Mayumana, con el ritmo en la sangre

La compañía de percusión y danza Mayumana regresa al país. Desde este jueves y hasta el domingo ofrecerá en el teatro Opera su nuevo show "Currents". Un espectáculo que mostrará lo más virtuoso de este grupo artístico que se destaca por la creación de sonidos innovadores, melodías inéditas y performances realmente oníricas. Su director general, el israelí Boaz Berman, asegura haber exprimido al máximo su creatividad para darle forma a esta nueva ilusión rítmica. La Prensa conversó con él antes de su llegada a Buenos Aires.

-¿Qué novedades mostrará Mayumana en este nuevo show?
-Es un espectáculo nuevo y vibrante con algunas partes que nunca se vieron y con otras que son los ya clásicos movimientos de Mayumana, pero desde una nueva óptica. Este show trata sobre la diferencia entre el individuo y el grupo, y cómo diferentes corrientes pueden trabajar juntas, creando armonía y sincronización.
-¿Desde qué punto comienza a crear un nuevo show?
-Todo comienza desde una visión mía particular y luego, entre todos, empezamos a investigar, a hacernos preguntas y a imaginarlas y responderlas según lo que nos dictan los sonidos, las vibraciones y los sentidos.
La compañía Mayumana fue fundada en Tel-Aviv, en 1997, por parte de un triunvirato artístico compuesto por Eylon Nuphar, Boaz Berman y Roy Oferen. Su nombre proviene del término mayumanut que significa "habilidad o destreza". Sus espectáculos se basan en la unión de teatro, acrobacia, danza y percusión. Todo repartido en performances físicas muy depuradas que se suceden unas tras otras, mientras que la melodía central proviene de elementos que golpeados obtienen una sonoridad particular. Acompaña la acción un video multimedia que brinda diferentes perspectivas al público, alternando entre amplificar la acción en vivo y un punto de contraste con la narración en el escenario.
El grupo se hizo conocido mundialmente a partir de una publicidad de Coca-Cola que les dio visibilidad en las ciudades más importantes del mundo. Aún con sede en Israel, Estados Unidos, Latinoamérica y Europa se rinden a sus pies en cada una de sus giras. En España es donde obtuvieron siempre el mayor reconocimiento.

LA RENOVACION
-Teniendo su base en Israel, ¿cómo se da la renovación del elenco con artistas del resto del mundo?
-Cada elenco suma integrantes de diferentes países, es cierto. Nos reunimos antes, hacemos varias pruebas y salimos al ruedo. Estamos haciendo audiciones constantemente para ir configurando grupos locales que se mantengan en el tiempo. Yo soy siempre el que se repite y mi vida es bastante intensa teniendo que, todo el tiempo, ir armando este rompecabezas que se ve sobre el escenario. Pero lo disfruto mucho. Son aproximadamente ocho shows por semana que todos realizamos con igual energía y felicidad.
-¿Qué característica tiene que tener un artista para ser parte de Mayumana? -El reparto es multitalentoso, necesitan cantar y tocar música; tener carácter fuerte, casi irrompible, y saber que van a ser parte de un grupo en todo momento.
¿Deben saber tocar qué instrumentos?
-En esta gira estamos utilizando bajo, guitarra, tambores, pipas, stiks, barriles, cubos, percusión, batucada, mesas y tazas.
-¿Alguna gira que recuerde por algún motivo en particular?
Nuestros mayores éxitos fueron en Madrid. Fuimos por tres semanas y nos terminamos quedando ocho meses con localidades agotadas todas las funciones. Fue algo increíble, la multitud se volvió loca. Nunca habíamos imaginado un suceso así. Creo que fue un suceso único e irrepetible.
-¿Qué recuerda del público argentino?
-La audiencia argentina es muy cálida y nos tratan siempre de maravillas. Sabemos que aman la música y el ritmo, y que son guapos, elegantes y curiosos. Creemos que con "Currents" volveremos a conectarnos, como hicimos siempre con nuestros shows. La Argentina es de esos países donde uno sabe que va a ser bien tratado, tanto por el público como por la prensa, y eso no siempre sucede.