Elefante Blanco: fin de un ícono del abandono

Comenzaron las tareas de demolición del viejo edificio en la zona de Villa Lugano y se reubicaron a las familias que vivían allí. La construcción iba a albergar al hospital más grande de Latinoamérica, pero tras el golpe del 55 el proyecto cayó en el olvido. El gobierno porteño construirá allí la sede del ministerio de Desarrollo Humano y Hábitat.

Nació como un gran proyecto con la posibilidad de construir el hospital más grande de Latinoamérica. Sin embargo la desidia y el abandono hicieron que se convirtiera luego de varias décadas en un edificio semidestruido, con gente viviendo en su interior en condiciones de alta vulnerabilidad.

Finalmente luego de muchos años el denominado "Elefante Blanco" emplazado en Villa Lugano será demolido para realizar renovadas obras, que incluyen la nueva sede del ministerio de Desarrollo Humano y Hábitat porteño.

El Proyecto Elefante Blanco permitirá la integración urbana del Barrio 15 -al que se lo conoció como Ciudad Oculta- mejorando la calidad de vida de más de 25 mil personas, y que incluirá, la demolición de la vieja estructura edilicia.

En la actualidad, con una población de 24.478 habitantes, según estimaciones del gobierno porteño, hay en el barrio una situación de hacinamiento del 45,5 % Desde 2014, la cantidad de habitantes fue mermando, debido a las soluciones habitacionales.

Las obras de la Ciudad en el edificio comenzaron en 2017 con una mayor presencia del Estado, a través del saneamiento y limpieza del establecimiento, la realización de estudios de factibilidad y un trabajo junto con las familias para evaluar su relocalización.

Además, en el Barrio 15, comenzaron a realizarse trabajos de infraestructura que pondrán en valor tres sectores: el entorno del Elefante Blanco, el Eje Radial y el Eje Ferroviario.

La superficie total a intervenir es de 21.069,68 metros cuadrados con una inversión de 475.180.360 pesos. La empresa adjudicataria fue Niro Construcciones S.A. Se estima que la finalización de la obra será para abril del año próximo.

El nuevo edificio constará de subsuelo, planta baja, tres pisos y terraza verde. Las oficinas fueron diseñadas bajo el concepto abierto y en la planta baja se incorporó un sector lúdico, salón de usos múltiples y una sucursal del Banco Ciudad para sumar servicios a los vecinos.

Además, se está llevando adelante un taller del que participan 300 vecinos para diseñar el nuevo parque que habrá en el predio. Tendrá una extensión de 12.100 m2 y, por solicitud de los mismos, ya se acordó que contará con juegos para niños, áreas de descanso para los adultos mayores y un espacio de memoria para recordar la historia del barrio y el Elefante Blanco.

"La triste historia del Elefante Blanco ocultaba los sueños de muchos vecinos que vivieron por décadas a su sombra. Hoy, el nuevo proyecto es realmente un cambio sustancial para la vida del barrio: traerá a casi 1400 empleados que activarán el comercio y el trabajo en la zona todos los días. Además, los servicios del propio ministerio se complementarán con actividades culturales y recreativas en el nuevo parque", expresó a La Prensa Franco Moccia, ministro de Desarrollo Urbano y Transporte del gobierno de la Ciudad.

Las obras de integración urbana incluyen la construcción de redes pluviales, el soterramiento de la red eléctrica y de fibra óptica, la construcción de calles y veredas, la inclusión de luminarias, estacionamiento, mobiliario urbano, y la revalorización e incorporación de espacios públicos, plazas, parques y arbolado.

Para las tareas de demolición se va a trabajar en simultáneo con seis minicargadoras: cuatro van a realizar el trabajo de demolición con martillo desde un piso superior y las dos restantes van a hacer tareas de limpieza en el piso inmediatamente inferior. La destrucción se va a hacer piso por piso.

En tanto, se va a utilizar un sistema de riego para mitigar el polvo en los alrededores y a medida que se realice la demolición de las losas, se va a realizar una rampa metálica para descender al nivel inferior con las minicargadoras.

En planta baja va a haber un equipo para retirar los escombros de los pisos superiores y los materiales se van a separar en hormigón, mampostería y acero, para luego reciclarse.

La demolición del Elefante Blanco había generado polémica cuando se anunció el año pasado, ya que un grupo de vecinos que viven en el terreno lindero se negaban a irse sin una solución habitacional, lo que llevó a conformar una "mesa de diálogo" en la justicia local encabezada por la jueza Elena Liberatori.

Actualmente desde el gobierno porteño señalaron que quedan unas 10 familias dentro del predio con las cuales se está dialogando para coordinar el traslado.

En noviembre pasado el gobierno de la Ciudad fue habilitado por la Legislatura para iniciar la demolición, tras modificar la norma urbana que registra el predio donde está situado el antiguo edificio, sobre Piedra Buena al 3200, ya que esos terrenos no estaban autorizados por catastro para la radicación de dependencias gubernamentales.

SU HISTORIA

Este gran edificio que será demolido fue diseñado en la década del 30 con la intención de construir un hospital monumental destinado a combatir la temible tuberculosis que causaba muchos muertos por año en aquel tiempo.

Para realizar la obra de 62.200 metros cuadrados y 14 pisos la municipalidad donó un terreno fiscal ubicado en avenida Piedrabuena al 3200, en Villa Lugano.

Fue el diputado socialista Alfredo Palacios quien además impulsó un proyecto en el Congreso Nacional para que el Estado destinara otra cantidad de dinero para el hospital. La construcción del edificio comenzó finalmente en 1938.

Un año antes de los comienzos de la obra nacía en los alrededores del terreno el Barrio General Belgrano, que se pobló de familias de obreros del mercado de Hacienda y el frigorífico Lisandro de la Torre.

Eran tiempos de una gran oleada interna de migrantes que llegaban desde distintas provincias a probar suerte a la ciudad. Así aparecieron improvisadas casas para albergar a los trabajadores.
La obra sin embargo quedó paralizada. Tuvieron que pasar más de diez años para que recién en 1948, durante la primera presidencia de Juan Domingo Perón se retomara la construcción del edificio con el objetivo de convertirlo en el hospital más grande de América Latina.

En aquellos años otro gran edificio sería levantado pero correría la misma suerte: en el barrio de la Paternal se construía lo que sería el más importante hospital pediátrico del país. Tiempo después también caería en el abandono, convirtiéndose en el denominado Albergue Warnes (ver recuadro).

Tras el golpe del 55 se suspendió definitivamente la obra del hospital de Lugano. Fue así como con el correr de los años el predio comenzó a degradarse. Creció el asentamiento y los pobladores se iban afincando en terrenos en muy malas condiciones. El edificio que los pobladores llamaron "hospitalito" pasó a ser para el común de la sociedad el "Elefante Blanco"

Se cuenta, en tanto, que el nombre de "Ciudad Oculta", donde queda el "Elefante Blanco" proviene del tiempo del mundial de fútbol que se jugó en el país en 1978.

El por entonces intendente Cacciatore dispuso que se levantara un muro en esa zona de asentamientos para que los turistas que venían por el mundial no vieran las precarias casas.
En 2011 el gobierno de la Ciudad se hizo cargo del edificio. Allí vivían casi cien familias en el predio del Elefante Blanco. La zona se presentaba contaminada, poniendo en riesgo la salud de sus pobladores.

En 2012 el edificio fue noticia ya que se filmó allí la película "Elefante Blanco" dirigida por Pablo Trapero y protagonizada por Ricardo Darin.