temas y disertantes

La agenda de temas es amplia y será abordada por calificados disertantes nacionales y del extranjero. El primer eje se denomina Argentina hacia el mundo, con los siguientes temas a tratar: Seguridad alimentaria mundial y el aporte de la Argentina en su calidad de exportador neto de alimentos; La oferta comercial del trigo argentino; La oferta comercial de la industria argentina de la primera y segunda transformación; Innovación y sostenibilidad en la cadena de Trigo

El segundo eje será: El mundo hacia Argentina y contemplará lo siguiente: Exigencias y retos de un comprador público de trigo y harina, y sus diferentes utilizaciones industriales; Contexto actual y futuro del Mercosur; Clientes históricos y recientes del trigo argentino en Latinoamérica; Perspectivas del mercado mundial de trigo 2019/20; Originación de trigo y trigo candeal en el norte de Africa: transformaciones de la oferta local, internacional y de sus políticas públicas; El mercado mundial de harinas y su impronta geopolítica; Nuevas tendencias en el consumo mundial de pastas y harinas.

Entre los disertantes, se contará con expertos nacionales e internacionales que analizarán las diferentes oportunidades que presenta este cereal y sus derivados en el mercado mundial.

Algunos de ellos son: Preeti Ahuja. Gerente de Práctica Global de Agricultura y Alimentación del Banco Mundial; Bernard Valluis, Presidente de European Flour Millers; Dan Basse, Presidente de AgResource Company; Pablo Maluenda, Vicepresidente Senior INTL FCStone Financial Inc.; Edson Csipai, Wheat Supply Manager en Bunge Alimentos; Claudio Zanáo, Presidente de Associaiáo Brasileira das Indústrias de Biscoitos, Massas Alimentícias e Paes & Bolos Industrializados" (Abimapi); Rubens Barbosa. Presidente de Associaciáo Brasileira da Indústria do Trigo (Abitrigo); José Luis Fuente. Presidente de la Cámara Nacional de la Industria Molinera de Trigo (Canimolt); Anna Lanzani, Experta en Marketing estratégico agroindustrial. Fund Departamentos de mercados en Bruselas, Tokio, Sidney y Buenos Aires; Silvina Fiant, Subdirectora Departamento de Información Agroeconómica de la Bolsa de Cereales de Córdoba., entre otros.

Se contempla la posibilidad de que la sede pueda migrar en ediciones posteriores a otras provincias argentinas. La organización apunta a sentar las bases para que TrigAr se repita cada dos años y que además, pueda servir como puntapié inicial en la fijación de una política de Estado con respecto al trigo argentino y el rol que deberá jugar el sector privado para llevar a cabo ello.

COSECHA DORADA

En tanto, un informe de la Bolsa de Cereales de Buenos Aires refleja que la alta inversión en insumos y fertilizantes por parte del productor fue el factor clave para lograr un récord en la última cosecha de trigo y cebada de 23.100.000 toneladas. El uso del nivel tecnológico alto aumentó un 6%, y el nivel bajo registró el menor valor desde la campaña 2010/2011.

La adopción de siembra directa alcanzó el 85% de las 7.200.000 hectáreas sembradas con cebada y trigo, un 4% por debajo de los valores de la campaña anterior.

Los técnicos de la bolsa porteña consideraron que este proceso tecnológico "es ampliamente adoptado, pero sufre fluctuaciones entre campañas. La problemática de malezas es difícil de controlar y en algunos casos se cosecha en condiciones de excesos de humedad. Estos fueron los principales motivos que condujeron a los productores, a realizar algún tipo de labranza".

El uso de tecnología ha variado de acuerdo a las regiones. En el norte del área agrícola la adopción alta de tecnología fue muy baja, donde el ciclo de los cultivos coincide con una época seca, y los rendimientos potenciales son bajos.

En el centro del área, los núcleos norte y sur se destacan por niveles de adopción de alta tecnología que superan la media nacional. Y finalmente, el sudeste de la provincia de Buenos Aires, el área central de los cultivos de invierno, alcanzó el 65% de la producción en niveles altos de tecnología.

Fertilización y fungicidas

La fertilización mostró una suba importante de la mano de un incremento del uso de fuentes nitrogenadas y representó el 68% del volumen total aplicado. Fue determinante para el mayor uso de tecnología por parte de los productores gracias a una mejora en la relación insumo/producto y un favorable clima para el desarrollo de los cultivos.

En promedio se fertilizó con 196 kilos por hectárea sembrada: 18 kilos más que en la campaña anterior. A nivel regional, promedió los 250 kilos en las principales zonas.

En el terreno del manejo de las enfermedades, clave en el ciclo de invierno y con un promedio de más de una aplicación de fungicida realizada, el consumo de fungicidas cayó un 5% en comparación con el ciclo 2017/2018, más allá que se aguardaba una baja más pronunciada.

Al respecto, el informe sostiene que las mezclas con carboxamidas alcanzaron un aumento de 8%, representando un cuarto del volumen total aplicado. En el cultivo de cebada, esta familia de productos adquiere una mayor relevancia e incluso desplazaron a las mezclas dobles. Mientras se esperan los resultados, el optimismo de los productores sigue en alza.