Cristina Kirchner irá a juicio por la causa de la obra pública en Santa Cruz

La medida fue tomada por el juez federal Julián Ercolini quien consideró que la ex presidenta "habría perjudicado los intereses confiados al violar su deber de administrar y cuidar fielmente los bienes del Estado nacional que estaban bajo la órbita de su responsabilidad".

El juez federal Julián Ercolini envió hoy a juicio oral a la ex presidenta Cristina Kirchner en la causa en la que está procesada por direccionar de manera ilícita obra pública nacional a favor del empresario Lázaro Báez en Santa Cruz.

"Cristina Elisabet Fernández, en su carácter de presidente de la Nación, entre el 10 de diciembre de 2007 y el 9 de diciembre de 2015, habría perjudicado los intereses confiados al violar su deber de administrar y cuidar fielmente los bienes del Estado nacional que estaban bajo la órbita de su responsabilidad, en función de su calidad de jefa de gobierno y responsable política de la administración general del país", sostuvo Ercolini en la resolución. 

Tras conocerse esa decisión, la causa fue enviada a la oficina de sorteos de la Cámara Federal de Casación donde quedó asignado el Tribunal Oral Federal 2, a cargo de Jorge Gorini, Rodrigo Giménez Uriburu y Jorge Tassara.

La actual senadora nacional será juzgada en esta investigación junto a los detenidos Julio De Vido (ex ministro de Planificación y aún diputado nacional), el ex secretario de Obra Pública José López; el primo del fallecido ex presidente Néstor Kirchner, Carlos Kirchner, y Báez, según la resolución del juez.
También irán a juicio el ex subsecretario de Obra Pública Abel Fatala y el ex director de Vialidad Nacional Nelson Periotti, entre otros.

En la causa elevada a juicio oral se investigó la firma de 52 contratos por un valor actualizado de 46.000 millones de pesos.

Las conductas de la actual senadora tuvieron como fin -según el juez- "procurar un lucro indebido propio o de terceros, como por ejemplo, del empresario Lázaro Antonio Báez".

Ercolini rechazó pedidos de sobresemiento y negativa de ser enviados a juicio por parte de las defensas de De Vido, Báez y otros acusados, mientras que la ex presidenta avaló la decisión de ser juzgada por un tribunal oral.

El juez seguirá con la investigación en lo referido a otros involucrados, sobre los cuales habrá luego una resolución para el envío a juicio.

De Vido está detenido en la cárcel de Marcos Paz por otras causas de corrupción: Yacimientos Carboníferos Río Turbio y la compra de buques de gas licuado.

Baéz tiene prisión preventiva en la llamada "ruta del dinero K", una investigación que el juez federal Sebastián Casanello ya envió a juicio oral y quedó a cargo de otro Tribunal, el Oral Federal 9.

La ex presidenta ya fue enviada a juicio oral por la venta de dólar futuro al final de su gobierno y está procesada con prisión preventiva en la causa por supuesto encubrimiento del atentado a la AMIA, a raíz de la denuncia del fallecido fiscal Alberto Nisman, y también en la causa "Los Sauces".

En un futuro habrá que determinar si las distintas causas enviadas a juicio oral se unifican en un sólo tribunal, como parte de un megajuicio de la corrupción en el kirchnerismo, como ya sugirió la Cámara Federal porteña en distintos fallos.

En este megadebate entrarían el direccionamiento de la obra pública a favor de Báez, que, según la Cámara, sería la matriz del entramado criminal.

El cobro de supuestos sobornos para otorgar obra pública y otros negocios a empresarios como Báez y el también detenido Cristóbal López habría derivado luego en maniobras de lavado de activos que se investigan en la ruta del dinero K, Hotesur y Los Sauces, estas dos últimas vinculadas a alquileres de propiedades de la familia Kirchner.