El británico Glyndebourne, uno de los grandes festivales del verano europeo, anunció su programación 2019

Lírica de alto nivel en la pradera

Se distingue por la meticulosa preparación de cada título y por el paisaje bucólico que circunda el recinto. Propone título clásicos y los habituales picnics -con ropa de gala- en los intervalos.

Fundados en 1934 por John Christie en sus posesiones rurales de Lewes, condado de East Sussex (no lejos de Brighton), los Festivales de Glyndebourne han merecido siempre singular reconocimiento internacional. Desde ya, junto con los de Edimburgo los de mayor relieve del Reino Unido, dos artistas alemanes de importante actuación en el Colón, Fritz Busch y el metteur-en-scne Carl Ebert orientaron desde sus inicios a la compañía, prestigiada por la seria preparación de cada título, cuyo temple estilístico y ensayos insumen el doble o triple del tiempo dedicado a las pruebas en las temporadas regulares de ópera de cualquier otro teatro.

De manera coordinada con los horarios de las representaciones, trenes especiales salen de Londres (Victoria Station) y con un pequeño trasbordo en el tramo final, permiten desembarcar en el recinto en poco más de una hora. También se coordinan los tramos de vuelta. Mucha gente, como es de imaginar, prefiere hacer en cambio el programa completo; esto es, ir con más tiempo y pernoctar luego en alguna posada de las inmediaciones.

NUEVAS PRODUCCIONES

Gus Christie, el actual Executive Chairman, acaba de dar a conocer el programa de este año, que incluye seis títulos que subirán a escena entre el 18 de mayo y el 25 de agosto. (Robin Ticciati es el responsable musical y Stephen Landgridge el flamante director artístico de la organización).
Previamente, el 1º de marzo, se ofrecerá en carácter de estreno mundial la ópera "Agreed" ("Puestos de acuerdo"), quinta del compositor y maestro británico Howard Moody, historia de amor, antiguos mitos y comarcas políticamente separadas, con texto de Anna Moody, Simon Iorio en el podio y el concurso de un coro intergeneracional formado por elementos locales.
El ciclo oficial se abrirá con "La condenación de Fausto" (trece funciones), potente leyenda dramática de Berlioz, en carácter de conmemoración de los ciento cincuenta años de la muerte del gran músico francés. En su primera presentación en Glyndebourne, este fresco lírico de magnífica envergadura contará con producción de Richard Jones y la participación de Ticciati (35), sin duda la batuta más destacada de la última generación británica, y tendrá como solistas al barítono Christopher Purves y el tenor Allan Clayton, elemento en ascenso, de intensa comunicatividad según nuestros colegas ingleses, ambos británicos, junto a quienes estará la joven mezzo québécoise Julie Bouleanne.

Siempre con la London Philharmonic y la Orchestra of the Age of the Enlightenment ("de la edad del iluminismo") como organismos residentes, "La flauta mágica" (julio 18, quince funciones) será exhibida con ""excitante nueva puesta"", de enfoques claramente políticos, perteneciente al creativo dúo canadiense formado por André Barbe y Renaud Doucet. Con la soprano rusa Sofia Fomina (Papagena), el barítono alemán Björn Bürger (Papageno), Caroline Wettergreen (Reina de la Noche), el tenor texano David Portillo (Tamino) y Brindley Sherratt (Sarastro), la ópera postrera de Mozart será conducida por el violinista y director piamontés Antonello Manacorda, discípulo de Claudio Abbado.

Sin perjuicio de "Rigoletto" (11 de octubre, dieciocho funciones), que la entidad ofrecerá por primera vez en sus ochenta y cinco años, en el marco de las giras fuera de temporada denominadas Glyndebourne on Tour (más vale tarde que nunca), el otro estreno visual le corresponderá a "Cendrillon" ("Cenicienta", 8 de junio, catorce presentaciones).

La delicada ópera de Massenet, de infrecuente ejecución, será concertada por John Wilson, arreglador, orquestador, director de comedias musicales, con mise-en-scne de mirada bien moderna elaborada por la irlandesa Fiona Shaw (Aunt Petunia Dursley en las series de Harry Potter), escenografía de Jon Bausor, imaginativo vestuario de Nicky Gillibrand, y la soprano australiana Danielle de Niese (protagonista), de origen cingalés, la mezzo estadounidense Kate Lindsey (Príncipe), además de Nina Minasyan, Lionel Lothe y Agnes Zwierko en las partes vocales.

HAENDEL INFALTABLE
En su versión de 2009, ya un clásico para East Sussex, otro cuento de hadas, gran favorito del públio: "Rusalka", de Dvorák (29 de junio, doce performances), título que se puso de moda en todo el mundo en las últimas décadas. También con Ticciati y producción muy bonita e imaginativa, perteneciente a Melly Stills, de grata fantasía, plena de colores en un contexto contemporáneo, la fábula sobre la enamorada ondina de agua dulce tendrá como intérpretes a la apasionada Sally Matthews y el norteamericano Evan Le Roy Johnson, Alexander Roslavets (Vódnik) y Patricia Bardon (Jezíbaba).

Volverá a darse asimismo "El barbero de Sevilla" en su edición 2016 (19 de mayo, quince funciones), con producción de Annabel Arden (una gentilísima y divertida comedia puesta en clave actual un tanto dudosa) y dirección del venezolano Rafael Payare. De importante actuación en Europa, Payare, a quien en una oportunidad se le negó el ingreso a los Estados Unidos, donde debía dirigir, por no tener la visa en condiciones, es egresado de El Sistema, implementado con tanta clarividencia por José Antonio Abreu, y trabajó con Dudamel.
El barítono moldavo Andrey Zhilikhovsky (Fígaro), el joven tenor sudafricano Levy Sekgapane (29, Almaviva), la soprano coreana de coloratura Hera Hyesang Park (Rosina), nuestro conocido Alessandro Corbelli (Bartolo) y Adam Palka (Basilio) asumirán las partes cantadas.

SOBRE EL CESPED
Ya en la parte final, "Rinaldo", de Haendel, compositor ineludible en Glyndebourne (8 de agosto, ocho representaciones) será concertada en su edición 2011 por el ruso Maxim Elemyanychev (31), con puesta del iconoclasta Robert Carsen y la importante mediosoprano norteamericana Elizabeth DeShong (Rinaldo), Giulia Semenzato (Almiena), Brandon Cedel (Argante), Jakub Józef Orli?ski (Eustazio) y Kristina Mkhitaryan (Armida) en los papeles principales.

Cabe destacar por último que en los intervalos, y siguiendo un hábito que en Glyndebourne viene de larga data, muchos de los concurrentes realizan picnics en los jardines que rodean el teatro y la residencia de la familia. Así, mientras las vacas pastan en la lejanía y otros como el que esto escribe preguntan por el crocket field, es común encontrar caballeros y damas vestidos de gala, sentados sobre el césped, con sus manteles en los que reposan sándwiches, vituallas varias, vinos y champaña. Cuando retornan al recinto, según nos decía Harold Rosenthal, el célebre editor de la revista Opera de Londres, la parte siguiente de la velada siempre les parece siempre mucho más grata que la anterior.