Nuevo fracaso de la ley de financiamiento de los partidos

No hubo acuerdo y el tratamiento del proyecto fue postergado hasta el miércoles próximo. El Senado dispuso diferir la sanción de la iniciativa que legaliza los aportes de empresarios a las campañas políticas. Frustración en el Ministerio del Interior. La Cámara aprobó, en otro orden, el proyecto sobre warrants.

El Senado volvió a fracasar en su intento de aprobar el proyecto de financiamiento de los partidos políticos como consecuencias de disidencias tanto entre los distintos bloques como dentro de cada sector político.

El secretario de Asuntos Políticos del Ministerio del Interior, Andrés Pérez, que había concurrido a presenciar el debate se retiró al conocerse su postergación. Abordado por la prensa, expresó su frustración y dijo ignorar las causas de la nueva demora.

La iniciativa, que sería debatida el miércoles próximo, apunta a dar transparencia a los aportes que reciban los partidos. Habilita los aportes de privados, pero sólo el 2% de los recursos que manejen las agrupaciones políticas podrán provenir de ese sector.

Hubo opiniones divergentes tanto dentro del oficialismo como de la oposición sobre la inclusión de los aportes privados y sobre el porcentaje que deben representar dentro del total de los recursos para las campañas.

También hay controversia respecto del porcentaje de gastos de publicidad en internet. Hay legisladores que reclaman que un 50% de los gastos en ese rubro sea obligatoriamente destinado a plataformas

nacionales, mientras que otros profieren que el 100% sea de libre elegibilidad. Estos prefieren aplicar los recursos a plataformas como Google y Facebook. Esta disidencia se produjo dentro del bloque oficialista. En el del PJ, en tanto, hay senadores que se oponen frontalmente al proyecto, cuya aprobación creen que constituiría un triunfo político del gobierno después de lo ocurrido con el escándalo de la “causa de los cuadernos” por la cual están en prisión empresarios y funcionarios del anterior gobierno.

En otro orden la Cámara aprobó y giró a Diputados un proyecto de ley de warrants, que apunta a dar a pequeñas empresas y productores rurales un instrumento de financiamiento rápido y de fácil acceso.

La ley vigente que data de 1914 prevé la emisión de warrants sobre frutos o productos agrícolas, ganaderos, forestales y mineros, así como sobre manufacturas nacionales. El nuevo proyecto redactado por el oficialista Alfredo De Angeli incluye ahora manufacturas no producidas en el país y amplía su vigencia de 6 meses a 12 de este instrumento financiero. Los warrants podrán negociarse además en el mercado de valores. La norma se aprobó por 48 votos a favor y la oposición de 8 senadores kirchneristas.